Foro Liderazgo: El trabajo de la Fundación Ronda para la implementación orgánica de la inclusión laboral

La ratificación que Chile hizo el 2008 a la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad que las cosas comenzaron a cambiar. Se modificó la ley 20.422 sobre la inclusión social de las personas con discapacidad, y luego se creó la Ley 21.015 que incentiva la inclusión laboral de quienes tiene alguna discapacidad.

En esta ocasión, María José Escudero, directora ejecutiva de la Fundación Ronda, habló sobre el trabajo que viene para la fundación y la sociedad en materias de inclusión laboral, en un nuevo capítulo de Foro Liderazgo conducido por Max Raide de El Mostrador.

«Esto (la ley de inclusión laboral) es un puntapié inicial, para nuestra fundación es una excelente medida porque pone el tema en la palestra, da a comentar, moviliza, porque lamentablemente el chileno funciona desde la normativa y de la multa», dice Escudero. La Fundación Ronda nació hace 4 años y busca transformar las culturas de las empresas chilenas para que sean más inclusivas, no solo desde un puesto de trabajo, pero viendo la inclusión como un tema integral.

«Creemos que es muy importante una frase que se acuño en la convención: ‘nada sobre nosotros sin nosotros’. Los grandes problemas que se han generado en los proyectos de incorporación de personas con barreras son porque no nos ponemos en el lugar de la persona. No le preguntamos a esa persona que quiere, como quiere ser incluida», explica Escudero.

La ley de inclusión genera una obligación en cuanto a la contratación de las personas, pero no determina un proceso, ni establece mecanismos de ayuda que generen la inclusión dentro de las empresas, ese trabajo ha sido dejado a las diferentes fundaciones. «Hoy nos llaman de una empresa grande y nos piden 300 trabajadores con discapacidad, y nos asusta porque no es la lógica de la ley. La ley busca promover el empleo de personas en situación de discapacidad, pero desde la sociedad civil queremos que sea de forma orgánica que sea de una forma cuidada, que entendamos que nos son estereotipos los trabajos que tenemos que ofrecer; o sea si es una persona ciega, no lo llevemos al telemarketing, entendemos que es lo que quiere y para qué es bueno», dice Escudero.