Juan Pablo Solís de Ovando, director de CCU-Control, y Renato González, gerente general conosur de Diageo, conversaron sobre el consumo responsable de alcohol en Chile en un nuevo capítulo de Agenda País 2030, conducido por Max Raide.
Es innegable el crecimiento que ha tenido la oferta de bebidas alcohólicas en nuestro país, con una mejor variedad y calidad de productos para un consumidor cada vez más informado y conocedor del tema.
Pero también existe una preocupación constante sobre las cifras que rodean el consumo de alcohol en Chile, para que se mantengan en un nivel adecuado, sobre todo en los más jóvenes, sin los riesgos asociados a una ingesta excesiva.
Por eso, lo primero es aclarar los datos, sobre todo luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) señalara a Chile como el país de mayor consumo en la región.
«Eso fue un malentendido. Fue un estudio que se hizo el año 2010, que fue el año del terremoto. Los datos se mandaron los primeros días de marzo del 2010, entonces hubo dos cosas importantes que falsearon este estudio: el derrame de casi cien millones de litros de vino, y el gran error que viene del alcohol ilegal, que nunca se había hecho un estudio de cuánto era», explicó Juan Pablo Solís de Ovando, director de CCU-Control.
Cifras posteriores sitúan a Chile de manera muy similar al promedio mundial de consumo de bebidas con alcohol y lo deja número 12 en Latinoamérica y 27 en la OCDE.
El también presidente de la Asociación Pro Consumo Responsable de Bebidas Espirituosas (Aprocor) sostuvo que «esto es súper importante porque así se desarrollan las políticas públicas. ¿Por qué era tan importante tener la cifra real de consumo? Para saber dónde está el problema de nuestra población».
En ese sentido, manifestó que «el problema no es el consumo excesivo, Chile no tiene consumo excesivo. Lo que sí tenemos nosotros es problema en la población joven».
Y agregó: «Sobre eso tenemos que enfocar nuestras políticas públicas, porque en el resto no tenemos un problema».
En eso concordó Renato González, gerente general conosur de Diageo, líder mundial en bebidas alcohólicas. «El consumo promedio no es alto. El problema en general, no solo en Chile, es el consumo excesivo cercano al fin de semana, especialmente de jóvenes. De ahí la importancia de hacer políticas interesantes que ayude a la sociedad a entender el peligro de tomar algo en exceso», explicó.
«La nueva generación está tomando más conciencia, pero la velocidad de conciencia es muy pequeña. Lo que necesitamos en Chile, Argentina o cualquier otro país, es un esfuerzo mayor no solo de la industria, sino del gobierno, de la sociedad, para atacar el problema. Son problemas puntuales que con el esfuerzo de toda la sociedad se puede arreglar. Viene mejorando, pero no a la velocidad que buscamos», manifestó.
Crecimiento de la industria
Atacama y Coquimbo son las únicas regiones de nuestro país donde se puede producir pisco, ya que es una bebida alcohólica que cuenta con denominación de origen.
“Es una gran ventaja para el producto pisco. Estamos hablando de la posibilidad que tiene el producto de globalizarse mundialmente. Para ejemplo tenemos coñac, champaña, porque tú no puedes producir un coñac en ninguna otra parte del mundo que no sea en la región de cognac y por eso se llama denominación de origen”, recalcó Solís de Ovando, representante de la industria pesquera.
De esta forma, está establecido que seis variedades de pisco se pueden producir en esas regiones.
“Lo hace especial. Y el turismo también ayuda mucho al desarrollo, en este caso, del pisco que es nuestro producto emblema”, manifestó.
“Yo le veo un gran futuro al pisco”, agregó.
Para Renato González, existe un desafío importante para que el pisco crezca como categoría a nivel global.: un mayor entendimiento entre los productores chilenos y peruanos. “Yo creo que hay espacio para ponerse de acuerdo, porque tanto el pisco de Chile como el de Peru son muy buenos y los dos tienen mucho para expandirse globalmente, pero mientras haya esa rivalidad, los dos pierden”, señaló.
“Un esfuerzo de los dos países a respetar sus regulaciones y a hacer del pisco una denominación de origen por regiones creo que podría ayudar mucho a la categoría”, añadió.
Además, el vicepresidente de Aprocor también resaltó el importante crecimiento que ha existido en nuestro país el whisky, tanto el scotch (escocés) como el americano.
“Vamos a continuar invirtiendo muchísimo, porque creemos que es una categoría muy importante, pero también creemos que la industria general de espirituosos va a crecer mucho en todas las categorías”, sostuvo.
Esto se debe a que el consumidor sabe cada vez tomar mejor y con mayor calidad. “Se nota que la calidad de tragos en Chile ha mejorado mucho”, destacó.