Médico experto en políticas públicas de control de drogas contó la experiencia y logros de su país. Mientras otros especialistas adelantaron una de las nuevas y peligrosas adicciones: la tecnología.
No sólo las drogas son adictivas. Eso quedó más que claro en el panel «Todos Adictos» del Congreso Futuro, donde tres expertos hablaron de las variadas sujeciones que afectan a la sociedad.
El primero en abrir el foro fue el médico portugués Joao Castel Goulao, quien habló sobre la adicción a las drogas y las políticas para aminorar el número de personas dependientes a estas sustancias.
Con su enorme experiencia como Coordinador Nacional de la Política Sobre Drogas de Portugal, Castel repasó la historia de los estupefacientes en su país, y las tácticas utilizadas para disminuir las altas cifras de personas adictas que habían en la década de los ‘90.
Joao contó que el plan elaborado por la Primera Estrategia Nacional de Drogas 1999 en Portugal tenía seis aspectos fundamentales: tratamiento, prevención, integración social, reducción de daños, evaluación y descriminalización.
Esas aristas fueron efectivas, por lo que se les otorgó el reconocimiento de la ONU, ya que tenía el espíritu que está organización busca resaltar.
“Las políticas de drogas debieran ser basadas en la salud y no en el castigo. Esto es un desafío del futuro”, planteó.
El segundo en exponer fue Daniel Halpern, quien advirtió sobre el uso irresponsable de las Tecnologías de la Información y la Comunicación.
El experto habló sobre la distracción cognitiva de la que somos parte al tener pantallas con diferentes tipos de estímulos y las consecuencias en la salud que esto contrae, como la obesidad.
En esa línea el Doctor en Información y Ciencias de la Comunicación habló sobre el uso excesivo de las redes sociales y la adicción que estas causan.
Halpern contó sobre estudios científicos que demuestran que las interacciones en estos soportes cómo “likes” o “comentarios” aumentan la cantidad de dopamina en el cerebro.
“Los jóvenes dicen sentirse solos”, dijo el especialista, quien apuntó a la necesidad de conexión que tienen las personas y al excesivo uso de plataformas como Facebook, Instagram o WhatsApp.
De esta manera el académico asoció la dependencia a estas plataformas con el aumento de consumo de antidepresivos en los últimos cuatro años.
El tercer participante de este foro aseguró que somos “adictos a la vigilia”. El Doctor en Biología Diego Golombek se ha dedicado a estudiar la cronobiología y en su experiencia dijo que “hemos perdido entre una y dos horas de sueño en los últimos 50 años”.
De hecho, bromeó con esta cifra diciendo que en el año 2758 el ser humano no dormirá más.
El profesor de la Universidad de Quilmes responsabilizó de este problemas a los avances tecnológicos, ya sean la luz eléctrica o el brillo de las pantallas de celulares o televisores.
Frente a esto, dijo que despertar con alarma no es normal y que debemos ajustar nuestros relojes biológicos.
Ante esta situación, Golombek crítica al huso horario que hay en Chile y Argentina. “Estamos mal situados con el huso horario”, planteó y propuso un cambio.
Concluyendo su ponencia el experto respondió la pregunta que enmarca a este Congreso Futuro sobre ¿Qué especie queremos ser? “Queremos ser una especie que cumpla sus sueños, y para cumplir los sueños hay que dormir”, manifestó.
“Cumplamos nuestros sueños y vamos todos a dormir”, concluyó.