Desde el 4 de marzo, las edificaciones ya existentes deben adoptar a las normas de accesibilidad. En el caso de las piscinas públicas, deben tener un sistema para que las personas con discapacidad puedan acceder a ellas.
Las altas temperaturas de la Región Metropolitana son la excusa perfecta para disfrutar de las piscinas y, según un estudio realizado por Teletón, solo 10 comunas cuentan con piscinas municipales con sillas hidráulicas para facilitar el ingreso al agua a las personas con discapacidad.
Tal como destaca la kinesióloga de la institución, Soledad López, el agua es un ambiente que promueve la igualdad, que permite mayor autonomía a las personas con movilidad reducida o que son usuarios de sillas de ruedas.
“El agua tiene múltiples beneficios, por ejemplo, los niños que son espásticos o que tienen rigidez en su musculatura pueden movilizarse con mayor fluidez en una piscina temperada ya que sus músculos se relajan”, afirmó
“También pueden realizar trabajo aeróbico, actividad que no pueden realizar fuera del agua. Este es un entorno que les entrega autonomía e igualdad”, añadió.
Por su parte, la directora ejecutiva de Teletón, Ximena Casarejos, explicó el llamado de la institución para romper con las barreras y lograr una inclusión real.
“Solo 10 comunas de la Región Metropolitana tienen sillas hidráulicas o alzadores para las personas con discapacidad en sus piscinas municipales, la invitación es para que se atrevan y comprometan con la inclusión real promoviendo rutas accesibles y elementos como el que hoy destacamos en las piscinas”, manifestó.
Por su parte, la arquitecta de Ciudad Accesible, Kristine France, destacó la importancia de prepararse para cumplir con los plazos que establece la Ley de Accesibilidad.
“El 4 de marzo de este año se acaba el plazo para que las edificaciones ya existentes se puedan adaptar a las normas de accesibilidad, decreto 50 de 2016. En el caso de las piscinas públicas deben tener un sistema para que las personas con discapacidad puedan acceder”, sostuvo.
Para Francisca Rojo, paciente de Teletón que llegó hasta la piscina de Recoleta, una de las 10 comunas que cuentan con la silla hidráulica, esta representa un gran apoyo.
“Generalmente lo que más nos cuesta es el ingreso al agua, muchas veces hay desconocimiento de estas herramientas que nos ayudan. Probé esta silla y es muy cómoda, ojalá todas las piscinas lo incorporaran”, explicó.
Por su parte, el alcalde de la comuna de Recoleta, Daniel Jadue, manifestó que “la silla que tenemos en la comuna la ocupan adultos mayores y jóvenes que son parte de nuestros programas de inclusión. En nuestro caso fue una donación que recibimos de un particular”.
La silla hidráulica tiene un valor aproximado de entre 10 y 13 millones, sin embargo, hay otras alternativas económicas, como los alzadores, también conocidos como tecles, que tiene un costo mucho menor y son una real alternativa como herramienta de accesibilidad.