Alianza entre entidad nacional y grupo oncológico extranjero permitirá que estudio clínico analice tecnología chilena, para un mercado de más de 200 millones de personas. “Este es un importante hito en el camino de internacionalización de la medicina de nuestro país”, señaló Flavio Salazar, creador del procedimiento que utiliza células del sistema inmune del mismo paciente. En etapa IV, un 60% de los pacientes triplican la supervivencia, sin efectos secundarios y mejorando la calidad de vida.
Un acuerdo de colaboración estratégica y transferencia tecnológica entre la Universidad de Chile, la empresa chilena Oncocellus y el centro de investigación celular de Brasil, San Lucas Cell Therapy Group, permitirá que la terapia chilena, diseñada para combatir el melanoma y el cáncer de próstata, llegue a un mercado de 200 millones de personas y sea analizada en el corto plazo a través de un ensayo clínico. Los datos obtenidos en Brasil serán de carácter mundial, porque están regulados por la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) de Brasil, un organismo similar a la FDA, garantizando de esta manera la aprobación regulatoria de la terapia a nivel global.
La tecnología desarrollada por el equipo de Flavio Salazar, director alterno del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia, IMII, y vicerrector de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile, utiliza células del sistema inmune del propio paciente, estas son vacunadas contra el tumor fuera del cuerpo y luego de 12 días son inyectadas nuevamente al organismo. Desde el punto de vista inmunológico, ha logrado excelentes resultados: un 60% de los pacientes en etapa IV, triplican la supervivencia, mejorando la calidad de vida y sin efectos colaterales.
“La terapia TAPCells -que hemos desarrollado íntegramente en la Universidad de Chile y transferido a la empresa Oncocellus para su comercialización, estaba en una fase de internacionalización, principalmente enfocada en Latinoamérica. Por este motivo se decidió presentar nuestros resultados al grupo San Lucas”, comenta el Dr. Salazar.
“Acá en Chile no tenemos una regulación para algunos de estos temas de terapias celulares, actualmente se está trabajando para eso, pero no hay una legislación específica, en cambio en Brasil si la hay. Entonces, es un camino interesante para la tecnología TAPCells, que ha tenido efectos importantes en pacientes con melanoma y cáncer de próstata y que nos permitirá avanzar en su aprobación regulatoria a nivel latinoamericano”, agregó el científico nacional.
El consorcio brasileño es uno de los grupos oncológicos más importantes de la región especializado en oncología, hematología e investigación en cáncer, abarcando más de 10.000 consultas y aproximadamente 18.000 quimioterapias al mes.
“Este grupo tiene una red de servicios clínicos con sedes además en Río y en Salvador que atiende en general a miles de pacientes oncológicos y de otras enfermedades y cumple con todas las condiciones de regulación para este tipo de terapias, de acuerdo a la legislación brasileña, que es la más estricta a nivel latinoamericano, muy parecida a la FDA en EEUU, esa es la ventaja que tienen”, enfatiza el científico de IMII.
La alianza incluye además colaboración en materias científicas, académicas y clínicas que fortalecerán las capacidades de ambas instituciones. Al transferir biotecnología clínica avanzada entre países de la región, ambos grupos se convierten en pioneros en medicina celular en Latinoamérica.
El objetivo de la asociación es llevar innovación tecnológica para el tratamiento del cáncer a Brasil. “Ellos están muy interesados en generar estudios clínicos en inmunoterapias que estamos desarrollando en Chile y de esta forma establecer una colaboración científico tecnológica”, señala Salazar.
Este acuerdo se enmarca dentro de los recientes avances regulatorios en productos medicinales de terapias avanzadas desarrollados por Anvisa de Brasil, país pionero en estas materias en la región.
Los resultados que se obtengan en los futuros estudios clínicos permitirán acercar esta tecnología a la mayoría de la población, tanto en Chile como en Brasil.
Los inicios de TAPCells datan del año 2002, cuando Flavio Salazar y un equipo de investigadores de la Universidad de Chile, decidieron enfocarse en una terapia efectiva contra el melanoma y cáncer de próstata.
Dentro de las terapias inmunológicas, que cuentan con estudios clínicos, es la alternativa más accesible, sin efectos secundarios, de corta duración y única desarrollada en nuestro país. “Además, a diferencia de otras inmunoterapias basadas en anticuerpos, es de menor costo y no requiere de un tratamiento mensual permanente y continuo”, explica el investigador.
“En Chile hemos realizado un seguimiento promedio de 10 años a los pacientes que han sido protocolizados con melanoma, que están en la fase IV de la enfermedad, es decir, que se encuentran en etapa de metástasis. Son aproximadamente 200 personas, la mayoría lleva entre 10 y 15 años con nosotros”, agrega.
En este contexto el equipo de Salazar ha confirmado que el 60% de los pacientes generan respuesta inmune permanente en el tiempo. “De ese grupo, uno de cada tres ha sobrevivido más de 5 años. Hay aproximadamente un 22% de todas las personas que hemos tratado que han tenido una sobrevida mayor de 5 años, lo que significa que -desde el punto de vista clínico- se consideran curados de ese cáncer”. Los pacientes metastásicos que superan esa cantidad de tiempo sin recurrencias se consideran libres de la enfermedad.
El melanoma es el cáncer de la piel menos común, pero es altamente agresivo. Si es detectado en etapas tempranas se puede operar, extirpar y curar en gran parte, el problema está que cuando hace metástasis es muy resistente a todos los tratamientos como quimio o radio terapia y ahí las expectativas de vida no sobrepasan los diez meses.
“Está asociado principalmente a los tipos de piel blanca, pelo rubio o colorín. Esos son los que tienen mayor incidencia porque tienen algún componente genético que explica un 3 a 5% de los casos, pero generalmente son espontáneos. Esto no significa que las personas de pieles más oscuras no puedan tener melanoma, pero es menos frecuente”, aclara el Dr. Salazar.
La incidencia en Chile es de 2,5 casos por cada 100 mil habitantes. Sin embargo, en otros países el número se eleva considerablemente, como es el caso de Australia, en donde la tasa es de 30 casos por 100 mil habitantes. “Esto se debe a que son inmigrantes europeos de raza blanca que viven en zonas asoleadas, es la combinación perfecta para el melanoma”.
TAPCells se basa en un tipo de células especializadas, llamadas células dendríticas. “Estas células pertenecen al sistema inmune y se encuentran circulando en todo el organismo, principalmente en los lugares de mayor posibilidad de agresión, como la piel”, explica el investigador.
Lo que hacen estas dendríticas es que cuando se produce alguna infección o tumor, ellas van y se acumulan en este sitio de agresión, capturando moléculas de las células tumorales y activando de esta forma a los linfocitos que eliminan el tumor. “El problema es que a veces en los pacientes, las dendríticas no reaccionan porque las señales son débiles, porque los tumores se escapan o las inhiben”.
“Entonces, lo que nosotros hacemos es ayudar al sistema inmune sacando células, trabajándolas en laboratorios para que se activen y sean capaces de entregar toda esa información. Después las inyectamos directamente al organismo. En definitiva, educamos a estas dendríticas para hacerlas más eficiente, con mayor cantidad de células, más concentrados y con los antígenos necesarios para atacar al del tumor requerido. Esto genera respuestas inmunológicas potentes que son capaces de impedir metástasis principalmente”, finaliza Salazar.