Abandono, presencia de basura y la construcción de una costanera llevada a cabo por una empresa que cuenta con antecedentes de irregularidades, son algunas de las cosas que ponen en peligro al humedal La Señoraza ubicado en la comuna de Laja en la región del Biobío. En ese contexto, distintas agrupaciones y los vecinos del lugar han manifestado su disconformidad con el proyecto, ya que aseguran está generando gran daño ambiental.
Hoy en día existen alrededor de 5,6 millones de hectáreas de humedales a lo largo de nuestro país. Este tipo de ecosistema que transita entre lo terrestre y lo acuático, es vital para la supervivencia humana. Pero actualmente el humedal de Laguna La Señoraza y El Pillo, ubicado en la comuna de Laja -Región del Biobío-, se encuentra amenazado por la construcción del “Paseo Costanera Sur Laguna Señoraza”, de la Constructora Manque.
El proyecto fue aprobado por el Consejo Regional en 2015 y en mayo del 2020 comenzaron las construcciones, a pesar de que en noviembre del 2019 la Municipalidad de Laja, junto con la Seremi del Biobío y la empresa CMPC Celulosa S.A firmaron un convenio para proteger la Laguna La Señoraza y El Pillo.
Isolde Medina, de la agrupación ciudadana ambientalista Salvemos La Señoraza, asegura que el proyecto en cuestión comenzó en tiempo de pandemia, sin informar a la comunidad, sin estudio ni declaración ambiental.
Frente a esta situación, a un mes de comenzadas las construcciones, en junio de este año, la comunidad de Laja presentó un recurso de protección a la Corte de Apelaciones de Concepción contra el municipio de Laja y la constructora Manque Ltda. La moción fue aprobada y la justicia ordenó la paralización de las obras de construcción.
Hoy en día las y los vecinos del lugar junto con las distintas agrupaciones enfocadas en proteger el humedal están buscando que este sea sometido a una evaluación de impacto medioambiental, el cual afirman debería ser llevado a cabo por Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) y así establecer el daño que se podría ocasionar, ya que la costa sur del humedal es lo único que va quedando sin construir.
Desde la constructora aseguran que no tienen la facultad de someter el proyecto a una evaluación de impacto medioambiental, ya que es el titular del proyecto quien debe hacerlo, en este caso, la Municipalidad de Laja. De igual forma, aseguran que se realizó un nuevo levantamiento topográfico y un nuevo estudio del suelo para evaluar las condiciones actuales del terreno y que se hizo un nuevo estudio hidrológico tomando en cuenta la normativa actual, el cual se encuentra actualmente en revisión por parte de la Dirección General de Aguas.
En este contexto, se consultó a la Unidad Medioambiental de la Municipalidad por el conflicto que existe hoy entre los vecinos y el proyecto de construcción de la costanera. Su respuesta: “Nosotros no damos entrevistas”.
La actual polémica no es la única en la que se ha visto envuelta la constructora. La empresa cuenta con antecedentes de irregularidades y falsificación de documentos, los cuales se resumen en no cumplir con las Bases de Licitación de una obra que se adjudicó por cerca de $1.332 millones de pesos para la construcción del Polideportivo de Laja en el 2013.
Los antecedentes que fueron acogidos por el tribunal en contra de Manque Ltda., finalmente demostraron la falsificación de documentos por parte de la constructora, así como la omisión de la municipalidad liderada por Vladimir Fica para fiscalizar a la empresa cuestionada durante el proceso de licitación.
Para las organizaciones ambientalistas y vecinos resulta llamativo que luego de la decisión del tribunal, nuevamente, el mismo alcalde y la misma empresa estén involucradas en un nuevo negocio que hace peligrar un importante ecosistema de la zona.
Pero desde hace años las alarmas de las y los vecinos del lugar se encuentran encendidas debido a la condición en la que se encuentra el humedal La Señoraza. La presencia de basura, afloramientos de algas, falta de mantención y de estudios ambientales, así como ausencia de programas de difusión y educación ambiental, han sido una constante en el lugar, pese a la peor crisis hídrica que se vive en la historia de Chile.
Frente a esto, la Municipalidad de Laja explica que el cuerpo de agua “no está reconocida por las autoridades pertinentes como humedal”, a pesar de que un 45% de este se encuentra en suelo urbano y especialistas como Esteban Flores Haltenhoff, ingeniero Civil Hidráulico y magíster en Ciencias de la Ingeniería con mención Hidráulica y Medio Ambiente, aseguran que la Laguna La Señoraza y la Laguna El Pillo se encuentran unidas por un conjunto de humedales, y conforman un sistema interconectado, formando así un gran humedal completo.
Frente al no reconocimiento como humedal urbano, el 18 de noviembre de este año la organización ¡Salvemos La Señoraza! viajó hasta Concepción para exigirle a la Seremi de Medio Ambiente de la Región del Biobío, la declaración de Humedal Urbano de la Laguna La Señoraza y El Pillo. Sin embargo, no obtuvieron respuesta alguna.
En el mundo, los humedales ocupan el 6% de la superficie terrestre y desde el comienzos del siglo XX hemos perdido más de la mitad de ellos. Estos ecosistemas son la principal fuente de agua potable para las personas, son los encargados de controlar las crecidas de agua, además de ser una recarga de aguas subterráneas y ayudar a mitigar el cambio climático.
Son los mejores almacenes naturales de CO2, ya que absorben hasta 50 veces más que las selvas tropicales. El 40% de las especies vegetales y animales del planeta viven o se reproducen en estos ecosistemas y un cuarto de ellas están en peligro de extinción, según la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
En Chile, entre las principales causas de la degradación de los humedales están el desarrollo urbanístico, e industrial y la mega industria agrícola y minera.
Respecto a esta situación Enrique Cruz, miembro de la Red de Humedales Chile afirma que lo que le falta a nuestro país con respecto a la protección de humedales son dos cosas; lo primero es una “ley que proteja a los humedales, independiente si son urbanos o no, porque lo que actualmente existe es una ley que regula su uso, pero no los protege” y lo segundo es que “se incorporen a los Instrumento de Planificación Territorial, ya que gran parte de los problemas medioambientales se producen por eso”.
En este contexto, las y los vecinos de la comuna de Laja junto con distintas organizaciones ambientalistas, están buscando mayores restricciones para proteger la zona y así evitar el deterioro y la degradación de nuestro ecosistema.