Salud
“Si no promovemos medidas estrictas, vamos a encontrarnos lamentablemente en dos o tres semanas más con una ola incontenible», aseguró la epidemiología María Paz Bertoglia.
«Las autoridades chilenas deben comunicar de manera clara los riesgos de la enfermedad del coronavirus y dejar de lado los mensajes contradictorios para la población», afirmó la epidemióloga y presidenta de la Sociedad Chilena de Epidemiología (Sochepi), María Paz Bertoglia.
Bertoglia explicó en una entrevista que “no se está entregando un mensaje claro y directo a la ciudadanía sobre el gran riesgo que cada persona tiene cuando sale de su casa, y lo que necesitamos es que los peligros del Covid-19 sean comprendidos por la población”.
Chile enfrenta una segunda ola de contagios en pleno verano, con una ciudadanía angustiada después de meses de encierro por la pandemia y equipos de salud fatigados de tanto trabajo, tras el colapso de los recintos hospitalarios en las zonas más afectadas por el virus, hace seis meses atrás.
En este nuevo escenario de emergencia, la académica de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile consideró fundamental “contar con una campaña comunicacional de elementos simples, que se mantenga en el tiempo y que invite a la población a sopesar los efectos de la pandemia”, la cual no existe en estos momentos.
Los casos de la neumonía se han ido multiplicando en las últimas semanas hasta superar los 4.000 diarios a nivel nacional, y junto con ello ha subido la demanda de camas críticas, principalmente en las regiones del norte y del sur del país, no obstante, la comunicación y el manejo de riesgos no ha sido acorde, sostuvo Bertoglia.
Por el contrario, “hemos visto campañas comunicacionales planas, unidireccionales, que no toman en consideración la gran variabilidad de la población”. “Por ejemplo, las estrategias se diseñan desde un privilegio que no tiene toda la población, que es el Internet, entonces no hay un correlato para llegar a la parte no alfabetizada o que no comprende ciertos mensajes, porque están mal diseñados de base”, advirtió la experta en divulgación científica.
Asimismo, Bertoglia cuestionó la pertinencia del permiso especial de vacaciones que dispuso el Ministerio de Salud para aquellas personas que quieran viajar por el país sudamericano en este período estival, a la vez que se mantienen abiertas las fronteras para el ingreso de turistas, quienes deben presentar su PCR negativo.
Aseguró al respecto que estas indicaciones del gobierno “chocan y colisionan” con las recomendaciones de la comunidad científica, porque “se están validando de manera explícita acciones como transitar entre regiones, lo que no se condice con la realidad epidemiológica tan grave que estamos enfrentando y que necesita un mensaje mucho más claro y enérgico para comprender el riesgo real”.
De acuerdo con los datos oficiales, los permisos de vacaciones suman casi 800.000 desde que se implementaron el 4 de enero pasado y diversas localidades ya han reportado alzas en los casos de Covid-19, como ocurre en las regiones Valparaíso, Coquimbo y La Araucanía, los destinos más demandados por los viajantes.
En el municipio de Zapallar, por ejemplo, los casos activos del virus han crecido un 833 % desde que un grupo de jóvenes organizó una serie de fiestas clandestinas en el exclusivo balneario de Cachagua, al que asiste la élite del país, y cuyos participantes y casos de contagio aún no han sido totalmente identificados por los fiscalizadores.
“Si no promovemos medidas estrictas, vamos a encontrarnos lamentablemente en dos o tres semanas más con una ola incontenible, con una gran cantidad de casos y nuestra capacidad hospitalaria es poco elástica, por lo que aumentará la letalidad”, afirmó al respecto Bertoglia, quien instó al gobierno a acoger las recomendaciones de su comité asesor y a trabajar más con las organizaciones de la sociedad civil y la ciudadanía.
Señaló que los mensajes contradictorios, “también generan un impacto y una fatiga que te pueden llevar a tomar decisiones que van en contra”, como cuando “muestran a personeros públicos que no están usando mascarilla en público y después al otro día tienes a la autoridad ‘retando’ a las personas que no lo hacen”, recordó, respecto de la imagen que circuló por las redes sociales del presidente Sebastián Piñera sin mascarilla en una playa de la zona centro.
Bertoglia afirmó que el recrudecimiento de la pandemia en Chile y en la región depende “de muchos factores, no es solo un tema de que la población se quiere portar mal, sino que pasa por conocer complejos fenómenos de comportamiento”, al momento en que el país acumula más de 677.000 casos confirmados y supera los 17.500 fallecidos.
Por ello, destacó la importancia de incluir a las ciencias sociales y a los estudiosos del comportamiento social en las campañas de comunicación dirigidas a las personas, tal como sucedió en el control de la epidemia del ébola en África Occidental, entre 2014 y 2016, donde se incorporó en los equipos de trabajo a sociólogos, sicólogos y antropólogos.
Para Bertoglia, la aparición de la vacuna “es una noticia esperanzadora”, pero “no serán esos esfuerzos los que contendrán esta ola, sino los esfuerzos epidemiológicos que tienen que ver con trazar y con disminuir los riesgos”, alertó la epidemióloga, quien participó esta martes en el panel “Un virus entre nosotros”, en la décima versión del Congreso Futuro, el mayor encuentro de divulgación científica de la región.
