En Chile no existían lineamientos claros y estandarizados para evaluar los resultados de los procesos de restauración, por lo que la guía viene a cumplir un rol fundamental: aportar en los desafíos medio ambientales que existen actualmente en en el país.
Fruto de un trabajo inédito, que recogió información actualizada disponible en Chile y el mundo, así como la visión de profesionales, técnicos y también habitantes locales vinculados al tema, fue presentada la primera Guía para el Monitoreo de la Restauración de Bosques a Escala de Sitio con que cuenta el país.
Esta publicación marca un hito no solo en términos del sector forestal, sino que también respecto a la acción climática de Chile. Esto, considerando que una parte importante de los compromisos nacionales en el Acuerdo de París pasan por acciones restaurativas, como una de las Soluciones Basadas en Naturaleza (SbN) que aportan a enfrentar el cambio climático y sus efectos.
La guía se elaboró en el marco del proyecto “Desarrollo de alianzas para la gestión de la restauración de bosques en Nahuelbuta”, ejecutado por el Gobierno Regional del Biobío, Fundación Nahuelbuta, Asociación de Municipalidades de la Región del Biobío y WWF Chile, con financiamiento de la Unión Europea (UE).
Fue presentada en un webinar en donde el jefe de Cooperación de la Delegación de la UE en Chile, Ewout Sandker, valoró el aporte realizado desde el proyecto y desde el territorio, destacando el impacto global que también podría tener en el contexto de las medidas y acciones para abordar la actual crisis climática.
En la misma línea, el jefe del Departamento de Planificación y Ordenamiento Territorial del Gobierno Regional del Biobío, Jorge Urrea, agradeció el trabajo efectuado para apoyar y promover la restauración en el país, destacando especialmente la participación y aporte de los representantes del territorio de Nahuelbuta.
Como destaca Carlos Vergara, Encargado de Bosques y Restauración de WWF Chile, si bien actualmente se implementan diversas iniciativas orientadas a la restauración, existe una brecha en términos de monitoreo en el país.
“Hay muy pocos proyectos que consideran este aspecto, menos aun con esfuerzos sistemáticos, lo que no se condice con la importancia crucial que tiene el seguimiento y manejo adaptativo de las acciones de restauración. Ante este vacío, realmente hoy no podemos saber con seguridad cuántas hectáreas se están restaurando en forma efectiva y con qué beneficios de largo plazo en Chile, lo que puede complicar incluso el cumplimiento de compromisos internacionales”, señaló el experto.
Durante el webinar fue posible conocer dos experiencias exitosas de monitoreo de restauración de ecosistemas, tanto desde el sector público como privado. Estos fueron los casos del Parque Nacional Torres del Paine y el de Forestal Arauco.
En tanto, Marta González, presidenta de la Red Nacional de Restauración y profesional de Infor sede Biobío, valoró la publicación de esta guía, enfatizando que si bien existen otras publicaciones sobre el tema, ésta destaca por un punto que considera clave: el hacer partícipes a las comunidades, para que también puedan construir planes de monitoreo, realizar estas evaluaciones y utilizar los resultados que el monitoreo genere.
“Es un paso muy valioso y rescatable de esta guía, porque la transferencia hacia las comunidades de los distintos atributos que queremos ir evaluando es clave. No se puede dejar de lado a las comunidades para que formen parte de este acompañamiento, ellas están en el territorio y tienen que ver con la temporalidad en que ocurren diversos eventos que pueden haber variado en el territorio”, comentó.
Desde Nahuelbuta, Cledia Flores, presidenta de la Agrupación de Recolectores Nalqueros Pehuen, realizó un llamado a la protección permanente de las zonas de recolección, incorporándolas como Áreas de Alto Valor de Conservación.
Por su parte, Pedro Peña, miembro de Fundación Nahuelbuta y del Consejo para la Restauración de Nahuelbuta, hizo hincapié en que la zona es relevante no solo por su biodiversidad, sino que también por constituir un refugio bioclimático, que hoy está amenazado.
“Nahuelbuta es un sistema hipercomplejo, conectado con el Océano Pacífico, la corriente de Humboldt, y el clima y el agua de la zona dependen de esta cordillera, algo que los pueblos originarios tienen súper claro”, puntualizó.
Durante el webinar también se presentó un Geoportal interactivo, desarrollado por WWF Chile, en donde es posible encontrar información sobre el proyecto en Nahuelbuta, así como el detalle de todas las iniciativas de restauración desplegadas en el territorio.
“Esta contribución al monitoreo a escala de sitio es clave, no solo para asegurar y comprobar que las acciones que se implementan tengan resultados, sino que también para ser considerada a escala del Plan Nacional de Restauración a Escala de Paisajes. La Guía de pasos para un entendimiento común sobre el monitoreo de la restauración y aporta a aquella conversación pendiente sobre cómo vamos a medir el avance hacia los compromisos de cambio climático en relación a bosques”, manifestó Trevor Walter, coordinador del Programa Paisajes Terrestres de WWF Chile.