La iniciativa se realiza bajo la ejecución del proyecto GEF Humedales Costeros, el cual desde el 2020 tiene por objetivo asegurar la mantención de las condiciones normales de la laguna, favoreciendo la vida natural y las actividades productivas de la zona.
Este jueves se realizó la ceremonia de inauguración de sensores de alerta temprana ambiental en el Humedal de Cáhuil, iniciativa que se enmarca dentro del “Proyecto GEF Humedales”, el cual permitirá, a través de dos equipos telemétricos, medir variables ambientales del humedal.
En este lugar, hace más de dos años se realiza esta iniciativa con el fin de asegurar la mantención de las condiciones normales de la laguna, favoreciendo la vida natural y las actividades productivas de la zona.
“Estamos entregando el equipo telemétrico que va a permitir medir condiciones ambientales de la laguna Cáhuil, para que después la Municipalidad de Pichilemu pueda tomar la mejor decisión de aperturar la barrera. La idea principal es que siempre esta laguna se mantenga como un estuario y mantenga su condición natural”, señaló la seremi del Medio Ambiente, Giovanna Amaya.
La laguna de Cáhuil naturalmente abre y cierra su barra de arena, según la época del año y en directa relación con lluvias y mareas. Por lo que abrir la barra de forma mecánica cuando la laguna posee un bajo nivel de agua, en marea alta o en período de marejadas, aumenta el ingreso de arena y el embancamiento.
A raíz de lo anterior, bajo el Proyecto GEF Humedales Costeros se elaboró un protocolo de manejo de la barra, con base científica y en consulta a los servicios públicos y la comunidad.
Este documento asegura la mantención de las condiciones normales de la laguna, favoreciendo la vida natural y las actividades productivas de la zona.
En este sentido, el protocolo indica que, ante variables específicas de: Nivel del agua, Grado de salinidad y Nivel de oxígeno, se abrirá la barra fundamentando la decisión de la Municipalidad de Pichilemu.
Para medir estas variables es que se estudió la dinámica de la laguna, e instaló instrumentos de medición, cuyos datos serán vigilados y analizados por el municipio de Pichilemu, y serán totalmente públicos para la toma de decisión operativa de apertura de barra.
El alcalde de Pichilemu, Cristián Pozo, agregó que “después de muchos años de trabajo, de estudios y de conversación con la ciudadanía, hoy día ya podemos obtener datos relevantes para poder tener claridad de cómo funciona nuestro humedal de Cáhuil y de esa forma, tener parámetros objetivos que nos van a permitir tomar decisiones respecto de la apertura de la barra”.
Cabe destacar que serán dos los equipos de medición que estarán funcionando en la Laguna de Cáhuil, uno de ellos ya está instalado en el sector del Puente de Cáhuil, y el otro equipo estará instalado en el sector de barrancas.
El presidente de la junta de vecinos N°3 de Cáhuil, Luis Polanco, explicó que “para nosotros como localidad de Cáhuil, es un tremendo avance, es un proceso que lo empezamos desde el primer día y ya se están viendo los frutos. (…) Esto es un gran aporte para Cáhuil, para el tema del humedal, involucra a todos los sistemas productivos, ya sean las ostras, los salineros y también los pescadores”.
Como complemento a esta iniciativa, el Proyecto GEF Humedales Costeros está trabajando en un Plan de Gestión Integral para la conservación del humedal Laguna de Cáhuil.