El próximo 26 de abril comienza a regir oficialmente este sistema, y pese a que se implementará de forma gradual, existen ventajas en el corto plazo para los colaboradores. Psicólogo organizacional y docente entrega los principales beneficios asociados.
La puesta en marcha de la ley de 40 horas laborales ya es un hecho. Este viernes 26 de abril, las empresas en Chile comenzarán a disminuir de forma gradual la jornada de trabajo para llegar, este año, a las 44 horas semanales. Con lo anterior se busca contribuir a mejorar la calidad de vida de los trabajadores tanto a nivel personal como en el mismo espacio de trabajo.
En esa línea, el psicólogo organizacional y académico de la Facultad de Psicología y Humanidades de la Universidad San Sebastián (USS), Rodrigo Pardo, comenta los principales beneficios asociados a esta ley que ya ha sido implementada con éxito en países desarrollados como Reino Unido, donde el 2022, 61 empresas la instauraron logrando disminuir en un 57% la rotación de personal, según indican en el estudio The Results Are In: The UK’S four-day week pilot.
“Algunos beneficios de la puesta en marcha de la ley de 40 horas laborales se relacionan, principalmente, con menores índices de estrés entre los colaboradores, y a la vez, un sentimiento de mayor valoración hacia ellos por parte de la empresa. Además, los trabajadores podrán conciliar el trabajo con sus compromisos familiares y sociales de forma más fácil”, comenta Pardo.
Una medida que complementa la reducción de jornada y también impacta de forma positiva en los trabajadores es el sistema híbrido, un modelo ya conocido en Chile y el mundo, y que comenzó a instaurarse por la pandemia de Covid-19. Al respecto, el psicólogo organizacional explica que “este método de trabajo contribuye a incrementar el engagement y bienestar de los trabajadores, sobre todo en el segmento de jóvenes profesionales”.
Con la reducción de la jornada, han surgido cuestionamientos respecto a la productividad y la eficiencia, aspectos que, según explica Pardo deben evaluarse de forma previa para asegurar el compromiso y participación tanto de líderes como de trabajadores.
Si bien la puesta en marcha ya tiene fecha establecida y en Chile algunas empresas ya se han adscrito al Sello 40 Horas al adelantarse al cumplimiento de la nueva normativa.
El especialista explica que “es importante que las empresas realicen intervenciones piloto como (1) mapear procesos y roles dentro de los equipos, para (2) identificar incongruencias entre la visión y los desempeños reales, junto con (3) incongruencias entre lo formal y lo informal en las actividades de la organización y con esto diseñar participativamente el proceso”.
Con la implementación de la ley 40 horas existirá un mayor equilibrio entre el trabajo y la vida personal, lo que se traducirá en una mejor calidad de vida y en un enriquecimiento de las experiencias personales y sociales que transformarán la cultura laboral en el país.