Tras el tiempo que lleve la descontaminación total del terreno, se contempla un proceso de verificación final mediante laboratorios certificados que acrediten que toda la zona fue efectivamente saneada y puede destinarse a nuevos usos múltiples de ciudad.
Al cumplirse más de 100 días de la puesta en marcha del plan de descontaminación de los terrenos frente a Avenida Jorge Montt, se realiza una positiva evaluación del trabajo que está se está ejecutando para completar toda la etapa de construcción previa que requiere la biorremediación, técnica basada en la naturaleza, utilizada hace más de 40 años a nivel mundial por su efectividad y seguridad para las personas y el entorno.
“La comunidad en Viña del Mar ya ha podido ver que en el sector alto del Paño Sur hemos instalado un cierre perimetral; al interior hay maquinarias de última generación, con bajas emisiones de ruido, que están trabajando en la demolición de la infraestructura remanente y retiro de escombros, acciones que son parte del proyecto de saneamiento que cuenta con la RCA ratificada por el Comité de Ministros para llevar adelante una remediación que permita a futuro los usos múltiples de estos suelos”, señala Ricardo Labarca, gerente general de Las Salinas.
En estas semanas, los trabajos que lleva adelante el contratista principal, Séché Group, han estado concentrados en la instalación de faenas y en la preparación del Paño Sur, donde durante los próximos meses será posible identificar las biopilas, montículos de tierra del propio terreno, en los que se generan condiciones óptimas para que las bacterias existentes en el suelo con capacidad de degradar hidrocarburos, lo hagan de manera más eficaz.
Una vez que se complete esa etapa, que tardará aproximadamente entre 2 a 3 años, los trabajos se trasladarán al subsuelo del Paño Norte, sector donde se ejecutará la etapa 2 del proyecto de saneamiento. Tras esos 6 años aproximadamente, que se espera tarde completar la descontaminación total del terreno, se contempla un proceso de verificación final mediante laboratorios certificados que acrediten que toda la zona fue efectivamente saneada y puede destinarse a nuevos usos múltiples de ciudad.
Y junto a la ejecución del plan de saneamiento, en paralelo se han realizado ya dos reuniones de los participantes del Plan de Monitoreo Participativo (PMP), instancia mandatada por el Comité de Ministros para asegurar el seguimiento e información a la comunidad sobre todo el trabajo que se realiza en remediación.
Si bien la indicación consideraba que Las Salinas debía establecer el programa informativo y a la I. Municipalidad de Viña del Mar le correspondía generar una mesa de coordinación y nombrar a representantes de la comunidad que acompañaran el monitoreo, tras 14 comunicaciones formales al municipio, Las Salinas no obtuvo respuesta, por lo que la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) instruyó que se estableciera un procedimiento de convocatoria alternativo, que permitió contar con participantes autoconvocados y así resguardar el derecho de participación activa de la ciudadanía.
“El documento del PMP es público y da cumplimiento a todas las exigencias del Comité de Ministros para el debido seguimiento de los trabajos de saneamiento en cada una de sus variables medioambientales, garantizando a la comunidad el derecho a informarse y participar del proyecto de saneamiento. En las dos sesiones que ya se han realizado los participantes han sido muy activos en su rol de consultas sobre acciones de su competencia y han exigido a nuestros equipos profesionales y técnicos explicar en detalle todos los trabajos que estamos realizando y las medidas de mitigación”, señala la gerente de Medio Ambiente, Stephanie Rotella. Según la profesional, la instancia sigue abierta para integrar a las personas que pudiera a futuro designar la Municipalidad.
Durante el período de ejecución de los trabajos, Las Salinas también ha sido fiscalizado en tres oportunidades por la SMA. El jefe de Operaciones, Daniel Pérez, ha acompañado cada una de estas inspecciones, indicando que “se trata de revisiones exhaustivas de todos los detalles del proyecto, recorriendo la obra en terreno, chequeando antecedentes y solicitando información que nos hemos preocupado de entregar de manera muy completa”.
Pérez destaca que la última fiscalización se realizó el 16 de diciembre, oportunidad en que la autoridad consultó por los camiones que salen desde el terreno y el destino de éstos. “Pudieron constatar que el contenido trasladado es material de escombros de restos de demolición de construcciones que aún quedaban en el terreno y que estaba considerado su retiro según lo aprobado en la RCA y contaba con todos los permisos sectoriales para su ejecución”, acotó Pérez.