Sostenibilidad
En los últimos años, los grandes incendios del país se han originado entre el 15 de enero y 15 de febrero. El llamado es a la prevención y fortalecer las denuncias ante la presencia de alguna situación de intencionalidad o riesgo.
Comienza la segunda quincena de enero y con eso una de las fechas de mayor riesgo de la temporada de incendios, lo que se conoce como Período 15/15. La razón: entre el 15 de enero y 15 de febrero, se han presentado los mayores siniestros del país, debido a condiciones climáticas y ambientales que hacen difícil la contención y el combate del fuego.
Así lo explica el subgerente de Protección de Incendios de Arauco, Ramón Figueroa, quien sostuvo que “el aumento de la temperatura, la baja humedad y los vientos intensos crean un ambiente propicio para que los incendios inicien y se propaguen rápidamente. La evidencia de los años anteriores ha demostrado que este periodo es crucial para prevenir incendios, ya que históricamente se registran aquellos de mayor alcance”.
En la última década, los incendios forestales en Chile han consumido cerca de 1,7 millones de hectáreas. Esta cifra triplica la cantidad de territorio destruido por estos desastres durante la década anterior. Si miramos en detalle, el siniestro de mayor envergadura en Chile ocurrió hace ocho años, el 18 de enero de 2017 y abarcó más de 570 mil hectáreas desde las regiones de O’Higgins hasta el Biobío. Después de esa temporada de incendios, le siguen los siniestros registrados en la temporada 2022 – 2023, que comenzaron el 01 de febrero de 2023 y dejaron 429 mil hectáreas afectadas, y el de 2024 que comenzó el 02 de febrero y tuvo foco en Valparaíso.
Ante este escenario, el llamado es a tomar medidas para prevenir que ocurra un incendio y, en caso de que suceda, el daño sea lo más acotado posible. “Es importante que las personas tomen precauciones con mayor fuerza en estos períodos, evitando actividades que puedan significar un eventual foco, y denunciando acciones intencionales como de las que hemos sido testigos estos años. No nos olvidemos de Valparaíso, y la tragedia que significó para miles de familias. El último tiempo, gracias a llamados tempranos, hemos podido concurrir a combatir focos muy incipientes, pudiendo evitar mayores consecuencias. Sin embargo, nos preocupan los incendios multifocales o con focos simultáneos, que muestran una evidente intencionalidad, como nos ha sucedido esta temporada en Los Álamos y Penco, en la Región del Bío Bío”, dijo Figueroa.
Además, hizo hincapié en que parte importante de los incendios ocurren durante estas semanas en parte importante por la negligencia de personas que van al campo, montaña o playa y no toman los resguardos necesarios. “En este escenario de estrés hídrico es necesario extremar las medidas para que los incendios no ocurran”, sostuvo.
Este 2025, Arauco destinó parte importante de su presupuesto a la prevención y combate de incendios, incorporando tecnología de punta y medios de combate como los dos helicópteros pesados Aircrane, que permiten descargar hasta 10.000 litros de agua. Además, se fortaleció el control integrado con Conaf y otras empresas, así como el trabajo conjunto con Senapred.
Al 5 de enero, de acuerdo a la información de Conaf, se habían quemado 15.196 hectáreas en el país. Si bien esa cifra es un 3% menor a lo de la temporada 2023-2024, la superficie agrícola afectada hasta esa fecha era un 126% más, con 177 hectáreas, versus las 78 quemadas en 2023-2024. La temporada de incendios está considerada hasta mayo de 2025, en lo que ha sido una sistemática expansión de los períodos de riesgo. De ahí la relevancia de estar más atentos que nunca estos 30 días venideros.
