Las consecuencias que puede tener el aburrimiento para la salud mental de los niños en vacaciones

“Estoy aburrido/a”, es una afirmación común en niños y niñas, y que provoca más de un dolor de cabeza en los padres. Sobre todo, en temporada de vacaciones donde se hace más difícil compatibilizar los horarios para entretener a los hijos, con aquellos destinados a lo laboral o a los quehaceres cotidianos.

El aburrimiento, aunque a menudo se ve como algo negativo, puede tener efectos diversos en la salud mental de los niños, es decir, que dependerá del contexto si es una instancia de desarrollo próximo de aprendizaje que fomente su capacidad creativa, o si es una respuesta negativa debido a la falta de estimulación producto de la negligencia en la crianza por parte de los padres, por ejemplo.

Según Samuel Fernández, psicólogo de Saluta, los efectos negativos para la salud mental de niños y niñas, podrían ser los siguientes:

1. Falta de estimulación: el aburrimiento crónico puede ser un signo de falta de estimulación adecuada, lo que puede limitar el desarrollo cognitivo y emocional de los niños.
2. Riesgo de Conductas Negativas: algunos niños pueden recurrir a comportamientos disruptivos o negativos como una forma de lidiar con el aburrimiento.
3. Problemas de Salud Mental: el aburrimiento prolongado puede contribuir a problemas como la ansiedad y la depresión, especialmente si el niño se siente atrapado en una rutina sin propósito.

Si bien el aburrimiento puede tener algunos efectos negativos, también es una oportunidad para que los niños y niñas, desarrollen habilidades importantes como la creatividad, la independencia o aquellas enfocadas en la resolución de problemas.

Es crucial que los padres y cuidadores proporcionen un equilibrio, ofreciendo tanto estructura como la libertad para que los niños exploren y utilicen su imaginación.

Sin embargo, existen múltiples alternativas fuera de casa, que buscan que quienes gozan de sus extensas vacaciones de verano, puedan jugar, aprender y crear.

Este es el caso de “De Tin Marín”, un estudio que busca crear experiencias padres- hijos, para que puedan desarrollar y potenciar diversas habilidades.

Según Daniela Marín, fundadora de la iniciativa,  la importancia de que las y los niños salgan de sus casas, permite que logren alejarse de las pantallas, encontrarse con sus pares, y construir recuerdos significativos para el futuro.  Que los niños encuentren opciones entretenidas para hacer en su tiempo libre, siendo protagonistas de la actividad, realizando un proyecto y aprendiendo.

“Podrán desarrollar su creatividad de manera libre con los más variados materiales, explorando muchas posibilidades, potenciar su autonomía y descubrir todo lo que son capaces de hacer ellos mismos”,  concluye.