Niñez
Potenciar este programa del Servicio de Protección es una de las medidas que busca disminuir el número de niños, niñas y adolescentes en residencias del Estado.
En el Centro Cultural La Moneda, cerca 10 familias se reunieron y redactaron cartas para invitar a otras personas a acoger niños, niñas y adolescentes separados temporalmente de sus progenitores por orden de un tribunal.
Los mensajes escritos desde la experiencia personal, son parte de la campaña “El Poder de Cuidar” que busca que más personas se inscriban y se informen sobre el programa Familias de Acogida del Servicio de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia.
La ministra de Desarrollo Social y Familia, Javiera Toro, destacó que “estamos haciendo un llamado a las familias a postularse, a inscribirse como familias de acogida para proteger a los niños, niñas y adolescentes que más han sufrido vulneraciones. Ir avanzando hacia un modelo de cuidado alternativo que no sea solo residencial, sino que también pueda ir creciendo cada vez más”.
La directora nacional (s) del Servicio de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, Victoria Becerra, detalló que ser familia de acogida “tiene requisitos muy simples. El mayor requisito es tener las ganas, tener el amor para poder entregarle a un niño, niña o adolescente. Además, hay que tener la mayoría de edad, no tener ningún tipo de inhabilidad para trabajar con menores de edad y pasar por una serie de capacitaciones y de apoyo por parte de nuestro servicio en el intertanto. Hoy pueden ser familia de acogida matrimonios, pero también personas solteras. Lo que más se necesita es poder tener la voluntad de entregar amor y de cuidar a estos niños y niñas que son los que más nos necesitan”.
En la actividad, las autoridades pudieron conocer los testimonios de personas que han acogido a uno o más niños y niñas en los últimos años y, también, pudo conversar con jóvenes que fueron acogidos durante su infancia.
Sebastián, un joven que pasó por familias de acogida, detalló que “la experiencia es totalmente gratificante, la entrega de cariño, de amor, es súper importante para nuestro desarrollo personal, como sujetos de derecho también. Quiero invitarlos también a participar de los programas de familia de acogida, a entregar un pedacito de corazón a tantos niños, niñas y adolescentes que hoy día lo necesitan. Porque es importante restituir el derecho a vivir en familia”.
Paloma, madre de acogida de un niño de 3 años, reafirmó que “ha sido una experiencia maravillosa, muy desafiante, pero sin duda una de las cuestiones que más nos motivó a nosotras tiene que ver con una cuestión político social, de hacernos cargo y de socializar los cuidados, de participar de un programa que está haciendo una cuestión distinta por las niñeces libres y por entregar amor. Así que invitamos a todas las familias a que se unan al programa si tienen las condiciones y que pueden además no hacer la vista gorda frente a un problema tan grande, que puedan participar y que podamos cambiar las vidas de las niñeces y las adolescencias para un mejor futuro”.
Actualmente más de 9.400 niños y niñas se encuentra la cuidado de familias de acogida, de los cuales el 53% son mujeres y más de 2 mil tienen menos de 3 años. Se trata de una cifra que ha ido en aumento con el pasar del tiempo.
En 2007 más del 90% de niños, niñas y adolescentes bajo el cuidado del Estado se encontraba en residencias, mientras que en 2023 cerca del 66% de los niños, niñas y adolescentes estuvo en familias de acogida.
