Niñez
El propósito es prevenir la victimización secundaria de los niños, niñas y adolescentes.
El 3 de octubre se cumplieron cinco años desde la implementación de la Ley de Entrevistas Videograbadas, la que tiene como objetivo reducir la victimización secundaria de las niñas, niños y adolescentes (NNA) víctimas de delitos sexuales.
Para esto, la ley estipula que deben haber profesionales que entrevisten a las y los NNA, quienes deben capacitarse y formarse continuamente para actualizar sus conocimientos acorde a las necesidades y contexto.
El rol del entrevistador es hacer una entrevista investigativa videograbada (que busca recabar información relevante para la investigación y, además, reducir la victimización secundaria).
Según la psicóloga del área de Formación de Fundación Amparo y Justicia, Maísa Valdivia, es por esta labor que la formación continua es vital: “El que se sigan capacitando busca poder mejorar la calidad en las diligencias donde participan los niños y niñas víctimas de delitos sexuales. Los materiales y capacitaciones del Centro de Recursos tienen como objetivo entregar herramientas que permitan reducir la victimización secundaria a través del compartir buenas prácticas”.
El Centro de Recursos de la Fundación actualiza los recursos en línea mensualmente y todo el material está basado en evidencia nacional e internacional. Se entregan insumos para apoyar el proceso de capacitación de las y los entrevistadores, es la única plataforma online gratuita de capacitación que cuenta con material de actualización vía podcast, videos, infografías y otros.
A la fecha, existen 688 usuarios activos que utilizan la plataforma y el sitio web ya ha recibido 8.377 visitas desde su lanzamiento en noviembre del 2023.
Para la jefa del área de Formación de Fundación Amparo y Justicia, Carolina Puyol, “la adquisición y fortalecimiento de esas competencias requieren de la práctica continua y de la formación constante. El Centro de Recursos, entonces, satisface estas necesidades con el fin de que las y los profesionales realicen esta importante labor con altos estándares”.
Antes de la entrada en vigor de la ley, no existía una técnica con la cual obtener la prueba testimonial de las víctimas, lo que dejaba en una total vulnerabilidad a las y los niños y adolescentes quienes solían ser entrevistados de manera repetitiva. “El sistema tenía su foco anteriormente en la persecución penal, y el impacto a la víctima tendía a ser visto como un daño colateral. Sin embargo, hoy la evidencia es clara y explica que cuando se desatienden las necesidades de las víctimas, se generan impedimentos para que investigación se desarrolle
de manera correcta, sobre todo porque – la mayoría de las veces – este tipo de delitos ocurre en un entorno íntimo, donde escasamente hay testigos”, concluyePuyol.
