Enojo, rabia, ansiedad y tristeza son parte de las emociones que pueden provocar los celos. A pesar de que se trata de un sentimiento que no es agradable experimentar, puede ser considerado “esperable” al estar en una relación de pareja, siempre que sea de forma esporádica y no conduzca a la violencia. El psicólogo de Centros Médicos Vidaintegra, Fernando Marchant, explica el límite entre los celos y la celopatía, además de su tratamiento.
Días más calurosos, panoramas al aire libre y temporada de piscinas pueden provocar una mayor preocupación por lucir un físico escultural. Es en este escenario, cuando se demuestra mayor interés por la imagen propia, que las parejas pueden sentirse resentidas y desconfiadas, demostrando sospechas que se convierten en celos.
Según el psicólogo de Centros Médicos Vidaintegra, Fernando Marchant, hasta cierto punto los celos entendidos como el temor a que un tercero se entrometa en la relación de pareja, pueden considerarse un sentimiento esperable dentro de un compromiso sentimental. Sin embargo, pueden tomar diferentes grados hasta convertirse en algo patológico. “La celopatía es una emoción que puede ser cegadora, con límites insospechados y consecuencias destructivas para la relación de pareja; es una obsesión recurrente en la cual la realidad es alterada por la propia percepción errática que se tiene del otro”, asegura el profesional.
Existe el temor al abandono o la pérdida, que suele aparecer también con algunos trastornos de personalidad. “La celopatía puede estar asociada a cuadros de dependencia al alcohol o formar parte de un estado depresivo encubierto”, aclara Marchant.
Los celos, de acuerdo a lo explicado por el psicólogo, pueden relacionarse también a una proyección encubierta. Es decir, ver en el otro lo que yo puedo estar sintiendo o queriendo hacer. “Los celos aluden a una baja autoestima y a experiencias de soledad. Además, se pueden asociar a historias vividas en la familia, como engaños entre los padres, por ejemplo, que pueden afectar la actual vivencia de pareja”, advierte el profesional.
Las características de los celos no patológicos
– Son moderados; se trata de un estado emocional episódico, no permanente.
– No logran desarticular una relación de pareja.
– Hay respeto por el espacio personal y preferencias individuales.
– Las parejas no se asfixian en la convivencia cotidiana y se fortalecen los lazos afectivos.
Cuándo estamos frente a una celopatía
– Se percibe ansiedad y/o agresividad
– Existen pensamientos relacionados a la infidelidad permanentemente (“me va a engañar”, “el celular de mi pareja está ocupado, lo que quiere decir que está hablando con su amante”, etc.)
– Se demanda a la pareja, permanentemente, pasar más tiempo juntos, con el objetivo de controlar su vida.
– Se realizan conductas dirigidas a comprobar un engaño (revisar el celular, los emails, las boletas, la ropa, etc.)
Tratamiento
El psicólogo de Centros Médicos Vidaintegra indica que la ayuda profesional de la psiquiatría y la psicoterapia pueden resultar muy útiles cuando se está frente a un diagnóstico de celopatía. En algunos casos, explica, hay indicaciones de antidepresivos y otros fármacos.