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Alergias primaverales: ¿pueden afectar la salud de nuestros oídos? Salud

Alergias primaverales: ¿pueden afectar la salud de nuestros oídos?

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Según la Organización Mundial de la Alergia, un 40% de la población mundial sufre algún tipo de esta afección, lo cual podría desencadenar en diversas complicaciones auditivas.


La primavera es sinónimo de buen tiempo, pero también de alergias y continuos síntomas como estornudos, irritación de ojos o congestión nasal, e incluso de otitis y pérdida auditiva. Según la Organización Mundial de Alergias (OMA), se estima que 400 millones de personas en todo el mundo experimentan rinitis alérgica.

Las vías respiratorias son las principales vías de nuestro organismo afectadas cuando padecemos una alergia en primavera. Por eso, tenemos la sensación de una mayor presión en nuestros oídos. Pero, ¿cómo la alergia puede afectar nuestra audición?

En algunos pacientes con dermatitis atópica o rinoconjuntivitis estacional, se han observado episodios de picazón en el conducto auditivo externo y eccema (sequedad). Por otro lado, con la alergia, las vías respiratorias se inflaman, mientras que la cantidad de mucosidad aumenta, convirtiéndose en un caldo de cultivo para la otitis. La función de las trompas de Eustaquio (el pasillo que conecta la cavidad oral con el oído) es equilibrar la presión dentro del oído medio para proteger el tímpano; si estos están obstruidos, lo primero que se produce es una sensación de taponamiento.

Además, en el proceso de congestión alérgica, la frecuencia de los estornudos aumenta considerablemente y son un factor de riesgo para nuestro oído. “Si los reprimimos o retenemos, podemos producir un aumento de la presión en la nariz y la garganta que puede pasar a los oídos, haciendo que las bacterias también pasen al interior y puedan causar una infección, al mismo tiempo que, pueden causar fístulas laberínticas que afectan la capacidad auditiva”, comenta Andrea Lizama, fonoaudióloga de GAES Chile.

Aunque no es algo doloroso, es molesto. Esta situación es más frecuente entre los niños ya que en ellos las trompas de Eustaquio aún no están completamente desarrolladas. Un estudio en 2021 sobre las “Complicaciones otológicas de la rinitis alérgica según gravedad en pacientes de 5 a 17 años”, realizado por el Instituto Nacional de Salud del Niño, en Perú, estableció que la rinitis alérgica presenta diversas complicaciones auditivas, tales como: timpanosclerosis (55,85%), otitis media con derrame (25,0%), disfunción tubárica (3,8%), hipoacusia conductiva leve (55,85%), opacidad y engrosamiento de la membrana timpánica (28,8%).

Para los niños, los factores de riesgo principal se encuentran en los jardines y colegios, al ser posibles focos de infección. Por tanto, al más mínimo indicio de alergias, resfriados o dolor de oído, es importante acudir al pediatra para que el médico inicie cuanto antes un tratamiento para evitar que la sintomatología vaya a más o la situación derive en una infección del canal auditivo. “Un control adecuado de las alergias evitará la aparición de inflamaciones e infecciones en el oído, que pueden provocar molestias como mareos, pérdida del equilibrio, sensación de presión o taponamiento e incluso pérdida de audición”, aconseja Lizama.

Un 40% de la población mundial sufre algún tipo de alergias. Por ello, y especialmente en esta época, es recomendable seguir estos simples consejos para cuidar la salud de nuestros oídos: 

  1. Revisa tu audición: A la más ligera sospecha de otitis (para adultos o niños) se debe asistir a un especialista, recuerda que la otitis es una de las causas más importantes de la pérdida auditiva infantil. Además, son clave los chequeos preventivos, “esto nos ayudará a descartar problemas a tiempo y seguir el tratamiento indicado en cada caso”, explica la especialista.
  2. Evita resfríos innecesarios: Es importante además resguardarnos de todos aquellos alérgenos que nos puedan ocasionar resfriados e infecciones. Usar antihistamínicos y mascarillas para cuando van a estar más expuestos a dichos alérgenos, puede ayudarle a evitar resfríos innecesarios.
  3. El aseo es fundamental: Es muy importante lavarse muy bien las manos después de haber estado en el exterior, así como la cara y zonas aledañas.
  4. Cuida tus oídos: Y por último, mantener siempre los oídos secos. Cualquier tipo de prevención es primordial para evitar complicaciones y un mayor riesgo de pérdida auditiva en el futuro.

No importa si se trata de niños o adultos, tomar medidas adecuadas durante la primavera es fundamental. Al mismo tiempo, “son clave los chequeos auditivos preventivos, o bien, acudir a un especialista en caso de que presentemos molestias o infecciones persistentes”, concluye Lizama.

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