Los síntomas de una intoxicación alimentaria, en general, aparecen entre 1 y 72 horas después de haber consumido el alimento y estos síntomas pueden ser por ejemplo náuseas y vómitos, diarrea, dolor abdominal, calambres, fiebre, debilidad general y deshidratación.
No solo el consumo de alcohol es frecuente en las celebraciones de las fiestas de fin de año, sino que también el alto consumo de alimentos de todo tipo.
En este contexto, las intoxicaciones en este periodo son más común de lo que se piensa. “Factores como la gran cantidad de alimentos preparados que se comercializan y no cumplen con los requisitos sanitarios que otorguen seguridad al momento de ingerirlos: almacenamiento inadecuado de ellos, manipulación incorrecta de los alimentos y la ruptura de la cadena de frío, pueden hacer pasar más de un mal rato a las personas durante las fiestas de fin de año”, reflexiona Fernando Torres, director de la Escuela de Química y Farmacia de la U. Andrés Bello.
El toxicólogo detalla cuáles son las causas más comunes de las intoxicaciones alimentarias:
Los síntomas de una intoxicación alimentaria, en general, aparecen entre 1 y 72 horas después de haber consumido el alimento y estos síntomas pueden ser por ejemplo náuseas y vómitos, diarrea, dolor abdominal, calambres, fiebre, debilidad general y deshidratación.
“Hay que tener mucho cuidado con personas de edad vulnerable como los niños, los ancianos, las mujeres embarazadas y pacientes inmunodeprimidos o que tengan alguna otra enfermedad, ya que en la enfermedad la intoxicación alimentaria puede ser grave y requerir la atención médica”, advierte el académico.
¿Cuáles son las medidas de prevención? en primer lugar, mencionar la higiene de la cocina. “Hay que lavarse siempre bien las manos, lavar los utensilios y las superficies donde vamos a cocinar. Evitar la contaminación cruzada, es decir, usar tablas para cortar separadas para alimentos crudos y para alimentos cocidos. Cocinar bien los alimentos, especialmente las carnes, los mariscos, las aves y los huevos”, dice.
Asimismo, el experto destaca que hay que “mantener la cadena de frío, esto quiere decir que no hay que dejar los alimentos a temperatura ambiente por más de 2 horas y menos exponerlos al calor extremo del verano, siempre consumir alimentos frescos evitando el uso de ingredientes que ya estén vencidos o mal conservados y también hay que evitar el recalentamiento de los alimentos”, concluye.