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Ozempic: el medicamento que se usa para bajar de peso y genera controversia Salud

Ozempic: el medicamento que se usa para bajar de peso y genera controversia

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Una encuesta realizada por Bain a más de 4.000 consumidores de medicamentos GLP-1, como los conocidos como Ozempic o Wegovy, reflejó que este tipo de fármacos provoca cambios significativos en su comportamiento, los que persisten luego de finalizar su tratamiento.

Uno de los riesgos más importantes de consumir estos medicamentos es hacerlo sin la supervisión médica necesaria. Ozempic debe ser utilizada por personas con diabetes, sin embargo muchas de las personas que lo utilizan no padecen la enfermedad y generan desabastecimiento del medicamento. Además, al suspender el medicamento, es común recuperar el peso perdido.

En casos de obesidad, existen versiones específicas aprobadas para la pérdida de peso, como Wegovy (que también contiene semaglutida, pero en dosis diferentes).

Entre los principales resultados que arrojó la encuesta realizada por Bain, se estableció que mientras un 71% de las personas logra comer menos en cada comida durante el tratamiento, una vez que dejan el medicamento este porcentaje se mantiene en 43%. En el caso de la cantidad de comidas al día, en el primer caso el porcentaje alcanza el 51%, para luego mantenerse en un 29%.

Muchas personas han hecho uso del Ozempic y, tal como se espera, han logrado bajar considerablemente de peso. Sin embargo, muchas veces las personas necesitan reconstrucciones del cuerpo al bajar drasticamente de peso. El doctor Stefan Danilla, médico
cirujano y co-fundador de Clínica Áurea, explica que este tipo de procedimientos se ha convertido en una necesidad para pacientes que experimentan cambios drásticos en su físico tras una baja masiva de peso.

Un estudio realizado por la Facultad de Medicina de la Universidad de Washingto, publicado en la revista Nature Medicine, uno de los primeros análisis sobre las consecuencias y efectos secundarios, tanto positivos como negativos, del uso de Ozempic. El estudio se le realizó a más de 2 millones de usuarios y entre los efectos negativos se encontraron problemas gastrointestinales (vómitos y náuseas), gastroparesia o parálisis de estómago, presión arterial baja, problemas de sueño, dolores de cabeza, cálculos renales e inflamación del riñón.

Pero no todo es malo. El uso de Ozempic tiene algunos efectos secundarios “buenos”. Algunos de estos son la pérdida de peso, menor riesgo de trastornos por consumo de sustancias, reducción de idea suicida, reducción de la esquizofrenia y otros trastornos psicóticos, menor riesgo de padecer Alzheimer o demencia y menor riesgo de rastornos de coagulación (como la embolia).

“Los pacientes que se encuentran tomando fármacos GLP-1 experimentan un 35% de aumento de su actividad física, porcentaje que se mantiene en 30% una vez que finalizan su tratamiento. En el caso del consumo de alcohol, este disminuye de 23% a 19% respectivamente”, explica el estudio realizado por Bain.

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