
Día Mundial del Parkinson: mitos, diagnóstico temprano y el rol clave de la medicina nuclear
Espscialistas destacan las ventajas de la medicina nuclear para detectar y tratar esta enfermedad neurológica, que no sólo afecta a los adultos mayores, un abordaje personalizado mejora las expectativas de vida.
Cada 11 de abril se conmemora el Día Mundial del Parkinson, una fecha clave para generar conciencia sobre esta enfermedad neurológica progresiva que afecta a millones de personas en todo el mundo. En este marco, PositronMed, centro especializado en medicina nuclear, se suma activamente a la comunidad médica y científica con el objetivo de visibilizar la realidad de quienes conviven con esta patología.
La iniciativa busca desmitificar creencias erróneas que aún persisten en la sociedad, brindar información precisa y actualizada, y subrayar la importancia de un diagnóstico temprano y un tratamiento integral. En este contexto, la medicina nuclear emerge como una herramienta fundamental no solo para detectar la enfermedad en sus etapas iniciales, sino también para acompañar el seguimiento clínico y mejorar de manera significativa la calidad de vida de los pacientes.
Mitos y verdades sobre el Parkinson
1. “Solo afecta a personas mayores”: Aunque la edad constituye un factor de riesgo importante, el Parkinson no se limita a la población de la tercera edad. Puede manifestarse en personas de menos de 60 años o incluso más jóvenes, fenómeno conocido como “Parkinson de inicio temprano”.
2. “El único síntoma es el temblor de manos”: Aún cuando los temblores son el síntoma más reconocido, no son el único ni necesariamente el primero en aparecer. “La rigidez muscular, la lentitud de movimientos (bradicinesia) y los problemas de equilibrio también son frecuentes. Además, existen síntomas no motores; como trastornos del sueño, depresión y fatiga que suelen pasar inadvertidos”, explica el dr. Horacio Amaral, director médico de PositronMed.
3. Los pacientes tienen una esperanza de vida muy corta: Si bien el Parkinson puede conllevar complicaciones si no se trata adecuadamente, no implica forzosamente una drástica reducción de la expectativa de vida. Gracias a un diagnóstico temprano, tratamientos adecuados y el acompañamiento de equipos médicos multidisciplinarios, la mayoría de los pacientes puede mantener una vida activa durante muchos años.
4. No existen alternativas precisas para diagnosticar y tratar la enfermedad: En la actualidad, existen herramientas diagnósticas cada vez más sofisticadas y diversos enfoques terapéuticos que contribuyen a mejorar tanto los síntomas como la calidad de vida de las personas con Parkinson.
El rol de la medicina nuclear en el Parkinson
La medicina nuclear ofrece procedimientos diagnósticos altamente confiables para la detección temprana y el seguimiento del Parkinson, destacando la Tomografía por Emisión de Positrones (PET). Esta tecnología permite visualizar con gran detalle el funcionamiento cerebral, detectando alteraciones en la producción o actividad de la dopamina, sustancia clave para el control de los movimientos.
Las imágenes cerebrales obtenidas a través de PET con el trazador PR04.MZ proporcionan información clara sobre la actividad de los neurotransmisores, facilitando un diagnóstico temprano y certero. “Una vez realizado el diagnóstico, se puede diseñar un plan terapéutico adaptado a las necesidades específicas de cada paciente. Además, el seguimiento periódico mediante estudios de medicina nuclear permite ajustar el tratamiento de forma continua y precisa”, sostiene el especialista.
La identificación oportuna de la enfermedad, sumada al abordaje multidisciplinario y al uso de medicamentos y terapias de rehabilitación, contribuye a controlar los síntomas y a retrasar la progresión del trastorno. Por eso, en el marco del Día Mundial del Parkinson, PositronMed ratifica su compromiso con la educación y la prevención de esta enfermedad, llamando a la población a informarse correctamente y a buscar atención médica especializada ante cualquier síntoma.