Alguna vez Cecilia Morel fue conocida como “la esposa de Sebastián Piñera”. Pero tras su primer paso en La Moneda ha dejado atrás ese rol y ha logrado empoderarse a través de la labor social que la ha acompañado desde hace dos generaciones en su familia. Con 64 años y 43 de matrimonio, cuatro hijos y próxima a instalarse nuevamente en el palacio de gobierno. Incluso el nombre de Cecilia se rumoreó como futura candidata a la presidencia, hecho que desestimó de inmediato. Aún así muchos concuerdan que fue una importante pieza para que Sebastián Piñera volviese al gobierno.
Este domingo, Cecilia Morel acompañó en gran parte de las actividades a su marido Sebastián Piñera, quien asumido por segunda vez la Presidencia de Chile. Sin embargo, fue la aparición de la pareja en el balcón de La Moneda, donde más dio que hablar.
Ese momento reflejó los distintos puntos de vista que constantemente rodean en las redes sociales. Por un lado, la gente comenzó a gritar «el beso», por lo que Piñera y moral accedieron sonrientes a la petición popular.
Por otro, su vestuario elegante fue ampliamente alabado, por su elegancia y buen gusto.
Sin embargo, fue el momento en que ambos saludaron a la gente el que más generó comentarios, ya que el presidente corrigió a la primera dama, para que no le tapara la cara, sin darse cuenta que el micrófono estaba encendido. «Con la otra mano», se volvió viral y volvió a aparecer #FreeCecilia en redes sociales.
El hashtag había surgido tras las desafortunadas declaraciones machistas dadas en un par de ocasiones por Piñera. Una de esas veces fue cuando realizó un chiste que para muchos se refería a violación, y otra cuando comentó un ataque de celos que tuvo al ver a Cecilia caminar junto a otro hombre y donde reaccionó de mala manera.
Los usuarios de redes sociales creen que estas han sido pruebas suficientes de que Cecilia se encontraría atrapada en la relación machista aunque su círculo siempre ha negado algún tipo de problemas en su matrimonio, además de siempre reconocer que Sebastián posee un particular humor y actuar.
Esta semana Sebastián Piñera se presentó en el programa Las Dos caras de la Moneda conducido por Mario Kreutzberger, donde también participaron su esposa y sus hijos. Allí, Cecilia Morel dijo que su marido no le pegaba codazos «sino que él tiene sus tics y sus gestos».
Una aclaración necesaria luego de los comentarios por el famoso empujón y codazo que Piñera le propició a su mujer en el momento que él habló con la prensa tras haber votado en las elecciones pasadas.
Esa forma particular que también quedó manifiesta en el programa de Canal 13, con el grupo familiar en pleno y se produjo el siguiente diálogo.
-Yo le agradezco a la Manena, porque hoy dia e la tarde un hijo de la ella, León, se quebró la tibia…- dice Piñera.
-Pero cómo le vas a agradecer eso…- emplaza Morel.
-¿Por qué? Le agradezco que esté aquí..
-Ahhh (risas y cara de alivio de Cecilia y los hijos).
-Porque como buena madre ella se preocupó, pero que esté aquí es una muestra de que quiere tanto a su hijo como a su padre.
Cecilia Morel Montes se apronta a llegar nuevamente como primera dama a La Moneda, luego de cuatro años alejada de la política. Un rol que la llevó a obtener un 66% de aprobación en marzo del 2014 al terminar el gobierno de Sebastián Piñera, a quien aventajó en casi el doble en estas cifras.
Sin embargo, en estos años no estuvo completamente ausente, ya que terminada la anterior presidencia de su marido, Morel decidió crear la Fundación Chile Vive Sano, donde buscaba continuar con el proyecto impulsado en el primer gobierno de Piñera, para así contribuir en la creación de una cultura de vida sana a nivel país, a través del trabajo con profesores y niños al interior de establecimientos educacionales vulnerables.
Reconocida por sus amigos como la “Chica”, la figura de Cecilia Morel se plantó fuerte y determinante para el triunfo de Piñera en su segunda candidatura presidencial. Diversos analistas políticos concuerdan en que la mesura y humanidad de Morel habría ayudado a impulsar la figura de Sebastián Piñera en las elecciones. Este es el famoso “Factor Morel”, donde incluso el 27 de diciembre la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, declaró a Revista Caras: “Cecilia ha tenido un rol fundamental en toda la vida de Sebastián. Un hombre trabajólico como él, que tenga una familia normal, grata, con gran cariño entre ellos, es básicamente por su mujer. Y es lo que ha puesto ella en las campañas: alma, empatía, calidez. El presidente es uno de los hombres más inteligentes que conozco, con una capacidad de trabajo que no he visto y Cecilia es su complemento, al entenderlo y hacerlo ver como un ser humano. En el fondo, lo humaniza”.
Entonces, ¿quién es y cómo se ha gestado su camino para llegar a ser una fuerte figura dentro del piñerismo?
Nació un 14 de enero de 1954, siendo la cuarta hija de 7 hermanos, del ingeniero Eduardo Morel y de Paulina Montes, dueña de casa que estudió en la Cruz Roja y se dedicó al voluntariado, igual que su propia madre, Consuelo Brunet Bunster. De ahí es que Cecilia adoptó su labor social que la distingue hasta hoy en día.
Estudió en el Colegio Jeanne D’arc y en 1972 ingresó a estudiar enfermería a la Pontificia Universidad Católica de Chile. Un año más tarde iniciaría un noviazgo con quien era su vecino, Sebastián Piñera (68). Según ha manifestado ella en diversas ocasiones, el amor fue a primera vista.
Cecilia desde joven tuvo cierto interés en la política: dice haber votado por el No y que durante dictadura ella caceroleaba en su barrio. También en ocasiones ha comentado haber sido llamada “comunacha”.
Se casó con Sebastián en diciembre del ’73, luego de que “el mismo día del golpe de Estado su novio, Sebastián Piñera, le pidió matrimonio. Por teléfono”, según contó a La Tercera en 2013. Posterior a eso, se marcharon a Estados Unidos donde su esposo fue becado en Harvard. Cecilia debió dejar atrás sus estudios de enfermería y suspenderlos durante sus 3 años de estadía en el extranjero. Al volver ingresó nuevamente, donde estudió y trabajó hasta que nació su segunda hija, Cecilia, faltándole solo un semestre para terminar.
Cuatro son los hijos que nacieron del matrimonio Piñera-Morel: Magdalena, Cecilia, Cristóbal y Sebastián.
Frustrado su sueño de enfermería, más tarde estudiaría en el Instituto Profesional Carlos Casanueva, donde logró titularse de orientadora familiar y juvenil, lo que la condujo a trabajar con familias en riesgo social, al igual que su madre y su abuela. Años más tarde, Morel sacó una licenciatura en “Familia y Relaciones Humanas” en la Universidad Mayor.
Guiada por su sentido social, en 1989, junto a profesionales del Instituto Profesional Carlos Casanueva, fundó lo que más tarde se llamaría “La Casa de la Juventud”, con el propósito de educar a jóvenes de Conchalí mediante diversos talleres de crecimiento y desarrollo personal.
Posterior a eso, se hizo cargo de un proyecto de dignificación para jóvenes encarcelados en Puente Alto. Luego, formó la Fundación Mujer Emprende, para fomentar el empleo y la capacitación en mujeres de sectores vulnerables.
También formó parte de la Comisión de Justicia y Paz del área pastoral del Arzobispado de Chile y realizó diversas actividades como orientadora en temas de familia e infancia.
En el año 2006, Cecilia Morel fue premiada por la Federación de Mujeres, considerándola como líder femenina destacada y donde en dicha oportunidad compartió premiación junto a la ex alcaldesa de Cerro Navia, Cristina Girardi, a la actriz Solange Lackington, la periodista Karin Ebensperger y a la dueña de casa Lidia Oyarzún. Ese premio, lo recibió en 2003 la actual presidenta Michelle Bachelet en su calidad de ministra de Defensa.
Ser primera dama
Su vida cambió el 11 de marzo del 2010, cuando comenzó a usar su cargo protocolar como primera dama de Chile, al ser esposa del presidente Piñera. Durante su ejercicio en el cargo, presidió las siete fundaciones pertenecientes a la Dirección Sociocultural de la Presidencia: Fundación Integra, Fundación ProDeMu, Fundación Chilenter, Fundación Tiempos Nuevos, Fundación Artesanías de Chile, Fundación de la Familia y Fundación Orquestas Juveniles e Infantiles.
Pero la creación y promoción de Elige Vivir Sano le valió favorables críticas en el programa intersectorial y transversal que busca la promoción de hábitos para una vida sana a través de cuatro importantes pilares: come sano, mueve tu cuerpo, disfruta a tu familia y vive al aire libre.
En mayo de 2013 creó el Sistema Elige Vivir Sano, administrado por el Ministerio de Desarrollo Social a través de una Secretaría Ejecutiva.
Esta gestión le valió el reconocimiento durante el Congreso Percade 2012, donde recibió la Distinción Personas y Desarrollo.
En mayo del 2013, Cecilia dio una entrevista a Alfredo Cooper para el medio Hazte Cargo. En dicha ocasión habló de su no preparación como primera dama y cuál ha sido su experiencia. “Toma como un año entero en conocer el tejemaneje del Estado”, confesó. Además dijo sobre su labor que “es un rol más bien convencional. A la gente le gusta, lo quiere, eso me ha llamado mucho la atención. Ellos sienten una especie de mamá en cuanto a la figura de la mujer, la señora del presidente que está más en terreno, que está cerca de ellos”.
Dentro de sus experiencias en terreno, en dicha ocasión Morel comentó: “Me ha tocado el dolor de la mujer sola. Hay mucha mujer sola, jefa de hogar. El problema de los hijos que entran en la droga es dramático. El problema de la falta de oportunidades en alguno”. Además destacó la fortaleza de la mujer chilena, al recordar a las mujeres con las que se reunió en el pasado incendio en Valparaíso.
“Yo agradezco mucho a mi madre que tuve una formación muy ligada a lo social y yo no es que haya desarrollado el rol de que me haya propuesto ser de una determinada manera, sino que soy, gracias a Dios en una parte, muy de piel, como orientadora y todo eso. Siempre me ha gustado la cercanía, creo tener gran comprensión de la fragilidad y de la debilidad humana”, se explayó aquel mayo del 2013 Cecilia Morel.
También habló de su relación con Sebastián Piñera, la que en la actualidad ha sufrido diversas especulaciones a raíz de comentarios y chistes machistas del futuro mandatario, además del famoso empujón. “Como pareja uno indudablemente tiene un tiempo diferente de espacio libre, recreativo, de compartir con amigos. (…) pero como pareja el trabajar juntos en una misma causa, yo creo que es de las grandes cosas que unen”, comentó en Hazte Cargo.
En Revista Paula, el 7 octubre del 2017, relataron pasajes particulares de su relación, y ella misma comentó: “Entonces, nos contó sobre la primera vez que salió con Sebastián Piñera. Él la invitó a una fiesta en Malloco a la casa de su amigo Carlos Alberto Délano. Al llegar –relató– se bajaron del auto y no le abrió la puerta pese a que se estilaba hacer en esos años. Él partió caminando adelante raudo y la dejó atrás.
«También nos había contado sobre su primera Navidad en Boston, cuando su marido estudiaba en Estados Unidos. Él viajó a Chile a pasar las fiestas de fin de año. Ella no podía subirse a un avión por su embarazo ya de siete meses de su primer hijo y cuando le recriminó que se quedaría sola, él con su espíritu pragmático, le dijo: ‘Celebraremos la Pascua después cuando vuelva’. Y voló.
«Pero no se veía ofendida ni dolida cuando nos contó cómo lidiaba cuando Piñera les comentaba a sus amigos riéndose que ‘la Cecilia dice que no entiende por qué la llamaron del banco avisándole que estaba sobregirada, si todavía le quedan cheques en la chequera’ o cuando decía que ‘había escrito una tesis en que la hipótesis no coincidía con las conclusiones’.”
Y es que tan solo en octubre del 2010, amigas de Cecilia Morel comentaron a El Mostrador sobre la relación que posee con su marido. En aquel tiempo, Cecilia se había hecho notar fuertemente en la gira mundial del presidente tras el rescate de los 33 mineros y su frase “no lo muestres” se hizo mundialmente conocido por la constante exhibición del papel que salió de la mina.
“La Chica toda su vida lo ha estado atajando, tratando de que no se sobregire. A veces la escucha, a veces no. Sebastián tendría que nacer de nuevo para no ser sobregirado, pero la Chica nunca ha tirado la toalla de pretender cambiarle ciertas formas”, dijo la compositora Michelle Salazar, ex integrante del grupo Mazapán y amiga desde los años del colegio Jeanne D’Arc.
Un aspecto que la amiga de Cecilia, Ana María Gutiérrez, observó además fue: “Lo típico es que la hace callar, porque la Chica opina mucho, de política, de la actualidad, de todo. ¡¿Hasta cuándo?! le dice Sebastián, pero ella no engancha. En una época enganchó harto, internamente ella quedaba mal, pero hoy sabe manejarlo súper bien. Me da gusto que le dijera “no lo muestres’”.
En acciones como esta, además de su ardua labor social que ha impulsado desde siempre y su mayor cercanía a la política es que los medios comenzaron a poner ojo a sus movimientos y palabras. Hoy se ha posicionado como una clave para el triunfo de su marido, dejando atrás la imagen más reservada que tuvo durante el primer gobierno.
Nuevamente primera dama
Pese a que en entrevista para Revista Caras de diciembre del año pasado confesó que no estaba en sus planes volver a La Moneda, acepta esta nueva etapa con gusto.
“Ser primera dama es un rol, no un cargo público. Por lo tanto, más que medidas, mi prioridad será ser la voz de los anónimos y los no escuchados, de los adultos mayores, los niños y las personas con discapacidad.”, declaró como futuro accionar.
“He trabajado en temas de mujer y pueblos originarios por lo que siempre tendré un sello humano que enfatiza el valor de la diversidad y el respeto a la identidad. Me enfocaré en temas de infancia porque van de la mano con la profundidad de los problemas que tenemos como país. Veo con tristeza que los niños están invisibilizados, que hay poco respeto a su ‘ser niño’, a su ciclo de desarrollo, a sus modos de percibirse a sí mismos y al mundo. Estamos apurados en hacerlos adultos y estresados; hay sobre medicación en las escuelas, sobrecarga de tareas y competencia.
«¡Afecto, arte y juego son claves! Por eso, una de mis primeras acciones será convocar a los maestros que trabajan de corazón en el aula con niños pequeños y a algunos especialistas”, también declaró a Caras el año pasado.
Los ojos no están puestos solo en la figura del presidente, sino en quien fue parte de su clave para el éxito, la próxima Primera Dama de Chile, Cecilia Morel, donde su rol podría seguir siendo fundamental para la cercanía que podría llegar a tener con la sociedad en su nuevo gobierno Piñera.
El 8 de marzo del 2014, cuatro días antes de que dejase su cargo protocolar, junto a su esposo realizó un cordial saludo a todas las mujeres: “Hoy es un día muy especial, es el Día Internacional de la Mujer. Es nuestro día, por eso quiero enviar un saludo cariñoso a cada mujer chilena de cada rincón de nuestro país. Compartir con ustedes la alegría de ser mujer y el orgullo que siento por haber sido testigo privilegiada del empuje y fortaleza de la mujer chilena. En esta celebración, quiero expresarles mi infinita gratitud a todas ustedes quienes me abrieron las puertas de sus hogares e inspiraron mi trabajo día a día. Muchas gracias, amigas”.
La chilena de hoy necesita seguir avanzando en políticas que velen por la equidad de derechos en los diferentes aspectos de su vida, es por ello que se espera que las necesidades de la mujer chilena puedan inspirar a Cecilia Morel los próximos 4 años de gobierno y poder conseguir lo que tanta falta no hace como sociedad, y por lo que sin duda las mujeres seguirán dando lucha para no retroceder y solo avanzar.