Representantes de mujeres detenidas y torturadas en el ex recinto de la DINA, manifestaron su rechazo por la venta de la propiedad a una inmobiliaria, a pesar de ser declarada Monumento Histórico por parte del Consejo de Monumentos Nacionales.
El colectivo Mujeres Sobrevivientes Siempre Resistentes manifestó su rechazo por la venta de la ex casa de tortura de la DINA «Venda Sexy», a la Sociedad de Inversiones Arriagui Limitada. Gestión que se realizó a pesar de que la casa fue declarada Monumento Histórico en el 2016 por parte del Consejo de Monumentos Nacionales.
Desde el colectivo, hicieron un llamado al gobierno a recuperar este lugar para la memoria activa de las mujeres, como un acto reparatorio por parte del Estado.
«Venda Sexy es un ex centro de secuestro, desaparición, tortura y violencia política sexual. Esta práctica de terrorismo de Estado se expresó de manera diferenciada y desigual sobre los cuerpos y sexualidades de las mujeres detenidas», introducen en la declaración pública.
Y es que Venda Sexy operó de manera activa entre julio de 1974 hasta febrero del 1975 para posteriormente seguir funcionando de manera intermitente hasta 1981. Estuvo bajo el mando de la DINA y pasaron cerca de 81 personas, un tercio fueron mujeres. Además, 27 de ellas son detenidas y detenidos desaparecidos.
«Ahora nos enteramos de que se vendió a una sociedad de inversiones en circunstancias que, de acuerdo a la Ley de Monumentos Nacionales se plantea que no es posible vender monumentos declarados sin la autorización del Consejo de Monumentos Nacionales», denunciaron desde el colectivo.
A continuación la declaración completa:
«Es verdaderamente espeluznante que un sitio de memoria pueda ser transado en el mercado sin que ninguna instancia del Estado, particularmente la responsable por ley de preservar y fiscalizar el patrimonio, se haya enterado. Estamos en presencia de una transacción absolutamente ilegítima e ilegal. Hoy los sitios de tortura son una nueva arista del mercado neoliberal. ¿Quién compra un centro de tortura? Las inmobiliarias», añadieron.
Esto es síntoma de una falta de políticas patrimoniales donde abunda la desmemoria de parte de todos los gobiernos civiles desde el fin de la dictadura. Nos enfrentamos a un contexto de agudización de la criminalización y la represión de las luchas sociales, de impunidad y negacionismo histórico.
Es una deuda la falta de justicia y reparación que se ha sostenido durante todos estos años, particularmente hacia las mujeres desaparecidas, ejecutadas y sobrevivientes del terrorismo de Estado, pero nosotras sabemos que es también una deuda con la memoria histórica de todas las mujeres que lucharon contra la dictadura y siguen luchando hoy día contra el sistema capitalista patriarcal.
Frente a este escenario, llamamos a las feministas a sacar la voz para que esta venta sea declarada ilegal. Es nuestra responsabilidad asumir la tarea de la recuperación de Venda Sexy como un espacio para la memoria activa de las mujeres reivindicando la lucha que muchas libraron y seguimos por un proyecto político de transformación revolucionaria de la sociedad.