La característica más relevante de este tipo de duelo es que no es aceptado socialmente. “Al parecer, algo que no ha nacido, es como si no existiera para muchos. No se piensa que la ilusión del hijo, en esa familia se ha ido posicionando como algo especial”, dice la psicóloga de Contigo en el Recuerdo, Magdalena López.
A comienzos de octubre, la modelo Chrissy Teigen, pareja del cantante John Legend, reveló una noticia desgarradora: tras cinco meses de embarazo habían perdido al bebé que esperaban juntos. «Estamos en shock y con un dolor profundo del que solo habíamos oído hablar, el tipo de dolor que nunca hemos sentido antes”, publicó en sus redes sociales hace pocos días, tras varias semanas de silencio y reflexión.
Según un informe de la ONU cerca de dos millones de bebés nacen fallecidos cada año en el mundo, uno cada 16 segundos, siendo casi el 1,4% de los nacimientos registrados en 2019. Una cifra dolorosa que se traduce en millones de procesos de duelo que deben ser sobrellevados en circunstancias cada vez más adversas.
Ahora en octubre, se conmemoró el Día Internacional de la Pérdida Perinatal y Neonatal, una jornada que nació en Estados Unidos a principio de los 2000 y que, con los años, se ha ido recordando en distintas partes del mundo como una instancia que invita a reflexionar sobre el duelo que deben vivir las madres (además de los padres y la familia) que han perdido a sus hijos antes de su nacimiento o en sus primeros días de vida.
Los expertos eso sí ponen una alerta sobre este tema: “La característica más relevante de este tipo de duelo es que no es aceptado socialmente. Al parecer, algo que no ha nacido, es como si no existiera para muchos. No se piensa que la ilusión del hijo, en esa familia se ha ido posicionando como algo especial”, dice la psicóloga de Contigo en el Recuerdo, Magdalena López.
Por lo mismo, es importante tener en claro que este momento trae consigo preguntas para la madre que ha sufrido esta pérdida, las cuales es clave saber enfrentar para elaborar un mejor proceso de duelo. Acá desglosamos cinco:
¿Cómo contar la noticia? Una de las mayores complejidades en estas situaciones es cómo enfrentar las preguntas o comentarios de las personas que aún esperan el nacimiento del nuevo bebé. Una actividad recomendada es preparar frases para responder a inquietudes habituales de tus seres queridos, escribiéndolas y repitiéndolas en voz alta. Este ejercicio puede ser difícil al principio, pero con el tiempo será más fácil decirlas.
¿Qué hacer con los objetos? Con la noticia de ser padres es innegable la preparación para dicha experiencia, comprando ropa y tomando decisiones familiares en torno a su llegada. Ante una situación de duelo, los padres no deben arrepentirse de estas decisiones, ya que estos elementos les han permitido conectarse con el bebé que no pudo estar en este mundo. En este caso, se recomienda hacer una cajita de los recuerdos donde puedan guardar estos objetos. Los que no estén en esta cajita pueden ser donados a alguna institución de beneficencia.
¿Qué pasa en la pareja? El dolor frente a una pérdida perinatal o neonatal es devastador para las madres y también para los padres. Uno de los grandes desafíos es saber enfrentar este momento juntos, para lo cual es interesante conversar y hacer una lista, en conjunto, de todas aquellas reacciones que han tenido. Es importante hablar y estar abiertos a entender que cada quien vive su duelo de manera particular.
¿Cómo afecta a otros niños? Cuando existen pequeños que también esperaban el nacimiento de ese niño o niña, lo queramos o no, sufren con la pérdida, en especial cuando tienen un fuerte vínculo con los padres. Su reacción dependerá de la edad, personalidad, cultura y religión de sus familiares, pero independiente de lo anterior el diálogo con los padres -o algún adulto significativo en caso de que no puedan apoyarles emocionalmente- resulta imprescindible para tranquilizarlos y evitar que se alimenten determinados miedos o recelos ante la vida.
¿Cómo prepararse para los aniversarios? Pueden haber pasado varios meses, incluso años, pero parece que el dolor se reactiva en los aniversarios de fallecimiento, Navidad, vacaciones, o cualquier momento significativo. Sin embargo, se trata de una vivencia totalmente normal y esperable. Para estas fechas es mejor prepararse emocionalmente, y pensar ¿cómo quisiera integrar su recuerdo en mi vida? Podría ser escribiéndole una carta, visitando el cementerio, prendiendo una vela en algún lugar especial o, reuniendo a la familia en su nombre.
Material de apoyo
En este sentido, a principios de 2020, Contigo en el Recuerdo quiso contribuir al proceso de superación del duelo por fallecimiento perinatal y neonatal a través del libro “Abrazos Infinitos, pérdida perinatal”. Este material psicoterapéutico busca apoyar a los padres, especialmente a las madres, frente a la pérdida de un hijo, y fue realizado tras un trabajo de investigación completo que incluyó testimonios y el apoyo de la Fundación Amparos y del Programa Acompañares, del Hospital Clínico de la Universidad Católica.
Lo puedes encontrar en el siguiente enlace