Menos de dos meses quedan para la llegada del verano, las altas temperaturas, la temporada de piscina y, con esto, la incomodidad que causa la menstruación para vivir plena y libremente esta época del año. No obstante, la copa menstrual viene a desafiar todas estas barreras que impiden a las mujeres disfrutar a causa de la regla.
Tampones que irritan la microflora vaginal o toallas higiénicas que pueden producir infecciones y resequedad, son los problemas que viene a evitar la copa menstrual. Un recipiente de silicona médica que se introduce al interior de la vagina y que no absorbe la regla, sino que recibe la sangre, evitando posibles infecciones.
Sumado a esto, durante la vida fértil una mujer puede llegar a contaminar con hasta 13.000 toallas higiénicas o tampones, mientras la copa menstrual dura hasta 10 años y puede ser usada hasta por 12 horas continuas, evitando así tener que preocuparse a cada momento de la menstruación.
Además, “a diferencia de los tampones, no absorbe el cloro, las bacterias u otras sustancias nocivas presentes en las piscinas, reduciendo el riesgo de sufrir infecciones vaginales”, advierte la Product Manager de Copa Menstrual MiaLuna, Constanza Valenzuela.
Gracias a la copa menstrual, atrás quedó el miedo de manchar el traje de baño y que todos se dieran cuenta de que se está con la regla. Y, es que a diferencia de los tampones, no absorbe la sangre y tampoco reseca las paredes vaginales.
Otro beneficio durante la temporada de verano es que la copa menstrual no está limitada a la forma o tamaño del traje de baño, ya que no sobresale, por lo que el constante miedo a que se vea un bulto y la gente piense que llevas un pañal desaparece instantáneamente.
Por tanto, durante este verano ya no será necesario preocuparse de generar desechos que contaminen el medio ambiente o perderse la salida a la piscina, pues con la copa menstrual se puede disfrutar el verano sin que la menstruación sea una barrera más para las mujeres.