BRAGA
Previo a la medida, el beneficio era entregado solamente a menores de edad. Sin embargo, el país decidió extender el rango etario de la medida ya que muchas mujeres han dejado de recurrir a los métodos de anticoncepción por razones de índole económica.
Este jueves, el ministro de salud de Francia, Oliver Véran, anunció que el país ampliará el beneficio de entrega de anticonceptivo a personas de hasta 25 años. La iniciativa fue impulsada por el gobierno con el fin de apoyar la autonomía económica y social de las jóvenes. Antes del anuncio, la medida era entregada exclusivamente a menores de edad.
La autoridad sanitaria señaló que uno de los motivos de la medida fue la preocupante disminución en el uso de los métodos de anticoncepción: “He observado, en colaboración con las autoridades científicas, que un cierto número de mujeres jóvenes utilizan cada vez menos los anticonceptivos. La razón principal es por motivos económicos”, por lo que la medida vendría a subsanar esta falta.
El beneficio no tan solo incluye la entrega de anticonceptivos, ya que según aseguro Véran, la gratuidad abarcará desde las píldoras anticonceptivas hasta el examen biológico, pasando por la consulta médica y toda la atención sanitaria asociada.
Ahora, las jóvenes podrán acceder a dicho beneficio a partir del primero de enero del 2022 y para el estado supondrá un costo adicional de 21 millones de euros, es decir 24,8 millones de dólares anuales.
El anuncio se produce en medio del debate para extender el plazo para realizar el aborto, ya que organizaciones sociales, diputados y el partido gobernante LREM, intentaron poner en marcha la reforma que busca ampliar de 12 a 14 semanas el plazo autorizado para abortar. Sin embargo, pese a los intentos no fue posible ya que el Senado de mayoría conservadora, rechazó la inicMujerativa.
En Francia, la anticoncepción ya era gratuita desde el año 2013 para las jóvenes de 15 a 18 años. Medida que redujo significativamente la cantidad de abortos realizados en dicho grupo etario, disminuyendo de 9,5 a 6 por cada 1.000 jóvenes entre 2012 y 2018.
En 2020, la medida se amplió a las menores de 15 años, ya que, según indicó el gobierno entonces, casi 1.000 adolescentes de 12 a 14 años se quedan embarazadas cada año y, de ellas, 770 recurren a la interrupción voluntaria del embarazo.
