BRAGA
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La organización, compuesta por diversos países de América Latina, tiene el objetivo de posicionar este tipo de violencia como una prioridad en los diversos territorios que la componen para en algún futuro poder erradicar este tipo de vulneraciones al momento de parir.
A través de un encuentro virtual, que contó con la presencia de representantes de diversos observatorios de violencia obstétrica y de agrupaciones que velan por los derechos humanos en el parto, se llevó a cabo la primera reunión de la Red Latinoamericana de Observatorios de Violencia Obstétrica (Red OVO).
En dicha reunión estuvieron presentes los países; Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela. Ocasión en la que una representante de cada nación compartió sus experiencias y describió la situación en la que se encuentran con respecto a los derechos del nacimiento.
Tras ello, las integrantes de los países llegaron a la conclusión que existe una gran similitud en los testimonios de este tipo de violencia, teniendo como punto común la sistemática vulneración a los derechos de las mujeres, personas gestantes y sus recién nacidos. Situación que ha empeorado con la llegada de la pandemia producto del Covid-19.
La representante de OVO Argentina, Violeta Osorio, señaló que gracias al convenio firmado por el país están acompañando legalmente el primer caso que llevarán a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, al Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer. Y agregó, “en Argentina hay denegación absoluta en esta área, entonces ahora como OVO no solo tenemos que demostrar la sistematicidad de la violencia obstétrica, ni de las secuelas que perduran, sino también la sistematización de la denegación de justicia”.
A su vez, la miembro de OVO Brasil, Lara Werner comentó las distinciones raciales que ocurren con este tipo de violencia. “En la actualidad estamos teniendo una discusión a raíz del movimiento feminista, porque hay diferencias entre la violencia obstétrica sufrida por mujeres blancas comparado con mujeres no blancas”.
Cabe señalar que América Latina, es una de las regiones con mayor tasa de cesáreas a nivel mundial alcanzando cifras récord en algunos países, que superan con creces la recomendación del 10% al 15% sugerida por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, pese a la existencia de la Ley de Parto Respetado en Uruguay y Argentina, aun así, es bastante común ver este tipo de vulneración y violencia de género que, actualmente, sigue siendo bastante invisibilizada y naturalizado por nuestra sociedad.
La agrupación ya comenzó a trabajar en comisiones, para incidir en el territorio, definiendo acciones concretas y ejes de trabajo que permitan posicionar este tema como una prioridad a nivel de salud y en defensa de los derechos humanos de las mujeres, personas gestantes y sus familias.
