El XX Informe Anual de Derechos Humanos, reveló que las cifras han decaído por primera vez en 8 años, sin embargo, también muestra que el 71,8% cree que los derechos de las diversidades sexuales se respetan poco. Por otro lado, el 89,3% afirma haber sufrido algún tipo de discriminación, donde las personas trans son las más afectadas con un 94,1%. En el caso de episodios de discriminación en medios de comunicación y redes sociales, el porcentaje subió en un 4,5%.
Durante esta mañana, se dio a conocer el informe analítico de la situación de personas de la diversidad sexual, diseñado por la Subsecretaría de Prevención del Delito, y el Movilh, además contó con el apoyo de la Organización Trans de Rancagua e Iguales. En el estudio se abordan los datos pertenecientes al año 2021, donde por primera vez se pudo observar que las denuncias por discriminación decayeron a una cantidad de 1.114 denuncias o casos de discriminación, que corresponden al 16,8% del total de 6.620 atropellos a los derechos humanos de las personas LGTBIQ+ ocurridos en los últimos 20 años.
A pesar de que las cifras son esperanzadoras, también se identificó un retroceso en cinco regiones; en Arica y Parinacota las denuncias subieron en un 300% con respecto al año anterior, en Tarapacá un 80%, Atacama subió con un 37.5%, Coquimbo con un 9,5% y el Maule con un 5,2%. Por otra parte, se destaca que la mayor cantidad de denuncias a nivel nacional son hacia instituciones, con un total de 391 episodios de marginación o intentos de exclusión institucional registrados, y en segundo lugar de predominancia, se identifican las denuncias de tipo comunitarias, con 135 abusos comunitarios que se dan dentro de la familia, amigos/as, vecinos/as.
En el informe también se destacó el rol de los medios de comunicación de masas y redes sociales en cuanto a discriminación, donde reveló que esta, en comparación al 2020, subió en un 4,5%. Estas cifras son alarmantes, puesto que según lo detallado en el informe, estas podrían subir. “Es probable que estas cifras sigan al alza, dado el protagonismo en ascenso de las redes sociales para la comunicación humana”, señala el estudio.
Por último, con respecto a la procedencia de la discriminación, se reveló que estas provienen de principalmente desconocidos con un 57,9%, luego le sigue la familia nuclear con un 44,1%, luego la familia extendida con un 30,6 %; y el cuarto lugar lo comparten los compañeros de estudios y miembros de comunidades religiosas con un 25,7% ambos grupos.
Sin duda, las cifras en general han cambiado positivamente, no obstante es importante destacar que a pesar de que las cifras de denuncias bajen, también existe un importante grupo de personas que no denuncian debido a que la Ley Zamudio aún contiene falencias que no ayudan efectivamente a las personas afectadas. En este sentido, uno de los factores que los/as perjudica es que no existe ayuda psicológica o económica cuando denuncian, por ende, varios prefieren no pasar por el proceso judicial. Esto se condice con los datos del estudio que dice que 31,5% no denunció la vulneración, del cual 22.9% estima que la policía no hubiera hecho nada. Estas cifras son preocupantes, puesto que el índice de salud mental de afectados/as señala que todos han sufrido consecuencias a nivel psicológico en menor a mayor grado.