También dice estar firme en su apoyo a su compañera de equipo Jenni Hermoso, en el centro de una polémica no buscada tras el beso que recibió durante la celebración del campeonato por parte del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ahora suspendido e investigado.
Catalina Coll dice ser una “tía muy segura de sí misma”.
Una cualidad indispensable en una portera, y que ella lució de sobra en el reciente Mundial de fútbol de Australia y Nueva Zelanda, donde la selección española se coronó campeona.
Pero no solo se expresa con seguridad en el terreno de juego.
También dice estar firme en su apoyo a su compañera de equipo Jenni Hermoso, en el centro de una polémica no buscada tras el beso que recibió durante la celebración del campeonato por parte del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ahora suspendido e investigado.
Coll, también campeona del mundo en las categorías sub17 y sub19, dice que apoya hasta el final la denuncia de su colega. Las 23 campeonas anunciaron que no volverán a jugar en la selección hasta que Rubiales deje el cargo.
El beso desató una oleada de críticas y un profundo y acalorado debate deportivo, social y hasta político en España, que se ha reflejado en la prensa internacional y las redes sociales sobre el consentimiento, el sexismo y el abuso de poder.
Rubiales, suspendido provisionalmente de empleo y sueldo por la FIFA, y al que se pide que renuncie desde múltiples sectores, incluido el gobierno español, niega haber besado a Hermoso sin consentimiento y se aferra a su posición.
En entrevista con BBC Mundo, Coll, de 22 años, no esconde su decepción por los hechos que, considera, han opacado un éxito que toda España debería estar celebrando.
Con ella hablamos del beso, pero también de la victoria y de cómo tras una derrota pasó a convertirse en la portera titular de un equipo que a partir de entonces puso rumbo al título.
Sé que en España ahora mismo hay una gran polémica, precisamente por el beso del presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, a tu compañera la jugadora Jenni Hermoso, que de alguna manera opacó la celebración de su equipo como campeonas del mundo.
Pero primero, muchísimas felicitaciones. Quisiera hablar precisamente de ese triunfo. Quiero saber cómo viviste esa histórica final del Mundial.
Muy emocionada. Sabíamos que íbamos a ganar [a Inglaterra]. Durante el partido estábamos convencidas de que iba a ir todo bien. Es verdad que los 13 minutos de descuento se hicieron eternos, pero terminar así [como campeonas por 1-0] fue una emoción que aún no te sabría explicar.
¿Y cómo te imaginabas que ibas a estar viviendo esas semanas siguientes tras conseguir la Copa del Mundo?
He celebrado aquí en Mallorca, mi tierra, he tenido muchos recibimientos, vas a comprar y la gente te conoce, vas por la calle y la gente te para a hacer fotos, eso al final te alegra.
Es todo muy nuevo porque se ve que esto ha sido como un golpe en la mesa, estamos aquí y vamos a por más y esto va creciendo.
Hablemos de ese partido de la final. Para los que lo vimos desde afuera pareció que el equipo siempre estuvo en control, que apenas sufrió. Pero cómo se vivió en el campo. ¿Cómo lo viviste tú?
Sí, es verdad que empezamos controlando muy bien el partido, pero también te voy a decir que hubo momentos que sufrimos y que dijimos: ‘Nos están apretando’.
Pero creo que el plan del partido lo teníamos muy claro, sabíamos lo que teníamos que hacer y yo creo que durante el Mundial eso se demostró.
¿Cuál fue el partido de todo el Mundial que más disfrutaste y cuál fue el más difícil?
El que más sufrí fue el que jugamos contra Holanda [en cuartos de final con victoria por 2-1], porque veía un equipo muy fuerte físicamente. Luego vamos a la prórroga y yo notaba que estábamos cansadas, pero teníamos que aguantar como fuera. Yo creo que es el partido en el que todo el equipo sufrió más.
Tú además tienes una historia particular: este Mundial no lo empezaste como titular. Pero todo cambió después de la derrota en primera fase ante Japón. ¿Cómo fue ese momento en el que te enteraste que a partir de ahí ibas a ser la arquera titular?
Bueno, es verdad que no nos lo esperábamos. También lo hemos dicho todo el Mundial, que somos 23 jugadoras y las 23 podíamos jugar porque estamos preparadas para ello. Pero es verdad que al final el portero es una posición más complicada, porque es más solitaria.
Una hora y media antes del partido, cuando pusieron la alineación, me enteré [de que era la portera titular]. Y como al final soy una tía muy, muy segura pues lo afronté de la mejor manera posible.
Eres de las que tiene triple corona: campeona sub17, sub19 y ahora campeona absoluta. ¿Cómo se siente ese logro con 22 años?
Pues no sé, porque todo pasa muy rápido.
Al final parece que fue ayer que jugué el Campeonato del Mundo de Sub17 y ahora estoy en la absoluta.
Creo que el fútbol pasa muy rápido, no te da tiempo a ser consciente de nada.
Y yo creo que los futbolistas nos damos cuenta de lo que hemos conseguido cuando te lesionas o cuando te retiras del fútbol.
Creo que no soy consciente de todo lo que he ganado en mi carrera.
Lograron, además, romper una hegemonía de dos mundiales que llevaba Estados Unidos. Ganan un Mundial clave con más cobertura mediática, mayor nivel de equipos, una audiencia más interesada. ¿Qué significó para ustedes?¿Cuándo eras niña y jugabas al fútbol te imaginabas que podría llegar a ser así?
Creo que para nuestro país ha significado mucho.
Hemos dado un paso muy grande de decir ‘estamos aquí, podemos hacer lo mismo y podemos dar un espectáculo igual’.
También tengo que agradecer a Nueva Zelanda y Australia porque en cada partido había siempre más de 20.000 personas, y yo creo que esto hace pocos años era impensable.
Estamos viendo que va creciendo y estamos orgullosas de lo que estamos haciendo.
No me esperaba todo esto cuando era niña. Yo de pequeña no veía ni el fútbol femenino porque no sabía ni que existía. Llegar hasta aquí es un sueño para mí y para todas las que estamos abriendo las puertas a las niñas que vienen para que tengan todo más fácil y que no tengan que luchar con injusticias.
Vamos a hablar ahora de otro tema. Cuéntanos cómo has vivido esta crisis que se produjo tras el beso de Rubiales a tu compañera Jenni Hermoso.
Me da pena que las 23 futbolistas no seamos las protagonistas. Por lo que estoy decepcionada es que ahora todo el mundo que te para por la calle te habla de esto y no te dice: ‘Enhorabuena por el Mundial’.
O te lo dice, pero luego te recalca eso.
Yo creo que estamos tristes por todo esto, pero bueno, creo y confío de que todo se va a arreglar y que todo va a ir a buen puerto.
¿Qué sentimiento es el que prima ahora mismo en ti?
Es obvio que tengo felicidad por lo que hemos conseguido, pero hay como una parte de mí que está triste por lo que está pasando. Me da pena que no seamos las protagonistas y que siempre tengan que ser los mismos los protagonistas.
Ustedes decidieron no volver a una convocatoria de la selección española. Cuéntame un poco cómo fue ese proceso.
Nos pusimos en contacto todas. Creo que todas teníamos el mismo pensamiento de que lo que había pasado no podía seguir.
Al final, le pasó a una compañera a la que queremos mucho y decidimos que íbamos a ir con ella a muerte, decidiese lo que decidiese.
Y eso es lo que hicimos, ir con ella a muerte. Y esta fue nuestra decisión y esta decisión es hasta el final.
¿Y qué tiene que pasar para que ustedes vuelvan a jugar?
Bueno, pues que todo esté bien. Yo creo que es lo que todo el mundo espera, se ha visto todo lo que se ha montado y solo queremos que acabe bien y que se mire por nuestros derechos y que esto no pase más.
Tú has tenido oportunidad de hablar con tu compañera Jenni Hermoso. ¿Cómo está ella?
Creo que tendrá el móvil [celular] reventado de todos los mensajes que le habían llegado.
Todas las compañeras hemos mostrado nuestro apoyo hacia ella y vamos con ella a muerte en todo, la apoyamos.
No está viviendo una situación fácil y me pongo en su piel y es obvio que no me gustaría estar ahí. Pero como te he dicho, con ella a muerte, haga lo que haga.
¿Te sorprendió a ti la actitud de Rubiales?
Al final no es que me sorprendiera. Es obvio que no me gustó. Creo que al final todo el mundo está hablando de algo de lo que no nos gusta hablar.
Yo te quiero estar hablando de cómo me ha ido en el Mundial y no de esto.
Tras lo ocurrido, mucha gente e instituciones las han apoyado. ¿Hay algún apoyo que echen en falta?
No, yo creo que quien nos quiera apoyar que nos apoye y quien no, pues que no nos apoye. Al final sabemos lo que hay, nuestra verdad y ya está. Como te digo, quien se quiera subir que se suba y quien no, pues que no se suba.
¿Cómo te gustaría que acabara esta crisis?
Que acabará bien, creo que es lo que deseamos todas las futbolistas, todo el mundo.
Que al final somos futbolistas y queremos jugar al fútbol y que se nos respete y respetar a los demás. Ya está. Jugar al fútbol, que es lo que nos gusta, disfrutarlo y que acabe bien para que nosotras podamos volver y seguir ganando títulos.