Un total de 757 denuncias por acoso sexual y laboral acumulan las tres ramas castrenses, a cuatro años de la promulgación del Protocolo Conjunto de Denuncias por Acoso Sexual o Laboral para las Fuerzas Armadas. La información se obtuvo por una solicitud vía Transparencia y los informes que registran cada caso son de carácter secreto o reservado: se intentó contactar a las instituciones para solicitar mayores detalles, pero no hubo respuesta.
El 12 de marzo de 2019, el Ministerio de Defensa, dirigido por el entonces ministro Alberto Espina, promulgó el Protocolo Conjunto de Denuncias por Acoso Sexual o Laboral para las Fuerzas Armadas, que estableció un proceso formal para la recepción, derivación y el acompañamiento de denuncias internas de acoso sexual o laboral, es decir, un protocolo para la respuesta institucional cuando ocurren delitos en los cuales están involucrados funcionarios de ese ámbito.
La nueva norma estableció una serie de deberes institucionales para cada rama de las Fuerzas Armadas: Ejército, Armada y Fuerza Aérea. Dentro de ellos, el más importante fue el establecimiento de la obligación de que cada institución entregue un informe mensual al Ministerio de Defensa Nacional con el detalle de las denuncias que se hayan realizado, el estado en que se encuentran los procedimientos de denuncias informadas con anterioridad y aquellas denuncias e investigaciones que hayan sido cerradas o finalizadas, con el resultado de las mismas.
Desde El Mostrador Braga se solicitó, a través de Transparencia, la totalidad de los informes entregados por el Ejército, la Armada y Fuerza Aérea de manera mensual al Ministerio de Defensa desde la promulgación del protocolo hasta mayo de 2023 (inclusive).
Las tres ramas castrenses sostuvieron que, de acuerdo con la Ley 20. 285, dichos informes tienen carácter secreto o reservado, dado que dichas denuncias son de “carácter íntimo de las personas involucradas”, pues contienen información “personal y sensible”. Por este motivo, no se entregaron los nombres de las y los involucrados, ni información referida, por ejemplo, a edad, género y rango.
El Ejército de Chile fue la institución que entregó la mayor cantidad de detalles de los casos. En el documento, firmado por el jefe del Estado Mayor, Rodrigo Ventura, se reconoce la recepción de 285 denuncias por acoso laboral, hasta mayo de 2023, y 294 por acoso sexual. Tanto en el primero como en el segundo de los casos, en la mayoría de ellos las denuncias derivaron en una Investigación Sumaria Administrativa (ISA), 269 y 265, respectivamente.
De acuerdo con la información entregada por el Ejército, las cifras de ISA que terminaron con una sanción en casos de acoso laboral y sexual son bastante diferentes. En los casos de acoso laboral, solo el 13% del total de denuncias tuvo una sanción y en las denuncias por acoso laboral la cifra sube al 35%.
En tanto, la Fuerza Aérea informó la recepción de 178 denuncias por acoso sexual y laboral, 161 fueron resueltas y 17 que siguen en trámite.
La Armada, por último, solo informó el número de informes enviados al Ministerio de Defensa: 46.
Desde El Mostrador Braga se envió un listado de preguntas idéntico para cada rama castrense, con el fin de conocer en profundidad qué modificaciones institucionales se hicieron para la respuesta efectiva del protocolo, qué tipos de delitos (a modo general) fueron denunciados, qué tipo de sanciones existen y si se puede apelar en caso de inconformidad, además de cómo se canalizan las denuncias por abuso, un tipo de delito relacionado, pero distinto del contemplado por el protocolo.
Ninguna de las instituciones respondió.