En cinco hospitales públicos, el 100% de los obstetras se declaró objetor en casos de embarazos producto de violación. Además, en uno de cada cuatro establecimientos, más de dos tercios de los obstetras objetan por la misma causal.
Recientemente se publicó el informe anual de monitoreo sobre la objeción de conciencia en hospitales públicos en relación con la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) en tres causales, el cual reveló que para el año 2023 los obstetras son quienes más frecuentemente se acogen a la objeción de conciencia en al menos una causal.
Según el informe de Corporación Humanas, la causal con mayor objeción se produce en casos de embarazo producto de violación, respecto de la cual el 45,8% de los obstetras elige no realizar el procedimiento en estas circunstancias. Además, se observa una alta objeción en otros profesionales de la salud como anestesistas (20,5%), profesionales no médicos de pabellón (12,7%) y técnicos paramédicos (13%).
En cinco hospitales públicos, todos los obstetras se declararon objetores de conciencia en casos de embarazos producto de violación. Estos hospitales se encuentran en Santa Cruz (Región de O’Higgins), Cauquenes y Constitución (Región del Maule), Victoria (Región de La Araucanía) y Puerto Aysén (Región de Aysén).
El informe también destaca que en uno de cada cuatro establecimientos habilitados para la IVE, más de dos tercios de los obstetras objetan en la causal de violación, incluyendo los cinco hospitales donde la objeción es del 100%. Además, se señala que ninguno de estos hospitales cuenta con un protocolo específico sobre objeción de conciencia.
Se identifican seis recintos sin protocolo para la IVE o sin especificaciones sobre las acciones a implementar para garantizar la atención a mujeres y niñas frente a equipos de salud mayoritariamente objetores de conciencia.
A pesar de que la ley IVE ha estado en vigor durante seis años, la directora de Corporación Humanas, Camila Maturana, advierte que, “la amplia proporción de obstetras objetores de conciencia se ha mantenido en el tiempo en lugar de disminuir y no se trata de una situación excepcional, sino más bien de una realidad generalizada que puede obstaculizar el acceso de niñas y mujeres a la atención de salud”.
Como respuesta a esta situación, el informe ofrece recomendaciones, como la derogación de la objeción de conciencia institucional, la difusión de los derechos establecidos en la normativa, la capacitación de los equipos de salud y la garantía de que todos los establecimientos cuenten con equipos no objetores, entre otras medidas.
En colaboración con el Observatorio de Datos y Estadísticas de Género e Interseccionalidades (ODEGI), Corporación Humanas ha incluido un mapa en el informe de este año para visualizar las zonas del país con mayores problemas. Se destaca que la zona centro sur concentra la mayor cantidad de objetores de conciencia.