BRAGA
Un reciente estudio de investigadores analizó las tendencias de la vasectomía y las enfermedades de transmisión sexual (ETS) durante un período de 10 años en Chile, determinando una posible relación entre ellas.
Investigadores chilenos realizaron un estudio publicado recientemente titulado “Tendencias de la vasectomía y las enfermedades de transmisión sexual en Chile: resultados de bases de datos robustas”, donde se encontró una correlación entre las tasas de vasectomía y las enfermedades de transmisión sexual, particularmente en hombres entre los 30 y los 49 años.
El estudio, realizado por académicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Los Andes, se concentró en los diagnósticos de VIH, clamidia, gonorrea, sífilis y tricomoniasis, infecciones que aumentaron significativamente durante el período de 2008-2017.
En este mismo período de tiempo, señala el estudio, se registró un incremento significativo en las tasas de vasectomía, particularmente en hombres entre 30 y 49 años. El mismo segmento etario en el cual se detectó el aumento en los diagnósticos de ETS.
Además, los académicos encontraron una correlación considerable entre las tasas de vasectomía y la gonorrea, infección que experimentó un salto importante en el período de tiempo analizado.
“Se concluye que las tendencias de la vasectomía y las tasas de ETS presentaron un incremento significativo en período de 2008 a 2017 en Chile, especialmente entre los hombres de entre 30-49 años”, señaló el estudio.
“La relación entre la vasectomía y el incremento de las ETS puede ser un nuevo factor de riesgo para las políticas de salud sexual y reproductiva que puede ayudar a controlar la epidemia del VIH y las ETS”, indicó.
A pesar de lo anterior, los investigadores aseguraron que pueden existir otros factores que expliquen esta correlación: “Por ejemplo, las personas que se someten a vasectomías suelen ser más proactivas sobre su salud reproductiva y tienen más probabilidades de testearse regularmente por posibles enfermedades de transmisión sexual”, sostuvieron.
Finalmente, el estudio resaltó la importancia de la vigilancia y planificación de nuevas estrategias de prevención. “Las altas tasas de vasectomía podrían afectar las tendencias de las ETS según la edad. Sin embargo, son necesarios estudios a nivel individual para caracterizar a esta población y evaluar si la vasectomía es un nuevo factor de riesgo para orientar intervenciones preventivas”, concluyó.
