El magnesio es un mineral esencial para el funcionamiento del cuerpo que desarrolla muchas funciones vitales, por lo que debe formar parte de nuestra dieta. Además, ofrece muchos beneficios a nuestra salud.
El cuidado de la salud y la prevención son importantes en todas las etapas de crecimiento en el ser humano, pero para las mujeres, debido a sus variaciones hormonales y factores biológicos, el consumo en mayor cantidad de algunos micronutrientes tiene beneficios. Si bien estos micronutrientes como el calcio, la vitamina D y el magnesio se encuentran en alimentos como espinacas, nueces, palta, legumbres, cereales integrales, y plátano, a veces es necesario complementar su ingesta y así garantizar los niveles óptimos para fortalecer la salud física y emocional.
El magnesio es muy importante para las mujeres en todas las etapas de su vida, pero se convierte en esencial durante los meses de embarazo, los posteriores de lactancia y a partir de los 50 años cuando no se absorbe la misma cantidad. Por lo tanto, tomarlo habitualmente ayuda a proteger tu cuerpo, siempre respetando las dosis recomendadas.
El magnesio es un mineral esencial para el funcionamiento adecuado del cuerpo humano. Se encuentra en cantidades significativas en huesos, músculos, tejidos blandos y líquidos corporales.
Entre sus principales funciones en el cuerpo destacamos:
– Participar en la contracción y relajación muscular. Ayuda a regular el tono muscular y la función neuromuscular.
– Participar en el metabolismo del calcio y la formación de los huesos. Contribuye a la absorción de calcio y su deposición en los huesos, ayudando a mantener la densidad ósea.
– Ayudar a mantener el ritmo cardíaco regular, promover la relajación de los vasos sanguíneos y participar en la producción de energía necesaria para la contracción del músculo cardíaco.
– Participar en más de 300 reacciones bioquímicas en el cuerpo, incluyendo el metabolismo de carbohidratos, grasas y proteínas.
– Participar en la producción y almacenamiento de energía.
– Contribuir al equilibrio del sistema nervioso y desempeñar un papel en la regulación de los neurotransmisores.
El magnesio se encuentra presente en muchos alimentos como nueces, semillas, legumbres, cereales integrales, verduras de hojas verdes, pescado y lácteos. Sin embargo, algunos factores, como el estrés, el consumo excesivo de alcohol y ciertas condiciones de salud, pueden aumentar la necesidad de magnesio.
La deficiencia de magnesio puede tener síntomas como debilidad muscular, calambres, fatiga, irregularidades del ritmo cardíaco y debilidad ósea.
Por eso, debes consumir una dieta rica en alimentos con magnesio y, en caso de déficit, recurrir a suplementos.
1- Mejora los síntomas del síndrome premenstrual
El síndrome premenstrual (SPM) es un problema muy común en las mujeres durante su etapa fértil que provoca síntomas como dolor abdominal, cansancio y fatiga, irritabilidad o retención de líquidos.
El magnesio puede ayudarnos a mejorar estos síntomas al equilibrar los neurotransmisores que afectan al estado de ánimo y reducir la retención de líquidos.
2- Mejora los síntomas de la menopausia
Gracias a sus funciones reguladoras de hormonas como el estrógeno, el magnesio puede ayudar a aliviar algunos síntomas de la menopausia como los dolores musculares, los sofocos o los cambios de humor.
También ayuda a fijar el fósforo en los huesos que, a su vez, ayuda a reforzar a los mismos, evitando el desarrollo de la osteoporosis. Además de inhibir la resorción ósea, el magnesio estimula la creación de hueso y participa en la actividad de la vitamina D.
3- Mejora el rendimiento físico
El magnesio es fundamental para proporcionar energía a los músculos, por eso, su ingesta ayuda a mejorar el rendimiento físico en el deporte, sobre todo en personas mayores, y reducir el cansancio y la fatiga.
4- Eleva el estado de ánimo
El magnesio participa en las funciones de los neurotransmisores, los mensajeros químicos del cerebro, por lo que unos niveles adecuados de magnesio son esenciales para mejorar el estado de ánimo y reducir problemas como la depresión. Asimismo, ayuda a regular el cortisol, lo que ayuda a calmar el sistema nervioso y reducir el estrés crónico.
5- Mejora nuestra salud general
Diversos estudios han demostrado que el magnesio participa en la regulación del azúcar, evitando el desarrollo de diabetes tipo 2, más frecuente pasados los 50 años.
También puede reducir la presión arterial alta, tanto sistólica como diastólica, lo que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
El magnesio es antiinflamatorio, reduciendo el riesgo de enfermedades relacionadas con la inflamación del organismo.
6- Previene las migrañas
El déficit de magnesio es una de las causas de las migrañas, por lo que la ingesta de suplementos de 1 gramos puede reducir los episodios y la intensidad de los mismos.
7- Ayuda a dormir mejor
Al relajar tanto los músculos como la mente, el magnesio puede ayudarnos a relajarnos y conciliar el sueño. Además, el déficit de magnesio altera la melatonina, la hormona encargada de regular nuestro reloj biológico, por lo que unos niveles adecuados son esenciales para poder dormir.
8- Aumenta el deseo sexual
El estrés disminuye la libido, por lo que el magnesio, al ayudarnos a reducir el estrés, puede ayudarnos a mejorar la falta de deseo sexual.
9- Mejora problemas estomacales
El carbonato de magnesio es un remedio natural para tratar el estreñimiento al limpiar el intestino de toxinas. Mientras que el cloruro de magnesio tiene capacidad osmótica, es decir, atrae agua al intestino, ablandando las heces y ayudando a evacuar el intestino.
El carbonato de magnesio también neutraliza los ácidos de estómago, mejorando la acidez.
En general, una alimentación saludable cubre nuestros requerimientos sin problema, pero, en ciertas etapas de nuestra vida, puede ser recomendable consumir suplementos de magnesio.