Publicidad
Plataformas de contenido para adultos: ¿Es realmente señal de empoderamiento femenino? BRAGA

Plataformas de contenido para adultos: ¿Es realmente señal de empoderamiento femenino?

Publicidad

Durante los últimos años ha existido un boom de las plataformas de contenidos para adultos cada vez más mujeres se suman a ganar dinero con ellas. Sin embargo, poco se habla de las consecuencias que pueden ocasional la venta de material erótico hacia desconocidos por vía digital.


Al escuchar hablar o leer algo sobre plataformas como OnlyFans, Arsmate y Onfayer se sabe cuáles son su contenido, aunque nunca se haya visitado o suscrito a alguna. Y es que durante estos últimos años ha existido un boom del uso de estas páginas de contenidos para adultos tanto en nuestro país como en el mundo.

Fue con la llegada de la pandemia del Covid-19 que estas plataformas aumentaron considerablemente en suscriptores así como en quienes comenzaron a ser creadoras de contenido de adultos. El confinamiento y las restricciones laborales llevaron a muchas personas a buscar ingresos adicionales, mientras que los consumidores adoptaron estas plataformas para entretenimiento y placer personal.

De hecho Onlyfans, en 2020, reportó un aumento de usuarios del 75% mensual en suscriptores. Al año siguiente, la plataforma alcanzó más de 170 millones de usuarios registrados y más de 1.5 millones de creadores de contenido. En 2023, reportó ingresos superiores a los cinco mil millones de dólares anuales.

Chile no se quedó atrás. Fue tanto el auge de esta tendencia que en 2019 nació Arsmate, plataforma de promoción y venta digital de contenido para mayores de edad que ya cuenta con más de cien mil creadores, principalmente mujeres. En está aplicación, el 90% de las ganancias se las lleva el creador de contenido, mientras que el 10% restante se lo lleva la empresa, así se genera de dinero de manera rápida, y aveces, grandes cantidades.

Onfayer y Arsmate han captado atención al ofrecer menores comisiones para los creadores y funcionalidades específicas, como mayor interacción personalizada o mejores herramientas de promoción, y por eso están creciendo rápidamente en mercados específicos, especialmente en Latinoamérica, Europa del Este y Asia.

De la política, las FF.AA a la farándula

Aunque sigue siendo un tema tabú, estas plataformas han ayudado a visibilizar la monetización de contenido para adultos y a que cada vez sea más usual ver que muchas mujeres se dedican a esto, como las faranduleras Adriana Barrientos, Faloon Larraguibel, Antonella Ríos.

Pero hay otros casos que se han hecho conocidos como es de Kimberly Villalobos Zúñiga, quien dejó la Fuerza Aérea (FACh) y dice que pasó de cabo segundo a ganar “como capitán”. También Maureen es una ex carabinero que asegura que ahora gana 7 veces más de lo que ganaba en la institución.

Incluso han habido personajes de la política que comenzaron a subir material erótico. Camila Polizzi, excandidata a alcaldesa por Concepción, comenzó a incursionar en el mundo de las plataformas de contenidos para adultos en medio de un arresto domiciliario por estafa, falsificación de documento oficial, usurpación de identidad y lavado de activos.

Luego siguió Cathy Barriga, quien incursionó en estas plataformas mientras estaba con arresto domiciliario total al ser investigada por delitos de fraude al fisco y falsificación de instrumento público.

¿Empoderamiento femenino?

En el mundo estas páginas también son muy utilizadas. Sin embargo han existido casos de un “falso empoderamiento femenino” que ha generado más de una polémica. En octubre del año pasado, Lily Phillips, creadora de contenido de OnlyFans, se impuso el reto de tener relaciones sexuales con 101 hombres en menos de 24 horas.

El reto fue documentado para YouTube en un video de unos 50 minutos titulado “I slept with 100 men in a day”. En el video se puede ver cómo fue el proceso para alcanzar el reto así como el estado anímico de Phillips.

Al finalizar el video, se puede ver a la creadora de contenido afectada y llorando al procesar todo lo que tuvo que vivir. Además, declaró que la experiencia fue extrema y que no es recomendable para “chicas débiles”. A pesar de haber llorado luego de completar el reto, Phillips anunció un nuevo reto, el que sería tener relaciones sexuales con 1.000 hombres en 24 horas.

Pero el riesgo parece ser mucho mayor. Para Marito Pinto, experto en marketing digital y creador de la campaña “Piensa Antes de Publicar”, las plataformas de contenidos para adultos han generado un falso empoderamiento entre las mujeres.

El también director de la agencia Xharla explica que “uno de los temas que más está afectando a esta sociedad en temas de vender contenido para adultos es que se le ha hecho creer a la gente, y en especial a las mujeres, que esa es la forma en la que se empoderan y que van a poder hacer mucho dinero”.

Un trabajo sexual

Camila Cánovas, psicóloga clínica enfocada en género y sexualidad, plantea que “esto es sí o sí un trabajo sexual, porque estoy intercambiando sexo, fantasía e interacción por dinero. Pero, ¿por qué estamos hablando de esto? por la moralidad, porque cómo es posible de que alguien esté ganando esta cantidad de dinero, o sea su propia jefa, vendiendo su cuerpo y su imagen. Entonces también está todo este debate de si es o no prostitución”.

La psicóloga abre una nueva arista en cuanto a saber quienes son los que consumen este contenido y el porqué lo hacen. “Y es que no pagan solo por las fotos. También pagan por un ‘contacto’, pero esa comunicación más personalizada con la creadora de contenido ya no es solo el consumo despersonalizado, si no un consumo con esa ‘fantasía’ de forma más personalizada y protegida por cierto grado de anonimato”, agrega. 

Y si bien en estas plataformas, son las creadoras de contenido erótico quienes fijan los precios, los valores de las suscripciones, entre otras decisiones, existen riesgos que hay que considerar. Según Pino existe una contraposición entre lo que es empoderarse realmente y que tanto poder real tienen las creadoras de contenido, “porque a la larga, los que terminan teniendo el poder son las personas y usuarios que compran ese contenido”.

En cuanto al tema de Barriga y Polizzi, quienes comenzaron a subir contenido erótico desde sus hogares debido a los arrestos domiciliarios que enfrentaron, Pino explica que “con respecto a quienes están, por ejemplo, con arresto domiciliario, es cierto que todos tenemos derecho al trabajo, pero también tenemos una responsabilidad social y civil frente a nuestra privacidad y a las cosas que ponemos en internet”.

No todo lo que brilla es oro

Existen consecuencias que repercuten en la vida de las creadoras de contenido de las que poco habla. Por ejemplo, han habido casos de acoso sistemático por medio de estas plataformas. En 2021, una joven de 21 años dio a conocer como un suscriptor de su cuenta de OnlyFans se había obsesionado con ella al punto de seguirla por la calle e incluso seguirla durante unas vacaciones en Ibiza. De esta forma, las creadoras de contenido van perdiendo control sobre quienes son sus suscriptores y el trato que recibirán.

Un informe de 2021 publicado por The Avery Center, una ONG que tiene como objetivo empoderar a las víctimas del tráfico sexual comercial, encontró que el 30 por ciento de los creadores de contenido de OnlyFans que encuestaron habían recibido correos electrónicos y notificaciones de la plataforma informándoles que su perfil sería eliminado si no publicaban contenido nuevo.

Por otro lado, un estudio realizado en 2021, dictaminó que las creadoras de contenidos en la OnlyFans se enfrentan a consecuencias más duras comparadas con los creadores masculinos. Existe una visión negativa respecto a la venta de contenido sexual por parte de mujeres. En el estudio se “encontró que la sociedad percibe a las mujeres que se dedican al trabajo sexual de una manera devastadoramente negativa. Específicamente, los investigadores descubrieron que la decisión de una mujer de involucrarse en el trabajo sexual la convertía en blanco de acoso, deshumanización y prejuicio”.

Para Marito Pino, “falta decirle a la gente que hace este tipo de cosas cuánto realmente se exponen. Hay personas que después de usar Onlyfans durante mucho tiempo tienen traumas psicológicos, tienen acosadores, tienen personas que las vulneran todo el tiempo. Porque si tú estás todos los días en tu casa y publicas desde ahí a toda hora, la posibilidad de que alguien termine descubriendo dónde vives, a qué hora te levantas, o cosas así es mucho más expuesto y de una manera peligrosa”.

El experto además plantea que “la gente no se da cuenta que todo eso que se publica en Internet después va a seguir en Internet, porque aunque tenga un candadito y no se pueda ver el contenido abiertamente, si alguien le hace un screenshot o copió y reenvió, se puede publicar abierta e indefinidamente. Y ese contenido va a perseguirte de por vida”.

Un futuro incierto

Si bien cualquier mayor de edad puede hacer uso de estas páginas, son las mujeres quienes, principalmente, las utilizan como método de trabajo debido a la inmediatez con la que se reciben los pagos.

Si bien es importante analizar quién produce el contenido y el porqué, para Camila Cánovas es importante ver cómo estas plataformas hablan de cómo funcionamos como sociedad. “Lo que más puede afectar no es tanto el uso de OnlyFans en sí, sino que la mayor consecuencia mental es tener el prejuicio social que queda al haber hecho eso”, sostiene.

Por ahora estas plataformas están experimentando un crecimiento exponencial, especialmente en lugares donde el acceso a herramientas de monetización digital era limitado. Sin embargo, su éxito futuro dependerá de cómo se manejen los desafíos regulatorios, tecnológicos y éticos. Y como en todo mercado de oferta y demanda, a medida que sigue creciendo, la competencia interna entre creadores aumenta, lo que dificulta destacar y por lo tanto, monetizar.

Marito Pino además plantea que “tenemos que enseñarle a la gente que hay otra forma de hacer negocios y que realmente esta suerte de prostitución digital no es la única manera en que se puede ganar mucho dinero. Hay muchas otras formas de monetizar incluso desde la casa, con negocios por Mercado Libre y envíos, onse pueden hacer livestream y no necesariamente vulnerar la privacidad y el cuerpo de las mujeres”.

Publicidad

Tendencias