Durante la menopausia ocurren cambios físicos, psicológicos y sexuales que pueden repercutir en la confianza de quienes pasan por esta etapa, afectando a todos los aspectos de su vida. Una especialista entrega consejos para hacer este tránsito de la mejor manera.
La menopausia es un proceso natural que se define como la ausencia de sangrado menstrual durante 12 meses. En 2025 habrá 1.100 millones de mujeres viviendo con menopausia en el mundo. Se trata de un grupo de personas que se encuentra en la plenitud de su vida, y en pleno desempeño de actividades de las que depende la sociedad. Sin embargo, todavía muchas de ellas viven esta etapa como algo negativo, debido a los cambios en su cuerpo y a algunos de los síntomas que experimentan.
Tanto la perimenopausia —periodo anterior a la menopausia—, como la posmenopausia se caracterizan por cambios significativos en el equilibrio hormonal del cuerpo de la mujer; en particular, por la disminución de los niveles de estrógenos y progesterona. Los cambios hormonales que conducen a la menopausia suelen comenzar a mediados de la década de los 40 años, y pueden desencadenar una serie de síntomas físicos, mentales y sexuales que constituyen un gran desafío para quienes los viven.
La disminución de los niveles de estrógeno en las mujeres tiene un profundo impacto en su organismo y suele ir acompañada de síntomas importantes, como sofocos o dolores articulares. “Los estrógenos ayudan a regular el funcionamiento de muchos órganos y sistemas, como el cerebro, los órganos sexuales, los huesos, los músculos, los vasos sanguíneos y la piel”, explica la Directora Médica de Abbott, la Dra. Milagro Sosa.
La menopausia también está marcada por el final de la edad fértil, lo que puede causar un impacto psicológico en las mujeres y sus familias.
“Aunque la menopausia es natural e inevitable, es importante conocer sus mecanismos y posibles consecuencias, así como la forma de afrontar este momento tan especial en la vida de la mujer para mantener una buena calidad de vida. Un paso fundamental es hablar con los médicos y los familiares”, indica la Dra. Milagro Sosa.
Más allá de sus síntomas, el proceso de menopausia puede significar un impacto para la salud de quien pasa por esta etapa. Pasar por la menopausia sin un adecuado tratamiento puede traer diversas consecuencias para la salud, entre las que se cuentan:
Dadas todas sus posibles consecuencias, es importante hablar de la menopausia y establecer un plan de cuidados con un médico. “Con cambios de estilo de vida y un tratamiento adecuado, las personas pueden aliviar los síntomas de la menopausia, proteger su salud a largo plazo y vivir en plenitud este nuevo capítulo en sus vidas”, dice la Dra. Milagro Sosa.
La menopausia suele producirse en torno a los 50 años, siendo la edad habitual entre los 45 y los 55 años. En aproximadamente un 1% de los casos, la menopausia puede producirse antes de los 40 años, lo que se denomina menopausia precoz.
Las personas con menopausia precoz pueden sufrir enfermedades neurológicas, disfunción psicosexual, trastornos del estado de ánimo, osteoporosis, cardiopatía isquémica e infertilidad.
Las razones de la menopausia precoz no siempre están claras, pero las enfermedades autoinmunes, la infección por paperas, el tabaquismo, la radioterapia y la quimioterapia, la cirugía de ovarios o el tratamiento prolongado con la hormona liberadora de gonadotropinas GnRH se consideran a veces causas potenciales.
“En caso de menopausia precoz, debe consultarse urgentemente a un médico para establecer la causa y diseñar un plan de cuidados para tratarla”, indica la Dra. Milagro Sosa. En efecto, las personas con menopausia precoz corren un mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y fragilidad ósea.
Si notas que tienes síntomas de menopausia, ponte en contacto con un profesional de la salud para que puedas contar con el tratamiento adecuado.