Según la Organización Mundial de la Salud, cada dos minutos muere una mujer de cáncer de cuello uterino, y los nuevos casos de este tipo de cáncer se están incrementando a un ritmo alarmante en todo el mundo. Cifras que podrían evitarse mediante la vacunación sistemática contra el VPH
El virus del papiloma humano o VPH, es la infección de transmisión sexual (ITS) más común en la población, provocando cáncer y sin distinguir sexo, identidad de género u orientación sexual. En 2022, unas 350.000 mujeres murieron de cáncer de cuello uterino, y se registraron alrededor de 660.000 nuevos casos.
Cuando se logra combinar los servicios de detección y tratamiento del cáncer de cuello uterino, las vacunas contra el VPH son fundamentales como plan de acción para eliminar esta mortal enfermedad.
Según datos del Instituto de Salud Pública, 16% de las mujeres chilenas están infectadas con VPH. Los problemas que puede causar esta infección pueden ser desde verrugas genitales hasta varios tipos de cáncer, siendo el VPH la causa del cáncer cervicouterino, el cuarto cáncer más común entre el género femenino. En nuestro país mueren 2 mujeres al día por este tipo de cáncer.
El VPH es un virus distinto al del VIH y al del herpes, siendo tan común que, de acuerdo con cifras de la Organización Panamericana de la Salud, se estima que el 90% de las personas se infectarán con Papiloma Humano en algún momento de su vida.
El virus se contagia facilmente por contacto de piel a piel, cualquier persona sexualmente activa al tener relaciones sexuales orales, vaginales o anales. Esta ITS puede transmitirse incluso cuando el portador infectado no presenta signos visibles ni síntomas. También, los síntomas pueden presentarse años después de tener relaciones sexuales con la persona infectada.
La Unicef indica que ya hay más de 130 países que han incluido las vacunas contra el VPH en sus calendarios sistemáticos de vacunación, pero eso no es suficiente. Millones de mujeres y niñas, sobre todo en los países más pobres del mundo, todavía carecen de acceso a las vacunas y a los servicios de detección y tratamiento que podrían salvar sus vidas.