
Prevención y mitos del cáncer cervicouterino en Chile: estrategias urgentes para salvar vidas
El cáncer cervicouterino es una grave amenaza para la salud de las mujeres en Chile, con alrededor de 600 muertes anuales. La prevención a través de la vacuna contra el VPH, la detección temprana y el tratamiento adecuado son claves para reducir los riesgos.
El 26 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Cáncer Cérvicouterino, uno de los más mortales en Chile. Diariamente dos chilenas fallecen a causa de esta patología y ya se transformó en una grave amenaza para la salud de las mujeres en el país, a pesar de ser una enfermedad altamente prevenible. Las alarmantes estadísticas exigen una acción colectiva y un enfoque renovado en la prevención.
En Chile, cada año, cerca de 600 mujeres pierden la vida a causa del cáncer cervico uterino y se diagnostican aproximadamente 1,500 nuevos casos de esta enfermedad. Según datos del Departamento de Estadísticas e Información de Salud del Minsal, el cáncer cervicouterino se ha convertido en la segunda causa de muerte en mujeres de entre 20 y 44 años, un hecho que subraya la urgencia de abordar este problema de salud pública.
VPH: El principal culpable, pero la prevención es la clave
El 99% de los casos de cáncer cervicouterino están directamente relacionados con la infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH). Este virus es una de las infecciones de transmisión sexual (ITS) más comunes. A pesar de su alta prevalencia, el cáncer cervicouterino asociado es absolutamente prevenible mediante intervenciones adecuadas, señala la ginecóloga y obstetra de la Universidad de Chile, Elizabeth Chong.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha establecido un ambicioso objetivo para eliminar el cáncer cervicouterino para el año 2030. La estrategia 90-70-90 define tres metas cruciales:
● 90% de cobertura de vacunación: Vacunar al 90% de las niñas contra el VPH antes de los 15 años.
● 70% de cobertura de tamizaje: Lograr que el 70% de las mujeres sean examinadas para detectar cáncer cervicouterino antes de los 35 años y nuevamente antes de los 45.
● 90% de cobertura de tratamiento: Tratar al 90% de las mujeres diagnosticadas con cáncer cervicouterino en fases tempranas y asegurar que todas las mujeres con cáncer invasivo reciban tratamiento adecuado.
La doctora Chong resalta que, “la prevención del cáncer cervicouterino tiene diferentes niveles. A nivel primario, la vacunación contra el VPH es esencial, y debe ser administrada a las niñas y niños desde los 9 años. La vacuna es segura y eficaz para prevenir la infección por VPH y, por ende, el cáncer cervicouterino. Mientras a nivel secundario, la detección temprana mediante el Papanicolaou (PAP) y las pruebas de VPH juega un rol crucial. Es importante incluir también aquellas medidas generales como el establecimiento de una vida y hábitos saludables, así como el uso de preservatovo.”
María Elizabeth Guesalaga, presidenta de la Fundación Mujeres por un Lazo, explica que la importancia de visibilizar este día se basa en que “es uno de los pocos cánceres que es prevenible. Existe una vacuna, además si es detectado tiempo es prácticamente 100% curable prácticamente, y es el quinto cáncer de mayor incidencia y mortalidad en mujeres en Chile”.
“Este virus del papilomomano es responsable de casi el 100% de los cánceres cervicuterinos, y de un porcentaje superalto, entre el 70 y 75%, de cáncer de ano, de pene, de vulva, de vagina, y de verrugagenitales”, agrega.
Mitos y realidades sobre el VPH y el cáncer cervicouterino
Es importante aclarar varios mitos relacionados con el VPH y el cáncer cervicouterino:
Mito: El cáncer cervicouterino es poco frecuente.
Realidad: El cáncer cervicouterino es la cuarta causa de muerte por cáncer en mujeres a nivel global, y en Chile, sigue siendo una de las principales preocupaciones de salud pública.
Mito: Solo las mujeres que han tenido múltiples parejas sexuales están en riesgo.
Realidad: El riesgo de infección por VPH aumenta con cualquier tipo de contacto sexual, independientemente de la cantidad de parejas sexuales.
Mito: Si no se ha comenzado la vida sexual, no se necesita la vacuna contra el VPH.
Realidad: La vacuna contra el VPH debe aplicarse antes de cualquier exposición al virus, idealmente en niñas y niños después de los 9 años.
A medida que se acerca el objetivo global de la OMS de eliminar el cáncer cervicouterino para 2030, es vital que las políticas públicas en Chile promuevan la vacunación, la detección temprana y el tratamiento adecuado para todas las personas.