
Radiografía de la salud femenina en Chile: principales enfermedades y cómo prevenirlas
Las mujeres chilenas enfrentan riesgos crecientes de enfermedades cardiovasculares, ACV, cáncer de mama y enfermedad renal crónica. Expertos destacan la importancia de la prevención, detección temprana y hábitos saludables para mejorar la calidad de vida femenina.
Las mujeres en Chile viven más años que los hombres, pero no necesariamente con mejor salud. Según diversas fuentes del país, las enfermedades cardiovasculares, el accidente cerebrovascular (ACV), el cáncer de mama y la enfermedad renal crónica (ERC) se han consolidado como las principales amenazas para la salud femenina, con una alta prevalencia, incidencia y mortalidad. A pesar de los esfuerzos en prevención y diagnóstico temprano, las cifras siguen siendo preocupantes y exigen una mayor concientización.
Accidente cerebrovascular: un riesgo creciente en mujeres jóvenes
De acuerdo con datos del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) el ACV es una de las principales causas de muerte y discapacidad en mujeres. La neuróloga Paula Muñoz, directora del Centro de Estudio Clínicos de la Universidad del Desarrollo, explica que “las enfermedades cardiovasculares, incluyendo el ACV, han ido en aumento en los últimos años, en parte, debido a una mayor esperanza de vida, pero también por el incremento de factores de riesgo como la hipertensión, diabetes, sedentarismo, el colesterol elevado, el sobrepeso, la obesidad y el tabaquismo”.
Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en 2019, las enfermedades cardiovasculares (ECV) causaron 40,8 millones de años de vida ajustados por discapacidad (AVAD) en la Región de las Américas. De estos, 36,4 millones correspondieron a años de vida perdidos por muerte prematura (YLLs), representando el 89% del total de AVAD por ECV, y 4,5 millones a años vividos con discapacidad (AVD). La cardiopatía isquémica y el accidente cerebrovascular son las dos principales causas de mortalidad y discapacidad por ECV. “Es preocupante que cada vez más mujeres menores de 50 años estén sufriendo ACV. Factores como la menopausia precoz, la hipertensión en el embarazo, la preeclampsia y el uso de anticonceptivos combinados con dosis altas pueden aumentar el riesgo”, agrega la Dra. Muñoz.
La clave para reducir la incidencia de ACV está en la prevención, indica la especialista:
● Mantener una presión arterial saludable.
● Realizar actividad física.
● Alimentarse de manera balanceada.
● Evitar el tabaco y el alcohol.
● Controlar el estrés.
● Conocer los síntomas para actuar rápidamente ante una emergencia.
Enfermedad renal crónica: un riesgo poco visible pero grave
Cifras del Instituto de Políticas Públicas en Salud (IPSUSS) indican que la enfermedad renal crónica (ERC) tiene una prevalencia de 14.5% en mujeres chilenas, más del doble que los hombres. “La ERC es una enfermedad silenciosa. Muchas mujeres no presentan síntomas hasta que ya está en una etapa avanzada”, advierte la Dra. María Esperanza Selame, especialista en Nefrología.
La diabetes y la hipertensión son los principales factores de riesgo para desarrollar ERC, pero las mujeres tienen otros factores adicionales. “Complicaciones durante el embarazo, como la preeclampsia, pueden dejar una huella permanente en la salud renal. También las enfermedades autoimnunes, como la nefropatía lúpica, que es hasta 15 veces más frecuente en mujeres”, agrega la doctora.
Un factor clave en la progresión de la ERC es el sobrepeso. “El 75% de la población chilena tiene sobrepeso, siendo más prevalente en mujeres. Esto aumenta el riesgo de desarrollar hipertensión y diabetes, y por ende, de daño renal”, señala Selame.
Algunas de las claves para la prevención incluyen:
● Mantener un peso saludable.
● Llevar una dieta equilibrada.
● Realizar chequeos regulares de función renal, especialmente si hay antecedentes de infecciones urinarias recurrentes o hipertensión.
Enfermedades metabólicas: el impacto de la obesidad en la salud femenina
La obesidad es la enfermedad metabólica más frecuente en mujeres y un factor clave en el desarrollo de otras patologías como diabetes, hipertensión, hígado graso y apnea del sueño. Además, genera problemas osteoarticulares como artrosis en rodillas, caderas y tobillos, afectando la calidad de vida.
“La resistencia a la insulina, que es la antesala de la diabetes, está fuertemente ligada al exceso de grasa en el organismo y a hábitos poco saludables como el sedentarismo y una mala alimentación”, explica la Dra. Verónica Mujica, especialista en enfermedades metabólicas. La menopausia también influye, ya que favorece la acumulación de grasa abdominal, la más perjudicial para el metabolismo.
Algunas medidas clave para prevenir la obesidad y las enfermedades metabólicas son:
● Reducir el consumo de azúcares y harinas refinadas, especialmente en la noche.
● Priorizar una alimentación basada en verduras y proteínas en la cena.
● Aumentar la actividad física, incluyendo ejercicios de fuerza como pesas o bandas elásticas.
● Evitar mitos alimentarios, como creer que los jugos de fruta son siempre saludables o que el pan integral no aporta calorías.
● Consumir grasas saludables en cantidades moderadas, como aceite de oliva, paltas, semillas y frutos secos.
● Mantener una hidratación adecuada y evitar bebidas azucaradas.
Cáncer de mama: Detección temprana como clave de supervivencia
El cáncer de mama es el más frecuente en mujeres chilenas, y la principal causa de muerte por patologías oncológicas en este grupo. Según datos de la Fundación Chile sin Cáncer, cada año se diagnostican cerca de 5.600 casos nuevos, donde 9 mujeres son diagnosticadas y 3 de ellas mueren al día, por lo que se enfatiza en que la detección temprana sigue siendo la mejor herramienta, recomendando realizarse una mamografía anual a partir de los 40 años.
Algunas maneras de prevenir su avance son:
● Mantener un peso adecuado.
● Evitar el tabaco y el alcohol.
● Realizar actividad física de manera regular.
● Realizar el auto examen de mamas – NO reemplaza la mamografía.
Un llamado a la acción: priorizar la salud femenina
Si bien las mujeres tienen un a mayor expectativa de vida, esto no siempre se traduce a una mejor calidad de vida. Factores sociales también influyen: muchas veces las mujeres postergan sus controles de salud por cuidar a sus familias. Sin embargo, priorizar el autocuidado y la prevención es clave para reducir el impacto de estas enfermedades.
En esta línea, la Dra. Paula Muñoz, la Dra. María Esperanza Selame y la Dra. Verónica Mujica participaron recientemente en el evento Women Get Loud, organizado por Boehringer Ingelheim y diseñado para inspirar a la comunidad médica femenina y fomentar la educación continua en el cuidado integral de la mujer, abordando aspectos cardio-neuro-renal-metabólicos. Esta instancia destacó la importancia de generar espacios de discusión y colaboración para enfrentar los principales desafíos de salud femenina en Chile.
“Cada pequeño cambio en el estilo de vida puede hacer una gran diferencia en la prevención de enfermedades crónicas. Es fundamental tomar conciencia y realizarse chequeos médicos regulares”, concluyen las especialistas.
La invitación está hecha: actuar hoy para garantizar un mañana más saludable para todas las mujeres chilenas.