BRAGA
Poeta y ensayista chilena, Soledad Fariña, ha forjado una carrera literaria que se ha convertido en una guía para nuevas generaciones. Desde su debut en los años 80 hasta recibir prestigiosos premios, su trayectoria es un testimonio de su valentía y dedicación a las letras.
A sus 80 años, Soledad Fariña, es mucho más que un testimonio de la pasión por la palabra. Su ingreso tardío al mundo editorial, a los 42 años, su exilio en Suecia tras el Golpe de Estado y su activismo político han marcado una carrera literaria que, hoy, la consagra como una de las figuras más influyentes de la poesía chilena.
Por esto, en un nuevo Mujeres Inolvidables, el especial semanal en donde destacamos las importantes hazañas de mujeres chilenas de la historia y el presente, visibilizamos el impacto de Soledad Fariña quien se ha convertido en una de las exponentes literarias más relevantes de Chile.
Fariña, nacida en Antofagasta, encontró su voz poética en circunstancias inusuales. Después de estudiar Ciencias Políticas y Administración, se vio obligada a trabajar para sostener su hogar. Su vida dio un giro durante el exilio en Suecia entre 1973 y 1978, donde, lejos de su tierra natal, se sumergió en la escritura y comenzó a cultivar su propia voz literaria.
Carruaje de pájaros
En 1985, a la edad de 42 años, Fariña irrumpió en la escena literaria chilena con “El primer libro”, un volumen de poesía experimental que marcó el comienzo de su carrera. A lo largo de los años, ha publicado más de una decena de títulos, incluyendo “Albricia” (1988), “En amarillo oscuro” (1994) y la destacada antología “Pide la lengua” (2017).
Además de ser una prolífica autora, ha impartido clases de literatura y literatura infantil en la Universidad de Chile y dirigido talleres de poesía en diversas escuelas en Santiago y regiones de Chile. Además de cursos de escritura creativa en las Universidades Diego Portales, Finis Terrae y Universidad Mayor.
Su compromiso con la palabra se vio reconocido con la Beca Guggenheim y el Premio Municipal de Literatura de Santiago, honores que destacan su impacto en la escena literaria.
El punto culminante de su carrera llegó con la primera entrega del Premio Plagio a la Creatividad Artística, donde se destacó su obra como un hito en la industria creativa. Este galardón, creado por la Fundación Plagio, tiene el propósito de visibilizar trayectorias en las áreas literarias, artísticas y audiovisuales, subraya la importancia de su contribución a la tradición literaria chilena.
En una reciente entrevista con La Tercera, Soledad Fariña reflexionó sobre su participación en la generación literaria de los 80, compartiendo experiencias junto a escritores notables como Raúl Zurita, Elvira Hernández y Diamela Eltit. Su compromiso con la experimentación y su capacidad para fusionar la tradición con lo contemporáneo la han convertido en una voz única y esencial en el panorama literario.
Hoy está ad portas de lanzar un nuevo libro que mezcla poesía, ensayo y testimonios de la vida durante la Unidad Popular y el golpe de Estado. El protagonista de la obra es el mismo Salvador Allende, quien se encontrará con diversos personajes después de la muerte.
A sus 80 años, Soledad Fariña sigue desafiando expectativas, demostrando que la poesía es un arte intemporal que puede florecer en cualquier etapa de la vida. Su legado perdura como una inspiración para aquellos que buscan encontrar su propia voz en las palabras.
