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La familia: La razón por la que las mujeres C3 y D están a favor del aborto legal BRAGA

La familia: La razón por la que las mujeres C3 y D están a favor del aborto legal

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Mediante un estudio, , realizado en mujeres entre 18 y 40 años de estratos C3 y D, en las ciudades de Antofagasta, Santiago y Concepción, se encontró un consenso respecto al aborto legal en el derecho a decidir sobre la planificación familiar.


“Porque las mujeres de Chile merecen su derecho a decidir”, dijo el Presidente Gabriel Boric cuando anunció el ingreso a trámite de un proyecto de ley de aborto legal en la cuenta pública de este 1 de junio. Y, en la historia del debate de derechos sexuales y reproductivos, mucho se ha hablado sobre el derecho de las mujeres a decidir sobre nuestros propios cuerpos, como la razón principal para defender el derecho al aborto legal, sin causales. Pero existen otros argumentos que profundizan en ámbitos de la sociedad poco explorados.

Como conjunto, hemos podido estudiar cómo sobre todo las mujeres jóvenes de clases populares en Chile respaldan su apoyo al aborto legal; cómo hablan del tema, y qué razones esgrimen. En este estudio, realizado en mujeres entre 18 y 40 años de estratos C3 y D, en las ciudades de Antofagasta, Santiago y Concepción, durante noviembre de 2023 y enero de 2024, encontramos un consenso prácticamente transversal en que los anticonceptivos pueden fallar y que esa no debería ser la razón para traer un hijo o hija al mundo. Pero lo más mencionado como razón para estar de acuerdo con la existencia del aborto legal, es el derecho a decidir sobre la conformación de nuestras familias.

El ámbito económico es la principal preocupación de las mujeres a la hora de hablar de familia. Mencionan a niños y niñas abandonados por padres y madres que no son capaces de hacerse cargo de sus necesidades físicas ni emocionales.

“Es una realidad que es para muchas mujeres, que no tienen los recursos económicos ni tampoco los recursos sociales ni, algunas veces, mentales, para cuidar a un niño, sobre todo, las que son más jóvenes. Es fácil criticar, cuando uno está fuera de ese entorno, pero, para esas personas se les hace muy difícil tener que darles una vida buena a niños que no planeaban tener”, comentó una de las mujeres entre 18 a 25 años en la investigación, en la misma línea otras mujeres jóvenes reflexionaron que “hay mucha gente que no está en condiciones para tener un hijo y no es algo tan simple como decir: ¿por qué se embarazó?, los métodos anticonceptivos fallan. La gente cree que, si se legaliza el aborto, todo el mundo va a ir a abortar y no es así. El aborto es la última instancia”.

Por otro lado, también destacan que son las mujeres las que principalmente tienen que hacerse cargo económicamente de sus hijos e hijas, enfrentando parejas que deciden no pagar pensiones de alimentos, a pesar del endurecimiento de las leyes, y que finalmente son ellas quienes deben dedicarse a perseguir judicialmente a los deudores.

“El hombre puede hacer lo que quiera, tú le dices que estás embarazada y el hombre se puede ir, tiene la elección de si paga o no paga pensión, porque, por mucho que digas que puso la orden de detención, muchas veces, no te pagan. Tú, ¿de dónde sacas plata, de donde puedas? (…) Al hombre se le permite… si quiere o no, estar presente en la paternidad y si, más encima, quiere o no dar plata, para que tu hijo coma, porque, la plata no va a ser para ti, la plata es para tu hijo. Muchos papás no entienden eso”, reflexiona una de ellas.

Esto se suma a que en su mayoría, al preguntarles sobre sus sueños y realizaciones, mencionan poder estudiar algo que les guste, trabajar en lo que estudiaron, tener un trabajo estable y poder acceder a una vivienda donde criar a sus hijos e hijas. Por lo tanto, el derecho a elegir la conformación de sus familias, va en directa relación con sus proyectos de vida.

El factor de autonomía que las mujeres destacan, no se enfoca en decidir por sus propios cuerpos, sino que en sus planes de vida, particularmente, sus planes familiares. La autonomía corporal parece no tener un puesto prioritario en la mayoría de los casos. Entonces podemos concluir que; derecho a decidir, sí, pero sobre las proyecciones y planes de vida, que se conectan directamente con sueños de estabilidad económica y familiar.

Es importante notar que en el estudio incluso observamos a mujeres que se autodefinieron como “religiosas”, y declararon estar a favor del aborto legal, precisamente por cómo valoran a la familia y también por su mirada sobre la realidad social de niños y niñas que sufren el abandono.

“Yo también, a pesar de que voy a la iglesia, creo en Dios y la biblia, puedo decir otra cosa. Creo en el aborto libre, porque el aborto siempre va a existir, aunque lo prohíban, aunque lo castiguen, el aborto siempre va a estar y, la mejor manera, es que sea aborto libre y seguro, para que, así no sufran las mujeres, que, muchas veces, mueren en estos abortos. Muchas veces, las mujeres que tienen aborto seguro, son personas que tienen plata, porque, si una mujer no tiene plata y no tiene los medios, puede tener muchos daños, con el pasar del tiempo”, señala una de las mujeres estudiadas.

Finalmente, destacamos que el estudio, en el que pudimos escuchar a un centenar de mujeres en diferentes ciudades, todas ellas sin una identificación política en el eje izquierda o derecha, nos lleva a pensar que la demanda de aborto legal va más allá de la orbe política, religiosa, o incluso feminista. Hay un impulso amplio dentro del universo de las mujeres jóvenes C3 y D que, en la mayoría de los casos, están desconectadas del movimiento feminista, o marcan distancia con él. Entonces ¿es realmente un guiño de Boric a “su público” o es una política que viene a resolver preocupaciones reales de las mujeres en Chile?

Revisa aquí el informe de Mujeres en Política

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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