El director de este proyecto global, que busca anticipar las problemáticas surgidas de la velocidad con que cambia la sociedad, sostiene que volverse más capaces para enfrentar el futuro no está relacionado con el cambio tecnológico, «sino que está motivado por nuestro deseo de respetar la diversidad, de ser abiertos e innovadores, de abrazar la complejidad». Para el economista –que participó en los 90 de la discusión en la OCDE sobre las oportunidades de internet y que llegó a Chile invitado por el Consejo Nacional de Innovación para el Desarrollo– más importante que pensar en «cómo colonizaremos el futuro, es qué legado vamos a dejar para el futuro».