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Menoscabo a mujeres rockeras de director de Cosquin Rock desata viral en repudio: «No faltan talentos, sobran imbéciles»

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Marco Fajardo Caballero
Por : Marco Fajardo Caballero Periodista de ciencia, cultura y medio ambiente de El Mostrador
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Ruidosa Fest analizó 66 festivales de la región durante 2016, 2017 y la primera mitad de 2018, y la participación de mujeres no superó un cuarto de los números artísticos. «Los números siguen desalentadores con una baja participación de mujeres en la región», indica el análisis. Tras conocerse los resultados del estudio, el organizador de Cosquín Rock, José Palazzo -cuyo festival aparece con apenas un 2% de mujeres en el line up- afirmó que «no hay suficientes mujeres con talento a la altura». La polémica generó un profundo rechazo que se materializó en el video «No faltan talentos, sobran imbéciles» de la multiinstrumentista Clara Cantore.


Un reciente estudio de Ruidosa Fest para medir el avance en la participación de mujeres en los escenarios musicales de Chile, Colombia, Argentina y México concluyó que no más de 20 % figuran en el line up de los principales festivales de estos países.

El estudio, para el que entidad analizó 66 festivales de la región durante 2016, 2017 motivó una reacción inesperada del organizador del festival argentino Cosquín Rock, José Palazzo, que ha provocado un repudio generalizado en redes sociales. «No hay suficientes mujeres con talento a la altura» sostuvo.

El festival de Palazzo realizó su versión 19 el pasado 9 y 10 de febrero en la ciudad trasandina de Córdoba, y en el estudio figura con un magro 2% en participaciones femeninas.

“Si yo tuviera que poner el 30 por ciento, tal vez no lo podría llenar con artistas talentosas y tendría que llenarlo por cumplir ese cupo; esas artistas no estarían a la altura del festival y tendría que dejar afuera a otro tipo de talentos”, manifestó el productor al diario argentino Perfil.

Sus dichos desataron la furia de la compositora y multiinstrumentista cordobesa Clara Cantore, quien subió un video con una canción dedicada a Palazzo: «No faltan talentos. Sobran imbéciles», que se volvió inmediatamente viral.  «Acá no falta talento, quizás vos estés lento en comprensión. La música también es madre, por eso perdona al idiota que creyó ser su dueño».

La cantante remata publicando “Palazzo gracias a vos descubrí mi verdadero talento: escribir hits para los Gilazzos como vos… gracias y ojalá sigas siendo el muso inspirador de talentos femeninos”.

Para la autora del libro Mujeres en la música chilena: la invisibilización de su legado (UDLA, 2018), Yasna Rodríguez, los comentarios de Palazzo van «por el lado de la ignorancia».

«Declaraciones como esas demuestran que el problema viene desde dentro, desde productores, desde gente que se encarga de estos festivales, que tienen este pensamiento machista y egoísta de creer que la mujer, por ser mujer, no puede tener talento y ser virtuosa con algún instrumento», apostilló.

Punto de partida

Un primer estudio de Ruidosa Fest en el año 2016, tras el análisis de 25 festivales en 2016 y 17 en 2017 en países de la región, concluyó que el porcentaje de números artísticos de mujeres (tanto solistas o bandas exclusivamente de mujeres) correspondía solo a un 9,5% del total, y aumentaba a un modesto 22,5% si se consideran las bandas mixtas.

Desde entonces han comenzado diversas iniciativas para revertir esta situación, entre otros con festivales con una parrilla exclusivamente femenina (como Ruidosa, La Matria, FemFest, por nombrar algunos), «que se crean por estos mismos personajes que le cierran las puertas a las mujeres», comenta Rodríguez.

Actualización

Para saber si había cambios en el panorama, las investigadoras compararon el estudio con el análisis de festivales realizados en la segunda mitad del 2017 y primera mitad del 2018 en Argentina, Chile, Colombia y México, «para observar si han habido avances en la presencia de mujeres sobre el escenario».

Se analizaron 66 carteles de festivales realizados en estos cuatro países durante 2016 (25 festivales), 2017 (25 festivales) y la primera mitad de 2018 (16 festivales). También se incluyeron los carteles del festival norteamericano Ruido Fest, realizado en Chicago, con una parrilla exclusivamente latina, durante el mismo período.

El análisis de más de 3.000 artistas y bandas mostró que la participación de mujeres (solistas y bandas de mujeres) no superó el 10% de los números artísticos en cada uno de los tres años analizados: 9,1% en 2016, 10% en 2017 y 10,1% en 2018, manteniéndose constante a través de los tres años.

Si se incluyen las bandas mixtas (que tienen al menos una mujer en el grupo), esta cifra sube a casi un cuarto de los números artísticos: 23,1% en 2016, 21,7% en 2017 y 23,9% para la primera mitad del 2018.

«Esto evidencia nuevamente la significativa disparidad en representación de géneros en el escenario: siete a ocho de cada 10 números artísticos en los carteles de los festivales de la región han sido hombres solistas o bandas de hombres durante los tres últimos años», indica la investigación.

Esfuerzo argentino

Si se miran las tendencias de los festivales por país, se observa que tres de los cuatro países analizados (Chile, México y Colombia) presentan porcentajes similares de participación de mujeres.

«Esto quiere decir que considerando números artísticos de mujeres y bandas mixtas, el porcentaje de representación está entre 20 y 30%. Sin embargo, Argentina presenta números de participación inferiores (entre 14% y 20%) en los tres años para esta misma categoría, en comparación con el resto de los tres países de la región», se sostiene en el documento.

Si se descuentan los proyectos mixtos, la participación exclusivamente femenina en festivales varía entre un 7,4% y un 4,6%. Es decir, hay un promedio de una solista o banda de mujeres por cada 14 solistas o bandas de hombres incluidos en las parrillas de los festivales.

En este contexto, Ruidosa Fest destaca que en Argentina existen varios esfuerzos para generar una industria musical más equitativa.

Por ejemplo, existe el proyecto de ley que busca lograr la inclusión efectiva de la mujer en la actividad musical en vivo en escenarios argentinos.

Además, el Instituto Nacional de la Música (INAMU) ha propuesto una agenda para abordar temáticas específicas de género y la realización de una encuesta nacional para caracterizar y situar a las mujeres que trabajan en la industria musical.

Los mejores y peores festivales

¿Cuáles son los festivales con menor participación exclusivamente femenina?

En el estudio inicial, el equipo de Ruidosa Fest analizó los festivales con menor porcentaje de números artísticos protagonizados solo por mujeres (solistas y bandas) de 2016. En el 2017, estos corresponden al festival argentino Personal Fest y Fauna Otoño de Chile, que no tuvieron mujeres solistas o bandas de mujeres en sus escenarios (0%), Cosquín Rock (Argentina) con solo un 2,7% de mujeres, Creamfields (Chile) con un 3,6% y Rockódromo (Chile) con un 4%.

Durante la primera mitad del 2018, Cosquín Rock (Argentina) mantuvo su tendencia a la baja participación femenina con un 2,2%, seguido por Rock al Parque (Colombia) con un 3,6%, Pal’ norte (México) con un 5,8%, Vive Latino (México) con un 5,9%, y Estéreo Picnic (Colombia) con un 7%.

En 2017, NRMAL (México) fue el festival de música en la región que aparece con mayor participación de mujeres (solistas o bandas de mujeres) con un 25,5%, seguido por el festival mexicano Bahidorá con un 23,5%; REC (Chile) con un 20%, Ceremonia (México) con un 18,2%, y Primavera Fauna (Chile) con un 16%.

En la primera mitad de 2018 se ven algunos de estos mismos festivales en el grupo de los cinco primeros en participación de mujeres (solistas o bandas de mujeres): Ceremonia (México) con un 29%, Cumbre del Rock (Chile) con un 23,8%, Comunite (México) con un 21,1%, Bahidorá (México) con un 20,5% y NRMAL (México) con un 22,7%.

Cero paridad

Al analizar cada festival individualmente, la investigación también determinó que ninguno (de los 66 observados) alcanzó la paridad del 50/50 hombre y mujer entre 2016 y 2018.

«Aunque se observan algunas diferencias en los porcentajes representación, se mantiene la preponderancia significativa de los números artísticos protagonizados por hombres en la mayoría de los festivales. Aún más, algunos de los festivales con una gran brecha de género, es decir, con un 85% o más de números artísticos exclusivamente de hombres, no han variado el bajísimo porcentaje de participación de mujeres en sus carteles durante los años analizados», señala el estudio.

Así, Cosquín Rock se mantuvo entre un 11 y 12% de representación femenina (considerando números artísticos protagonizados solo por mujeres y bandas mixtas) en los tres años; Pal’ Norte lo hace con 11-13%; Creamfields con un 4-8%; Fauna Otoño con 8-14%.

En otros casos, existen festivales que presentan mejoras en la participación femenina en un año, pero luego al año siguiente este aumento desaparece, sugiriendo que dichos aumentos de participación no serían producto de un compromiso por la incorporación de más mujeres al cartel del festival, ya que no se produce una mejora constante en el tiempo, destacó el estudio.

Cifras mejores

Sin embargo, hay algunos festivales que empiezan a mostrar cifras de participación igual o mayor al 40%, considerando los números mixtos y de solistas o bandas de mujeres, añaden las investigadoras.

Además, ciertos festivales presentan números que manifiestan una tendencia a mejorar la brecha de género en años consecutivos. Un ejemplo es el festival NRMAL (México), que en 2016 tuvo un 26,3% de participación femenina (mujeres solistas, bandas de mujeres y bandas mixtas), luego en 2017 esta aumentó a 47,5%, presentando un 40,9% en el 2018.

Similarmente, Primavera Fauna (Chile) alcanzó a 41,4% en 2016, aumentando levemente a 44% en 2017. También es interesante mencionar el festival Ceremonia (México), que va desde un 6,9% en el 2016 a un 27,3,% en 2017, para llegar al 35,5% en el 2018. En Estados Unidos, el festival Ruido Fest presenta una participación de mujeres que ha aumentado en forma continua en los tres años, desde un 35,4% (2016) hasta un 43,2% (2018), con un incremento del 10% de participación de mujeres entre el 2017 y 2018.

Finalmente, el festival chileno La Cumbre del Rock se transformó en el segundo festival en la región con más mujeres solistas en su parrilla, con un 23,8%, en la primera mitad de 2018. Sumando mujeres solistas, bandas de mujeres y bandas mixtas, la participación de mujeres en este festival corresponde a un 47,6% de los números artísticos, transformándose en el cartel más paritario de los 17 festivales analizados del año 2018, y aumentando en forma significativa la participación de mujeres respecto del año 2017, con cifras de 21,7%.

La Cumbre ha declarado que para el festival del año 2019 tiene una meta paritaria, es decir, incluir un 50% de proyectos solistas o bandas comandados por mujeres en el cartel del festival.

La paridad como estrategia

A pesar de estos avances, los carteles paritarios siguen siendo muy inusuales, según el estudio.

En 2016, Huffington Post analizó los carteles de 10 festivales en Estados Unidos entre el 2012 y el  2016, reportando que la representación femenina varía entre un 7% y un 34% del total. De la misma manera, Pitchfork analizó 20 festivales masivos realizados en Estados Unidos entre 2017 y 2018, concluyendo que los porcentajes de representación femenina aumentaron mínimamente de un 14% a un 19% durante ese periodo.

Los resultados de este análisis de festivales en América Latina muestran una brecha de género en los escenarios, similar a lo visto en festivales norteamericanos, con bajos porcentajes de representación de mujeres.

Sin embargo, como señalan diversas activistas e investigadoras feministas, como Andrea Giunta, la paridad no es el objetivo final, más bien una estrategia para alcanzar una verdadera equidad, indica el estudio de Ruidosa Fest.

La punta del iceberg

«Estos números globales de participación son solo la punta del iceberg. No solo es un tema de paridad en los números artísticos y porcentajes de participación, es también necesario empezar a mirar más fino. Por ejemplo, analizar quiénes lideran las parrillas de los festivales: ¿cuántas mujeres “headliners” encontramos en las parrillas?», se preguntan las investigadoras.

En febrero de este año, un artículo en Billboard señaló que festivales como Coachella han aumentado el porcentaje de mujeres en sus carteles, pero no como números artísticos principales.

A modo de conclusión, las autoras indican que «cuando no hay una representación paritaria (no solo en la música, sino en las distintas áreas de las industrias creativas) existen sensibilidades, perspectivas e historias que son invisibilizadas y relegadas a un segundo lugar».

«Por ello, desde Ruidosa, esperamos que más festivales en la región se comprometan con la equidad de género, no solo en sus parrillas, sino también en la diversidad de roles», rematan.

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