CULTURA|OPINIÓN
La poesía de Coz se va alternando entre breves observaciones de índole científica y reflexiones profundas que en su conjunto van tejiendo un juego complejo, lleno de matices con emociones que revelan de manera sincera lo más frágil del alma al mismo tiempo que toda su fuerza.
“La jabalina” (Filacteria, 2019) es un poemario que asimila un viaje desde lo más interno del alma, con diferentes estados emocionales y químicos, pasando por tiempos históricos que constituyen un testamento femenino, hasta navegar por los mapas del universo.
La poesía de Coz, autora de “Marea baja” (Cuarto Propio, 2017), se va alternando entre breves observaciones de índole científica y reflexiones profundas que en su conjunto van tejiendo un juego complejo, lleno de matices con emociones que revelan de manera sincera lo más frágil del alma al mismo tiempo que toda su fuerza.
Lo llamativo de estas observaciones científicas, expuestas en un formato de mayúsculas y tipografía de máquina de escribir, es que si bien algunas pueden interpretarse como la parte intelectual, racional y dura, también reflejan una forma de reírse de uno mismo, de tomar distancia, de verse en carne y hueso y como un pequeño punto en el universo. Ejemplo de esto último en la página 28, en la que se lee, emulando el formato original del texto:
desarrollo la paciencia en un tiempo
de espera en un aprendizaje ciego
donde soy calma
donde todo pasa
todo se m u e v e
Y al lado, en la página siguiente:
UN MILLÓN DE PÁRSECS
ES LA DISTANCIA EQUIVALENTE A
3,26 MILLONES DE AÑOS LUZ
Δ= 1/β
En este contraste se puede distinguir esa conciencia de que el tiempo interno es completamente distinto al externo, como dimensión física, y genera incluso un cierto humor con respecto a ese dolor que a veces genera una sensación de atrapamiento o estancamiento mientras el mundo sigue girando. Es una forma en la que se reconoce el dolor para poder seguir avanzando.
En varios poemas existe un diálogo que se podría interpretar como si fuera con un otro, tal vez un amor perdido o un vínculo familiar, pero también consigo misma. Esto permite muchas lecturas de cada poema, adquiriendo nuevos significados y dimensiones. En algunos textos también se puede apreciar un proceso de renacer, reinventarse, sanarse de los estigmas y las heridas del pasado, lo que surge como el conflicto principal de este poemario.
Restringir
la maldita forma subyacente que hace dudar
cambiar el plano nadar contracorriente
hasta volver
a prohibirte
la sonrisa porque la culpa
y el deber ser son intocables
y vuelves a tus vendas
pero apareces
y las obligas a florecer
(p. 44)
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La jabalina
Alejandra Coz
Filacteria
57 páginas
