CULTURA
La cinta del director Bong Joon-ho ganó el premio Palma de Oro del festival de Cannes y ha sido descrita como una de las películas que hay que ver del 2019. El próximo miércoles 8 se exhibirá en el Festival de Cine Wikén.
La película “Parasite” cuenta la historia de la familia Kim, donde padre, madre, hijo e hija viven en un departamento minúsculo a la altura de la calle en Corea del Sur, y el calor, la lluvia y el día a día de la ciudad hacen que sea un lugar poco habitable. La familia subsiste a través de trabajos irregulares y aprovecha cualquier servicio gratuito que se les aparezca.
Sin embargo, al hijo se le presenta la oportunidad de trabajar como profesor particular en una casa donde gozan de todos los privilegios de un país desarrollado. Es ahí donde el joven ve esa ocasión como única forma de escapar de la pobreza y comienza a idear un plan para que toda su familia trabaje en la casa. Llegan entonces –como dice irónicamente el título– como parásitos.
La película será exhibida el próximo miércoles 8 de enero dentro del Festival de Cine Wikén en el Parque Bicentenario de Vitacura, el cual mostrará distintas películas entre el 3 y el 12 de enero.
Por otro lado, la familia de clase alta goza de una vida completamente opuesta. La madre es una mujer ingenua que no ve más allá de su realidad, la hija mayor es una adolescente enamoradiza, el hijo menor es un niño inquieto que juega en su propio mundo y el padre es un hombre frío que solamente trabaja. Es la casa luminosa y espaciosa de la familia rica donde transcurre la mayoría de las escenas.
“Parasite” es el séptimo largometraje del director surcoreano Bong Joon-ho, él cual ha transitado por distintos géneros. La cinta es difícil de clasificar: por un lado juega con la ironía, el humor negro y el misterio pero también es muy limpia, especialmente gracias a las escenas en la casa de la familia burguesa, y tiene una gran crítica social.
En el Festival de Cannes fue la cinta ganadora del Palma de Oro y ha sido alabada por medios y críticos de cine de todo el mundo, de tal forma que la película sobre la lucha de clases se transformó en un éxito mundial.
Actualmente, el film tiene tres nominaciones a los Globos de Oro, que incluyen mejor película, mejor dirección y mejor película extranjera, y seguramente será nominada como mejor película de habla no-inglesa en los premios Oscar.
La exitosa llegada que ha tenido se debe a su brillantez, pero sin duda a que las desigualdades sociales y las realidades que representa no son exclusivas de Corea del Sur, sino que se repiten en todo el mundo. Cabe recordar que una de las primeras consignas del estallido social de octubre fueron las desigualdades que existen actualmente en Chile.
La crítica al capitalismo es una temática recurrente en las películas de Bong Joon-ho. Antes filmó “Snowpiercer” (2013), “Memories of murder” (2003) y la polémica “Ojka” (2017), que fue estrenada en Netflix y no en salas de cine. En todas trata desde distintos géneros la voracidad del capitalismo, desde las desigualdades hasta la destrucción del medioambiente.
«Parasite» transita por imágenes sin sutilezas, desde la inmensidad de la casa de los ricos y la absurdidad de sus gastos hasta la utilización estética de la pobreza, que no busca conmover, sino que incomodar. Eso va desde las locaciones utilizadas hasta la construcción de los personajes. La familia Kim es inteligente e ingeniosa, solo que no nació con los privilegios de la otra. Sin embargo, sus miembros están dispuestos a todo por surgir como familia.
La película también se caracteriza por la utilización del humor negro pero da vuelcos totalmente inesperados, lo que la hace difícil de clasificar. Es una cinta sorpresiva, llena de ironías y con fuerte contenido crítico. El director elige no criticar despectivamente a la clase alta ni victimizar a las clases bajas, sino que exponer cómo funciona el capitalismo.
