CULTURA|CIENCIA
“Cerebro sin filtro” y “En Casa ¿Qué pasa? orientan a niños y jóvenes sobre esta pandemia. Test que permiten diagnosticar coronavirus, hasta el funcionamiento del cerebro y sistema nervioso, se encuentran en éstas aplicaciones.
¿Quiere comprender las diferencias entre los distintos tipos test existentes para detectar el Coronavirus? ¿Tiene preguntas acerca del COVID-19 y no sabe a quién recurrir? Las respuestas las puede encontrar ingresando a Instagram y buscar “Cerebro sin Filtro”, la plataforma educativa creada por un grupo de investigadores con el objetivo de acercar la ciencia a los adolescentes. Los científicos de la Universidad Católica, con el apoyo del Instituto Milenio de Neurociencia Biomédica, BNI, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile -atendiendo al escenario actual de pandemia- decidieron enfocarse en el desarrollo del Coronavirus y sus implicancias, siempre orientado a un público juvenil.
Además, para la comunidad en general, la mesa de extensión del Departamento de Neurociencias de la Facultad de Medicina, con participación de científicos del BNI, desarrolló “En casa, ¿qué pasa?”, un sitio web orientado a colaborar con la salud mental de las personas que sufren cuarentena en este período. “También nos preocupamos de aquellos ciudadanos que, aun no estando en cuarentena obligatoria, deben mantener de manera responsable la distancia social. El objetivo que nos planteamos es entregar herramientas de salud mental, autocuidado y toma de decisiones responsables durante este período tan inusual que vivimos”, señala la Dra. Jimena Sierralta, directora alterna de la entidad.
Al ingresar en el sitio web de En casa ¿Qué pasa?, y en el instagram de la web serie “Cerebro sin Filtro” (@cerebrosinfiltro), el público encuentra videos generados por especialistas en salud -tanto de de niños, adolescentes, adultos y adultos mayores- al igual que material de apoyo como infografías y datos para niños con información relevante y veraz.
“Originalmente la idea de “Cerebro sin Filtro” partió de un grupo de investigadores de la Universidad Católica. Teníamos el objetivo de llegar hacia la comunidad, específicamente a los adolescentes, abordando temas de bienestar y salud mental. Muchas veces la ciencia publica sus resultados, pero no captura las inquietudes propias de la audiencia a la cual se quiere llegar” señala Florencia Álamos investigadora del BNI y co-creadora de esta plataforma.
Agrega que este fue uno de los puntos que orientó esta iniciativa. “Buscamos llegar a los jóvenes de forma cercana y con temas que aportarán en sus desafíos diarios. Al poco tiempo de haber sido creado el sitio en Instagram alcanzó los 3500 seguidores y nuestro primer video en esa misma red social superó las 30.000 visualizaciones. Actualmente nuevamente queremos aportan con nuestros conocimientos científicos, es por eso, que con el apoyo del BNI hemos decidido cubrir la contingencia desde la mirada científica, pero en formatos atractivos y didácticos”.
Por su parte, el Dr. Pedro Maldonado, investigador del BNI y director del Departamento de Neurociencia de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, explica que esta es una plataforma interactiva, “donde existe comunicación todo el tiempo y se desarrolla contenido en base a las dudas que realizan los usuarios. Es una forma de interactuar con la comunidad científica y abordar temas de bienestar y salud dirigidos a adolescentes”
Es por esta razón que el equipo de neurocientíficos recoge las preguntas y temas que exponen desde las dudas de los mismos jóvenes, para elaborar así un proyecto con un lenguaje e imágenes fáciles de comprender por toda la población, teniendo así una mejor llegada a toda la comunidad. La información que comparten es absolutamente gratis por lo que pueden acceder a ella padres, profesores y alumnos.
Además de Pedro Maldonado y Florencia Álamos, participan en la puesta en marcha de este proyecto Carolina Astudillo, Felipe Bello, Leonie Kausel, Ismael Palacio, y otros miembros de la fundación “Ciencia Impacta”, organización que alberga la iniciativa.
“Con la contingencia empezamos a tener una demanda muy alta del público en temas relacionados con el Coronavirus” señala Carolina Astudillo, investigadora BNI y coordinadora de contenido de la plataforma de Instagram.
Este interés llevó al equipo a explicar -de una manera simple y didáctica- la diferencia entre los test de diagnósticos que se pueden utilizar en pacientes con síntomas de COVID-19. “A propósito de la capacidad efectiva de detectar la enfermedad que tiene nuestro país -y de algunos falsos positivos que han causado controversia en la opinión pública- decidimos utilizar material gráfico que detallara el funcionamiento y características del procedimiento conocido como PCR y los test rápidos que se utilizan en algunos países”, explica Carolina Astudillo.
Además de este contenido han difundido información sobre otros temas relacionados a la pandemia, los que se complementan con concursos y juegos afines con la neurociencia, como el funcionamiento del cerebro o el sistema nervioso.
Para llegar de manera más directa a los adolescentes, los investigadores decidieron transmitir el mensaje a través de una bloguera. “La elegida es 100.tífica (Fernanda Finsterbusch), conocida en el mundo de las redes sociales como Tífica”, comenta Álamos.
De esta manera los estudiantes preguntan y el equipo busca al experto científico que responda de manera clara y precisa las dudas planteadas por el público, pero a través de alguien cercano y de su edad.
“Somos un grupo de investigadores que formamos la fundación “Ciencia Impacta”, de la cual el Dr. Pedro Maldonado es uno de sus directores”, destaca Álamos. “Es un proyecto Explora que partió con el Ministro de Ciencias Andrés Couve, cuando era director de BNI”.
Al estar dirigido a un público adolescente el equipo decidió realizar un análisis exhaustivo que les permitió descubrir algunos factores importantes para materializar el proyecto.
“Lo primero es que los jóvenes sí tienen interés en contenidos científicos, pero se preocupan de materias que muchas veces pueden no resultar atractivos para los adultos. También descubrimos que no quieren que los temas sean impuestos por sus profesores o padres, sino que ellos quieren tener la total libertad de decidir que abordar. De esta manera, el público que nos sigue ha empezado a demandarnos mucha información científica”, finaliza la Dra. Florencia Álamos.
