CULTURA
Actualmente se tramita un proyecto en la Cámara, sin urgencia, que permitiría proteger y sustentar los Sitios de Memoria en el país. Diversas agrupaciones han pedido perfeccionar el texto y acelerar su tramitación.
Coincidiendo con la preocupación manifestada por diversos sitios de memoria a lo largo del país, en torno a la real protección y sustentabilidad de estos espacios, el Parque Cultural de Valparaíso – Ex Cárcel manifestó la necesidad de avanzar hacia una Ley de Sitios de la Memoria en Chile, tal como ocurre en muchos países con procesos de justicia transicional como Argentina, Uruguay y España, entre otros.
Si bien hay varias mociones que se han presentado al respecto, las agrupaciones que impulsan cambios legales apuntan su mirada al proyecto que modifica la Ley 17.288 sobre Monumentos Nacionales para regular los Patrimonios Culturales, señalando que, si bien es un avance, requiere de modificaciones.
Desde el Parque Cultural de Valparaíso-Ex Cárcel, emblemático sitio de memoria de la región, la presidenta del directorio, Gianina Figueroa, señaló que “efectivamente existe una intención clara de avanzar legalmente para contar con una real recuperación, conservación, financiamiento y protección de los sitios de memoria en el país”.
“Sintonizamos plenamente con los esfuerzos que están realizando diversas organizaciones de la sociedad civil y sitios de memoria para avanzar al respecto. Estimamos que no basta con sólo reformar al Consejo de Monumentos Nacionales, sino que es necesario avanzar, tal como ocurre en muchos países, en crear la categoría de Sitio de Memoria como parte de las categorías de protección dentro de la ley N° 17.288 sobre Monumentos Nacionales y contar con una Ley de Sitios de la Memoria, lo que nos permitiría avanzar en el resguardo y protección efectiva del patrimonio de la memoria y los derechos humanos de Chile”.
Hace unos días, la comisión de Derechos Humanos de la Cámara, presidida por la diputada Lorena Fries, recibió a la Ministra de Bienes Nacionales; al Subsecretario de Derechos Humanos; a la Coordinadora Nacional de Sitios de Memoria; a la Agrupación Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, y a la Agrupación de Derechos Humanos y Sitio de Memoria de Macul para analizar esta materia.
Cabe señalar que Chile fue el primer país del Cono Sur en recuperar un ex recinto de detención y tortura. En 1994 un movimiento de la sociedad civil logró recuperar Villa Grimaldi. Este caso sentó un precedente para lo que sería la recuperación de los siguientes recintos que han sido señalizados en Chile, y el papel que le cabe al Estado en este proceso.
El Parque Cultural de Valparaíso – Ex Cárcel es parte de la Red de Sitios de Memoria del país y de la Red de Sitios de Memoria Latinoamericanos y Caribeños (RESLAC), red regional que conforma la Coalición Internacional de Sitios de Conciencia; una articulación mundial que tiene más de 275 miembros en 65 países.
Desde esa instancia, el Parque Cultural de Valparaíso – Ex Cárcel junto a numerosas organizaciones y sitios, ha promovido internacionalmente numerosas acciones a lo largo del tiempo en una agenda sobre el mantenimiento y resguardo de sitios y memoriales desde un abordaje integral de las políticas públicas de memoria, lo que se traducirá en la próxima sesión temática ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA), organismo que entre sus funciones tiene “el monitoreo de la situación de los derechos humanos en los Estados miembros” y que en el 2019 publicó “Principios sobre Políticas Públicas de Memoria en las Américas”, con una serie de recomendaciones a los Estados Miembros.
Al respecto, el director ejecutivo del Parque Cultural de Valparaíso y miembro de las redes, Erick Fuentes, indica que “como Estados Miembros efectivamente estamos obligados a disponer de mecanismos efectivos e integrales para garantizar el derecho a la verdad, tanto de las víctimas de graves violaciones a los derechos humanos, como de la sociedad en su conjunto. Además, con la investigación, juzgamiento y sanción de los responsables de graves violaciones a los derechos humanos; la reparación integral de los daños sufridos por las víctimas de graves violaciones de derechos humanos; y el establecimiento de mecanismos que eviten la repetición de las graves violaciones a los derechos humanos ocurridas”.
En Chile, los sitios de memoria expresan la voluntad democrática de impedir que episodios tan trágicos como fundamentales para el país caigan en el olvido y puedan por ello repetirse en el futuro. Así quedó recogido en el Informe Valech en 2010 al establecer que para ahondar el aprendizaje colectivo y la calidad democrática de nuestro país es necesario declarar “los principales centros de tortura como monumentos nacionales y la creación de memoriales y sitios recordatorios de las víctimas de violaciones a los derechos humanos y violencia política”.
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