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Celeste Rojas, cineasta: “Los fondos son relevantes para la construcción de la cultura de un país”

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Emilia Aparicio
Por : Emilia Aparicio Periodista El Mostrador
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La cineasta, fotógrafa y artista visual Celeste Rojas Mugica fue reconocida con el premio a Mejor Película en la competencia nacional de FIDOCS por su obra “Una sombra oscilante”. “Empecé escribiendo sobre esas fotos mucho antes de imaginar la posibilidad de hacer una película”, dijo.


Resumen
Síntesis generada con OpenAI
Celeste Rojas Mugica, cineasta y fotógrafa, ganó el premio a Mejor Película en FIDOCS con “Una sombra oscilante”, basada en el archivo fotográfico de su padre, un exiliado de la dictadura de Pinochet. La película mezcla imágenes, sonidos experimentales y elementos ficcionales, cuestionando las narrativas oficiales. La artista reflexiona sobre cómo la imagen construye ideologías y critica la limitada financiación al cine en Chile, destacando la necesidad de diversificar los modelos de producción cultural para fomentar la creación libre y amplia en la industria cinematográfica.
Desarrollado por El Mostrador

El padre de Celeste Rojas Mugica fue un activo participante en la resistencia contra la dictadura de Augusto Pinochet, lo que lo llevó a vivir en el exilio por toda América Latina. Décadas después, su hija se sumerge en la antigua colección de negativos de las vidas pasadas de su padre.

La cineasta, fotógrafa y artista visual Celeste Rojas Mugica fue reconocida con el premio a Mejor Película en la competencia nacional de FIDOCS por su obra “Una sombra oscilante”. 

En esta entrevista con El Mostrador, Rojas Mugica explicó que el proyecto surgió de un extenso trabajo personal con el archivo fotográfico de su padre, el cual fue digitalizado y analizado durante varios años. “Empecé escribiendo sobre esas fotos mucho antes de imaginar la posibilidad de hacer una película”, compartió la cineasta. El filme se estructura alrededor de estas imágenes y las reflexiones que generan, cuestionando los límites de lo que las fotografías pueden narrar o sugerir.

El relato de la película rechaza la estructura narrativa tradicional y propone un esquema diferente y original. Rojas Mugica describe su enfoque como “lúdico e indeterminado”, integrando elementos ficcionales para reinterpretar aspectos de la vida de su padre. Esto incluye la construcción de un “personaje” que da cabida a diversas lecturas y resonancias históricas.

Un elemento crucial del filme es su diseño sonoro. Para ello, la cineasta colaboró con Roberto Collío en el registro del sonido directo y con Julián Galay en el diseño sonoro. Los sonidos utilizados provienen de los materiales y procesos técnicos vinculados al desarrollo de la película, como el agua utilizada en el revelado o el funcionamiento de máquinas. Este enfoque refuerza la atmósfera inmersiva y experimental de la obra.

La fascinación de Rojas Mugica por la imagen técnica y su relación con procesos históricos son temas centrales de su trabajo. Desde su infancia, influenciada por su padre, la artista desarrolló una conexión emocional con la fotografía. Esta relación, que comenzó como un juego alquímico en el cuarto oscuro, evolucionó hacia una reflexión profunda sobre la memoria, el archivo y la ambigüedad de las imágenes.

“Una sombra oscilante” no solo relata la historia del padre de la cineasta, sino que también invita al espectador a cuestionar las narrativas oficiales y a explorar los matices de la historia desde la subjetividad de la imagen.

“Me interesa pensar la historia, pensar ciertos acontecimientos, por lo general ligados a la violencia institucional, y la imagen es clave, porque a través de la imagen se controla, a través de la imagen se generan imaginarios, se construyen ideologías“, señaló la cineasta.

Además, se refirió a la industria del cine en Chile y Argentina, lugares donde ha desarrollado su carrera.

“En Chile la cosa es como una lotería porque realmente la cantidad de películas que se pueden financiar con el Fondo Audiovisual por año es un porcentaje demasiado ínfimo en relación a lo que se escribe y lo que se busca construir”, expresó.

 También indicó que pudo imaginar la posibilidad de esta película gracias a que existía un fondo que me permitía creer que yo iba a poder hacer una película”.

 “Hay mucha gente que ni siquiera escribe una película porque ya sabe que esa película probablemente no va a ser financiada por el fondo, que además tiene unas formas estrictas, estables y clásicas de pensar los guiones y las formas de producción. Entonces yo creo que los fondos son absolutamente relevantes para la construcción de la cultura de un país. También hay que pensar en alternativas a ellos porque esas formas también condicionan qué tipo de películas vamos a poder hacer  y hay que saber encontrar otras”, concluye. 

Revisa la entrevista completa a continuación:

 

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