CONGRESO FUTURO
Créditos Imagen: Agencia Uno
La modernización del transporte público en Chile busca reducir brechas regionales con medidas como sistemas GPS, medios de pago electrónicos y participación ciudadana, según Alan Sepúlveda, experto invitado a Congreso Futuro.
¿Cómo organizar el transporte público de una ciudad en beneficio de la calidad de vida de sus habitantes? Alan Sepúlveda Neira lleva casi 1o años trabajando en el Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones, desde distintos cargos, ha colaborado en la planificación del sistema de transporte en distintas ciudades de Chile.
“El transporte público, a juicio nuestro, es uno de los elementos de una ciudad, de los sistemas que conforman una ciudad, que resultan uno de los más incidentes a nuestro juicio. O sea, tener un buen o un mal sistema de transporte público les cambia la vida a los ciudadanos”, expresa.
El ingeniero civil, oriundo de Concepción, es uno de los invitados de Congreso Futuro, que se realizará desde el 13 al 18 de enero, tendrá como sede principal el Centro Cultural CEINA y por tercer año consecutivo se desplegará por todas las regiones del país.
En el evento expondrá sobre el impacto que tienen los datos en la planificación y las políticas públicas del transporte.
Sepúlveda Neira explica que en la historia de las políticas del transporte público existe un déficit importante en la data.
“El gran déficit que existe, o que existía, era que esa información era estática. Resultaba más bien como una fotografía de un minuto. Los consultores y el ministerio desarrollaban tareas que eran del orden de ir a contar cuántos pasajeros por bus teníamos, cuántos pasajeros se movían de un lugar a otro, cuántos buses, en qué horario, cuáles eran las actividades que movilizaban a dicho pasajero, a través de estudios de demanda, de encuesta de origen-destino u otras”, sostiene.
Sin embargo, esa información que describe el experto respondía a un corte temporal en particular y no permitía ver el comportamiento de los usuarios permanentemente.
De este modo, la incorporación de nuevas herramientas tecnológicas ha permitido obtener mayores y mejores datos y, por ende, modernizar y enriquecer el sistema público de transporte.
“Hoy día, por ejemplo, con contadores de pasajeros, con información GPS de los buses, o con información que los propios teléfonos celulares nos pueden entregar, tenemos acceso a información permanente y dinámica durante los 365 días del año, en todo momento”, afirma.
En ese sentido, explica que el enfoque del Ministerio de Transportes se centra en modernizar el transporte público mediante contratos más exigentes, flotas renovadas, electromovilidad, accesibilidad universal y tecnología avanzada.
Entre los ejemplos, menciona medidas que incluyen medios de pago electrónicos en Chillán y opciones como QR o billeteras digitales, mejorando la seguridad y ofreciendo beneficios tarifarios similares a los de Santiago.
Además, el experto menciona que es crucial basar las políticas públicas en la participación ciudadana.
“Más allá de los aspectos técnicos y tecnológicos que estamos convencidos que hay que implementar, necesitamos escuchar a los ciudadanos, ellos son el usuario por excelencia. Más allá de las políticas públicas que podríamos establecer, tener políticas públicas sin escuchar a la ciudadanía resulta bastante poco certero”, concluye.
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