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El infinito amor al libro CULTURA|OPINIÓN Crédito: Santiago Basallo

El infinito amor al libro

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Pablo Bravo
Por : Pablo Bravo Periodista y escritor.
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La escritora Irene Vallejo es la mente detrás de “El infinito en un junco. La invención de los libros en el mundo antiguo”, un intenso ensayo sobre la creación y evolución de los libros que ha cautivado a cientos y miles de lectores desde su lanzamiento en 2019.


En los próximos días visitará nuestro país la filóloga y escritora española Irene Vallejo, con motivo de su participación en el ciclo La Ciudad y las Palabras (7 de noviembre), en el Campus Lo Contador de la Universidad Católica, así como en el Festival Puerto de Ideas (10 de noviembre), en Valparaíso.

Se trata de una oportunidad para compartir en primera persona con la mente detrás de El infinito en un junco. La invención de los libros en el mundo antiguo, un intenso ensayo sobre la creación y evolución de los libros que ha cautivado a cientos y miles de lectores desde su lanzamiento en 2019. A la fecha, esta publicación ya ha sido traducida a más de 30 idiomas, cuenta con más de 45 ediciones y ha llegado a más de 50 países.

La obra consiste en una revisión histórica a 30 siglos de escritura y lectura y, más aún, a su perpetuación por medio de ese artefacto que hoy llamamos libro en sus diversos formatos: humo, piedra, arcilla, papiro, seda, pliegues de cuero, madera, códices, papel… hasta los actuales e-books.

No se trata, en todo caso, de un relato cronológico sobre los diferentes soportes del libro y sus mecanismos de almacenamiento y distribución. Es más, no obstante su extraordinaria investigación y documentación, la autora se libra del estilo academicista y, aunque se configura como un ensayo, el texto tiene todo el sabor de una gran novela de aventuras.

Precedido por un prólogo y seguido de un epílogo, el libro está estructurado en dos partes: “Grecia imagina el futuro” y “Los caminos de Roma”. Esta revisión histórica es enriquecida por recuerdos de la propia Irene Vallejo, además de agudas observaciones sobre la relación entre el mundo antiguo, los libros y nuestro presente. Eludiendo el sometimiento a un análisis lineal, el ritmo de la narración avanza en una armónica alternancia de pasajes de cómoda lectura salpicada de anécdotas acompasadas con una apabullante cantidad de información.

¿Sabía usted que en la Antigüedad lo normal era leer en voz alta, no “mentalmente” como hoy solemos hacerlo? ¿Sabía Ud. que en los textos antiguos las palabras aparecían juntas, sin ningún signo o separación, porque así se podía ahorrar en el costo del material?

¿Sabía usted que la palabra “pergamino” viene de la ciudad turca de Pérgamo, quienes se vieron obligados a escribir en pieles animales porque la ciudad de Alejandría les restringió el suministro de papiros? ¿Sabía Ud. que en la dictadura de Franco, en España, era posible conseguir una impresión del Quijote, en cuyo interior venían los tratados de Karl Marx (para burlar la censura)?

Irene Vallejo consigue combinar su formación filológica con su placer por la narración. Desbordando sensibilidad, El infinito en un junco exhibe un tono ameno, didáctico y divulgativo que facilita el acercamiento de la historia de los libros al público de forma sencilla y seductora.

Más que un homenaje a la historia del libro, la escritura y la lectura, El infinito en un junco es una verdadera declaración de amor.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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