Poco después, conoce a Anne Clark, madre de Gordon Matta Clark y Sebastián-Tatán-. Celoso del talento que desplegaba Gordon y su repercusión mediática, se alejó de su hijo cuando aparecieron vastos artículos exaltando su obra consistente en fotografiar edificios partidos.
Para ingresar al universo de Roberto Matta fue menester apelar a una serie de trucos.
Una tarde llamo a su casa en la rue de Lille frente al Museo d Órsay. Atiende Germana Ferrari:
-Buenas tardes, habla….de la Embajada de Chile (no menciono con quien quiero hablar).
-¿Dónde estás ahora?
-En la sede.
-Ven inmediatamente.
El truco constituido en haber llevado la conversación en alemán. Esto la desconcertó pues Germana es hija de los socios mayoritarios de un gran consorcio farmacéutico alemán y siempre la llaman por su esposo, rara vez a ella.
Veinte minutos después, luego de cruzar el umbral de un edificio que da a la calle y atravesar un patio plagado de esculturas de Matta-de escaso interés en los mercados-, tomaba té en una mesita con esta pareja muy singular.
Discutieron todo el rato por cualquier asunto en francés y español.
Finalmente Germana nos dejó solos y le conté el propósito de mi visita. Escribir sobre él, ya sea ensayo libro o reportaje.
-Mira, de niño jugaba con Jorge Alessandri, que era muy solitario. Me llevaban a su casa y era su único amigo (fake: el ex presidente había nacido en 1886 y el artista en 1910-aunque falsearon su fecha para que coincidiera 11-11-11,)
Luego de dedicarse a muebles y arquitectura partió a Nueva York donde comenzó a incursionar entre los pocos dadaístas residentes en Estados Unidos.
Poco después, conoce a Anne Clark, madre se Gordon Matta Clark y Sebastián-Tatán-. Celoso del talento que desplegaba Gordon y su repercusión mediática, se alejó de su hijo cuando aparecieron vastos artículos exaltando su obra consistente en fotografiar edificios partidos. Los dos hermanos vivieron un tiempo en en Chile y Gordon contrajo pulmonía en Santiago.
Adultos en Nueva York Tatán se convierte en la mochila de su hermano por sus intentos de suicidio, sus internaciones en sanatorios y escapadas. De hecho una tarde en que Gordon sale a comprar cigarrillos, Tatán se quita la vida.
Matta ya estaba en Francia.
-Usted me va a reprochar no haber asistido a los funerales de ninguno. Fue egoísmo quizás, pero me creía enviado de Dios para dedicarme al arte y nada más que al arte.
Andre Breton lo expulsa del surrealismo y el partido comunista toma distancia de Matta a raíz del suicido de Arshile Gorky.
En efecto, el pintor no pudo superar que su amigo Roberto se escapara con su esposa y se quitó la vida. En revancha Breton y los intelectuales en Europa le hicieron la cruz.
De regreso en Italia conoce a Melanie Pope, y fue madre de Federica-de constante presencia en Chile y un espejo de su padre- y de Ramuntcho que ha hecho trabajos musicales con John Williams y otros destacados artistas.
Melanie es propietaria de una pequeña isla en el Adriático, un mundo demasiado pequeño para Matta y regresa a tierra firme Italia donde conoce a
Angela Farranda, actriz y contrae matrimonio para dar a luz a Pablo Echaurren, mal inscrito en el civil romano. Es destacado autor de dibujos políticos de ultraizquierda, de portadas de libro y unas historietas similares al Pato Donald. Casado con Claudia apunta: El único hijo de esta pareja soy yo.
Germana Ferrari vino como cierre de la saga de matrimonios. Ella le sobrevivió a su muerte.
Los líos de herencia fueron de tribunales y finalmente Germana quedó con el 50 por ciento de sus obras y al fallecer, Alise la única hija de ésta unión (malvadamente apodada Urraca por su madre) es la actual propietaria del legado a Germana en Tarquinia, su casa de verano.
En cuanto a nosotros, todos los miércoles se repetía la ceremonia del té y el contrabandear chocolate o petacas de wiski (Jorge Edwards cometía la misma función), elementos prohibidos en la dieta del artista.
-Cuando hay mucha gente me convierto en payaso porque soy esencialmente tímido. También desinteresado, dejé tres casas sin llevarme nada.
Y cambia de tema: “Cuando vino Frei una señora me pregunta dónde colocarme la medalla y yo obviamente le respondí en el poto. Asimismo a la salida me preguntan que pienso de la condecoración y respondo Brum brum. ¿Qué más iba a decir?”
En esos miércoles mientras yo grababa a Matta, Ferrari hacia otra tarea consistente en autentificar grabados falsos del artista, haciendo un doble negocio. Jamás una pintura. De manera que esto explica la cantidad de grabados falsos autentificados que circulan en el mundo y el bajo precio que ostentan. En la galería Alencon, al lado del palacio de las Monedas compré cuatro en 200 dólares.
Lo de la grabación fue gracias a Ferrari quien quiso que escondiera la Sony pero Matta a la segunda vez me dice: ¿Por que no saca la maquinita de una vez por todas y la coloca encima de la mesa?
Como había convenido, al cabo de diez semanas, le entregué todas las cintas a la esposa del pintor sin copia para mí. La razón fue humillante:
Recojo el libro sobre Marta escrito por el filósofo Eduardo Carrasco y era como si me hubiese dictado el contenido a la grabadora. Estaba todo dicho, todo al cien por ciento. ¿Para qué quería esas cintas que hubieran sobrecargado la maleta en mi regreso a Chile si nada aportaban?
Matta el insolente que en medio de la cena del Eliseo en homenaje de los Chirac a los Frei en su visita de Estado, gritaba: “Matta, pico, cama”.
Y reía a carcajadas.
El comedor es inmenso, 200 personas conversaban de manera que pasó inadvertido
En otro rincón silencioso Raúl Ruiz susurraba: “Qué fastidio tener que esperar el fin de cada discurso para tomar este vino tan exquisito”.
Y yo, rescaté lo a manera de off de reccord, de la mansión de la rue de Lille.