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Marinello, retrato de la coautoría CULTURA|OPINIÓN

Marinello, retrato de la coautoría

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Elisa Massardo Parancán
Por : Elisa Massardo Parancán Licenciada en Historia y Estética y diplomada en Periodismo Cultural, Crítica y Edición
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El foto libro “De las Yeguas a Lemebel” recopila por primera vez las fotografías de Marinello, en un solo volumen, donde los protagonistas son evidentes. Además expone más fotografías que las normalmente vistas en exposiciones o que circulan por redes sociales.


A Pedro Marinello no le gusta la exposición y, como muchos fotógrafos, prefiere el “detrás de escenas”. Es reconocido en el mundo de la fotografía y en de la moda, pero poco en el mundo del arte visual, sobre todo porque pareciera quedar inmerso en cierto olvido frente a figuras tan relevantes como sus retratados: Pedro Lemebel, Pancho Casas y, juntos, en Las Yeguas del Apocalipsis.

Pero hay que hablar de él, de Marinello, quien forjó una amistad que ha durado décadas con estos performance, y es una de las pocas personas a las que Lemebel nunca le gritó, según contaron en el lanzamiento; y alguien que entiende muy bien esa simpleza de vida que -aún y validando los derechos de autor-, implica comprender que el trabajo a veces se sale de los márgenes de la legalidad o del pago de la autoría.

Así lo retrataron en el lanzamiento del libro que se realizó en Ñuñoa, contando que una vez, en el Biobío, le dijeron que estaban plagiando su obra vendiendo impresiones en la calle. Marinello se acercó al vendedor y le ofreció un archivo en mejor calidad para que pueda imprimir la fotografía sin que se pixele. Esa comprensión del mundo, del sistema, de la realidad, la compartía con su amigo Lemebel, quien apoyó a quienes pirateaban sus libros y los ponían al alcance de las personas, porque hay obras que son pensadas para el pueblo y no solo para la elite.

“De las Yeguas a Lemebel: fotografías Pedro Marinello Kairath”, no es un libro sobre Pedro Lemebel, ni Pancho Casas, ni las Yeguas del Apocalipsis. Es un libro de fotografías de Pedro Marinello, quien los retrató en diversas oportunidades, en forma individual y colectiva.

La distinción no deja de ser menor, habla de autoría, de potestad, de historia. Explica de manera rápida y simple cómo las obras de fotoperformance o videoperformance pueden ser coautorales, desde la idea hasta el registro. Y eso hace Andrea Serrano, quien ejecutó el proyecto, mostrar a quien está detrás de cámara, exponer al autor y destacarlo.

Sobre las Yeguas del Apocalipsis, Serrano explica: “En el fondo de este volumen late una intensa relación que tuvieron con el fotógrafo Pedro Marinello, quien los retrató por años en diferentes encuentros y que llegaron a convertirse en una amistad”.

Esta publicación recopila por primera vez las fotografías de Marinello, en un solo volumen, donde los protagonistas son evidentes. Además expone más fotografías que las normalmente vistas en exposiciones o que circulan por redes sociales, así nos permite conocer los diversos registros de “Las Dos Fridas” (1989), conocer la manera en que se crearon las obras y profundizar en los detalles de las mismas.

El libro de Serrano sobre Pedro Marinello, sin duda, pone en cuestión un tema relevante en un país donde se realiza bastante performance: quién es el autor, cómo se trabaja con los derechos en la coautoría, qué pasa con las ideas originales y con el registro.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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